8- Ojos que no ven... Gafas que tengo que comprar

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Y allí estaba. En la cafetería. Con las gafas, o lo que quedaban de ellas mejor dicho, en la mano izquierda y los apuntes debajo del brazo, saqué el dinero del bolsillo y lo metí en la máquina expendedora. Agua. Ya se me habían quitado las ganas de todo. Acababa de quitar el tapón a la botella cuando el timbre que daba la señal del comienzo de la vuelta a las aulas sonó. Ya no tenía tiempo y todo por culpa de aquel chico.

Pasé las últimas tres horas que me quedaban cogiendo apuntes como podía ya que mis gafas habían sufrido un pequeño accidente y era imposible ponerselas. ¡Así como voy a mejorar mis notas! (Ya tenía excusa jaja aunque había decidido cambiar mi expediente a partir de ahora y este accidente no me hizo ni pizca de gracia).

***

Las 15:00. ¡Por fin puedo irme a casa!

Recogí todo lo que tenía encima de la mesa, lo metí en el bolso y salí del centro.

El colegio era bastante grande pero lo que más me gustó fueron sus enormes jardines, llenos de estudiantes descansando tumbados, hablando y riendo.

Algún día yo también estaré así -pensé- si es que lo consigo...

A lo que iba.

Me encontraba andando por esos jardines encendiendo mi reproductor de música cuando...

"Sueña conmigo"Where stories live. Discover now