Thalia POV:
— ¡Arely éste no es camino a mi casa! —Exclamo
—Lo sé, no soy demasiado idiota para no saber hacia dónde manejo, sólo cállate. ¿Por favor? —Se detiene por el semáforo que marca en rojo. Ruedo los ojos y me recargo más en el asiento, no es que no confíe en mi amiga pero, en estos momentos me encuentro sin ánimos como para ir algún lugar con demasiada gente. Claro que lo sé, Arely nos lleva hacia el centro comercial, conozco a mi mejor amiga y nuestro lugar favorito para lidiar los problemas es ir a tiendas de ropa.
El silencio se hace más profundo, aunque no es incómodo no me gusta estar así. No cuando Arely es tan alegre y siempre trata de hacerme reír, Sin embargo hoy es un día negro también para ella, me pregunto cuál es su problema efectivamente a omitido contarme.
Sobre la nota y el peluche de delfín, no tengo ni una mínima idea de quien pudo haber dejado eso en mi pupitre. He tratado de encontrar a alguien que inicie su nombre y apellido con esas dos iniciales pero nadie que yo conozca las tiene. Y tampoco nadie ha tratado de conquistarme, creo que la última vez que me acerque a un hombre fue con el hermano de Arely, eso sin contar a mi hermano. Así que no hay señales de ese "admirador" secreto que ahora tengo, no es como si me importara demasiado, sólo no quiero ser acosada cuando no me interesa en lo absoluto mantener una relación y, menos con alguien que no conozco, o por ahora.
Arely estaciona el auto en un lugar cerca de la entrada del centro comercial, bajo confundida. ¿Tanto me distraje en mis pensamientos que no me di cuenta de que estábamos ya cerca?
— ¿Llevas tu teléfono? —Pregunta, apretando el botón de alarma y el sonido se escucha.
—Mmm —rebusco en mi bolso—, sip. Aquí esta —se lo muestro. Ella asiente y camina, yo sólo la sigo.
Todo es tan confuso, es impresionante todo lo que me ha pasado desde hace menos de un día. Y sobre todo aún sigo sin creerlo, ¿de verdad será difícil asimilar la ahora relación de mi madre?
Las puertas se abren, dándonos paso a entrar al lugar. Mi mente se encuentra tan ocupada que no me doy cuenta -otra vez-, de adonde se fue Arely. ¡Dios! , voy a volverme loca si sigo así como estoy, perdida y hundida en el asunto de mi familia.
Volteo a todos lados, buscando a mi amiga, pero en ninguno de los locales cerca la veo. Entonces reacciono y camino hacia la tienda de "Toda moda", a ella le encanta ese lugar por toda la variedad que tiene, así que ahí es donde debe estar justo ahora.
Arely observa un collar, lo toma y frente al espejo de muestra, lo coloca en su cuello. Llego a su lado, pero ella no lo nota. Así que hablo—: Es demasiado hermoso, y para ti es más que perfecto —Voltea y me sonríe, sin embargo su sonrisa no llega a sus ojos. ¿Qué tiene? Me siento demasiado mal y verla a ella triste, termina de ponerme aún más peor. Tomo una bocanada de aire y su mano, estoy realmente jodida pero mi mejor amiga es primero que toda la basura que vivo y viviré—. ¿Qué tienes? Cuéntame, sabes que siempre vas a contar conmigo, sea en lo que sea.
—Es difícil, ¿sabes? Lo es, como no tienes idea, no sé qué hacer. Soy mayor y debo entenderlo, pero no puedo —muerde su labio—. Intente estar normal, como siempre soy, alegre y chistosa, sin embargo me siento ahora patética. Debes ayudarme, Lia —suplica.
La abrazo, aun si saber por qué esta así. Debe ser algo demasiado grave para que ella se encuentre tan mal.
— ¿Quieres contarme?
