Me separo rápidamente, con la cabeza abajo. ¿Qué estuvo a punto de pasar? José susurra algo que no logro entender, levanto mi rostro para mirarlo, sintiendo una vergüenza enorme.
—Y-Yo... Ignora que esto ocurrió, ¿bien? —Hablo—, aquí no estuvo nada por pasar —aclaro esta vez. Él asiente, y se marcha de la sala de estar.
Me siento en unos de los sofás, colocando mis manos sobre mi cabeza. El momento fue extremadamente incomodo, no sé bien lo que ocurrió, pero sé completamente que él quería besarme.
Lo mejor será olvidar esto, para no causarle problemas a mi madre con su prometido. Por que eso es él.
~*~
— ¿Qué vas a comprar? —Pregunta Arely impaciente.
—No lo sé —me encojo de hombros. Llevamos más de una hora caminando por cada tienda que hay, sin embargo nada me llama la atención. Sólo le pedí a Arely que viniera y me acompañara para distraerme, mintiéndole que compraría algún obsequio para mi madre y Humberto.
Ella rueda los ojos y sigue su camino. Mi amiga al menos lleva algunas cosas, mientras yo sólo llevo en mi mente lo ocurrido ayer con José. Me dije a mi misma que lo olvidaría, pero no puedo. Siento que tengo que contarle a alguien, sin embargo no quiero hacerlo. Si se lo cuento a Arely me hará un sin fin de preguntas, y lo menos que quiero es un interrogatorio por ella.
— ¿Te sucede algo? —Me saca de mis pensamientos.
—Eh... No, no, todo bien —finjo una sonrisa.
—A mí no me vengas con eso, así que cuentame —se cruza de brazos.
Bien, después de todo ella es mi mejor amiga, y ocultarle algo es imposible.
—De acuerdo —me rindo, a pesar que no ha tenido que hacer mucha insistencia—. Vamos a las bancas —pido. Nos dirigimos hacia los asientos, y ya una vez allí, comienzo a hablar—. Ayer estábamos terminando de decorar el árbol navideño. José me pidió que le tomará una fotografía y bueno lo hice —hago una pausa.
— ¿Y? —Levanta una ceja.
—Él me abrazó de la nada, y... Y estaba a casi nada de —me interrumpe.
— ¿Besarte? —Forma una perfecta "o" con sus labios.
Asiento, algo asustada. Mi amiga me mira con asombro, a pesar de que no ha ocurrido nada más.
—Y yo me siento mal, no sé bien porque, pero lo hago —un suspiro sale de mi boca.
— ¿Tú querías? —Pregunta levantando ambas cejas.
— ¿Qué? —Me sobresalto—, ¿qué dices Arely? ¡Por Dios, no!
—Yo te conozco mejor que a nadie, él es guapo... —se encoge de hombros.
—Y eso no significa nada, ¿bien? —Niego con la cabeza—. Él no es nada, no significará nada en mi vida, él va a casarse con mi mamá y no tiene porque suceder algo más allá de una relación como padrastro e hijastra. Así que no digas estupideces, por favor.
—Tranquila, lo dije en broma —se burla.
Por Dios, esta mujer me va a volver loca algún día de estos. Le regalo una mirada asesina y llena de enojo. Por primera vez estoy frustrada y molesta con Arely Salinas.
~*~
Todo en casa con mi mamá está todo listo y perfecto para hoy en la noche. Con mi hermano decidimos primero y a recorrer algunos lugares, como siempre lo hacemos. Tenemos la costumbre de visitar edificios y observar desde arriba como los demás también disfrutan de estas fechas con sus seres queridos. Hoy a pesar de que mi padre no está con nosotros, no iba a ser la excepción aunque sabíamos perfectamente que no sería lo mismo sin él.
