Capítulo. 18

287 24 54
                                    


Lo miro tratando de controlar mi respiración, él me mira aún también y puedo jurar que se encuentra mal. Camino hacia él casi corriendo, y cuando estoy más cerca abre la puerta del auto y avienta el ramo con fuerza hacia los asientos.

—No sabía que tenías novio —es lo primero que dice.

—No lo tengo —trato de no reír, pero es imposible.

—Te besó.

—En la mejilla —le corrijo.

José está celoso, y por una extraña razón me parece tierno de su parte. Tomo su mano y la acaricio observando los tatuajes en ella, posiciono mis ojos de nuevo en los suyos y sonríe.

—Creo que...

—Estabas celoso —lo interrumpo sonriendo también.

—Quisiera decir que no, pero no puedo ocultar lo que es obvio —acaricia esta vez él mi mejilla derecha—. Como tampoco puedo ocultar las ganas que tengo de besarte...

— ¿Y qué esperas para hacerlo? —Susurro.

Junta sus labios con los míos, y por primera vez después de mucho tiempo siento una paz enorme en todo mi ser. Una sensación recorre mi sistema cuando estira de mi labio inferior, y el cosquilleo en mi estómago se hace cada vez mas grande.

Sus labios son suaves, y me hacen sentir en el paraíso. Me separo para tomar aire y pego su frente con la mía, respirando el mismo aire juntos.

—Me tienes loco, Thalía —su voz ronca hace que se me detenga el corazón, yo también lo estoy por él.

—No quiero arrepentirme en un futuro —lo miro—, pero te quiero más de lo que debería, José.

—No lo vas a hacer, lo prometo —vuelve a juntar nuestros labios una vez más, y podría jurar que su boca es mi adicción apartir de ahora.


~*~


José.

— ¿¡Se besaron!? —Exclama con asombro, Carolina. Y no puedo evitar sonreír como el típico estúpido adolescente enamorado.

—Varias veces —confieso.

—Si mamá supiera de esto tal vez ya le hubieran dado —cuenta con sus dedos—. 15 ataques al corazón más o menos —ríe.

—No tiene que saberlo, no aún.

—Tarde o temprano debe saberlo José, como también debe saber que la boda ya no sigue en pie —toma mi hombro.

Asiento con la cabeza, porque prácticamente no se que decir al respecto. No quiero que se desilusione porque se rompió mi primer compromiso oficial, cosa que la tenía muy feliz porque al fin formaría mi familia.

—No sé como voy a decírselo —rasco mi cabeza, va a ser difícil hacerlo, y no tengo idea de como se lo va a tomar, tal vez si y eso es lo que me asusta.

—Solo dile la verdad —propone encogiéndose de hombros.

—No lo había pensado de esa manera, Caro, gracias —con hipocresía le sonrío.

—Era una sugerencia —ríe—. Podrías intentarlo con Sammy.

— ¿Cómo?

—Hermano piensa tú, no voy a ayudarte toda la vida —rueda los ojos—. ¿Podría conocer a Lía?

—Carolina ya la conoces —río ahora yo—. ¿Eres bobita cierto?

—No, pero me refiero a que quiero conocerla como tu nov...

Mi Padrastro » J BalvinWhere stories live. Discover now