Capítulo 14 (Derek) (Parte 2)

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-¿No crees que vas a actuar de la misma manera que lo hicieron contigo? -cuando me di la vuelta para ver de dónde provenía la voz, sentí que el aire se atoraba en mi pecho; era de mi madre.

-Lo sé -esta vez era mi padre. Su mirada triste pasó del suelo a unas camillas. Tras unos segundos de duda me decidí a comprobar de quiénes se trataba; eran los Bennett y Kristen.

-Recuerdo que le pedí a tu padre que no lo hiciera -la voz de Kristen atrás de mí me sorprendió, en seguida noté que todos los demás a excepción de los Majinghost y los Atlantes, se encontraban aquí también-. No lo odio ahora y gracias a él no estamos muertos pero... yo nunca pedí ser un experimento.

No pude continuar sosteniendo su mirada. Yo no era culpable de las decisiones de mi padre, aun así, no podía evitar sentir como si así fuese. Sé que mi papá no lo hizo con mala intención, no obstante, su comportamiento no se diferenció demasiado al de aquellos que se encargaron de crear a los Majinghost.

Al principio, los Bennett y la Kristen del recuerdo (quienes por cierto, eran aún adolescentes), se hallaban sedados, mas cuando mi padre se aproximó para inyectarles una sustancia líquida de un color naranja brillante, todos comenzaron a convulsionar. Mi mamá se cubrió el rostro con las manos sin decir palabra.

-Nunca estuvimos lo suficientemente inconscientes como para no sentir eso -Samuel, quien se había puesto a mi lado, frunció el ceño y presionó los labios de mal humor, o quizás era ¿dolor? La única que lograba descifrar sus sentimientos era Kristen, y a veces ni ella lo entendía.

-Sí fue duro -suspiró Austin-, pero ya pasó. No entiendo por qué estamos viendo todo esto.

A pesar de que probablemente todos nos hacíamos la misma pregunta, nadie dijo nada al respecto.

Scott y Sam le ofrecieron una mala mirada a su hermano menor; era más que obvio que su capacidad de perdonar estaba por los suelos. Sin embargo, yo no soy quién para juzgarlos, si yo estuviera en sus lugares tampoco podría perdonar.

Me dispuse a seguir observando el recuerdo, mi padre ya los había sedado de nuevo, imagino, o tal vez inyectado alguna otra cosa que evitara sus convulsiones.

-¿Qué es lo que pretendes? -mi madre temblaba, de seguro era impactante para ella ver ese tipo de situaciones-. Hace más de un mes que los tienes en este laboratorio improvisado y lo único que veo, ¡es que los haces sufrir!

-Tú no entiendes nada, Hanna -refutó él, encarándola-. Aunque yo sea un Majinghost y Derek lo sea un poco también, no es suficiente. Los Majinghost nos encontrarán en algún momento y nos matarán.

-A este paso, tú vas a ganarles -replicó mi madre con un sarcasmo crudo que le helaría la sangre a cualquiera.

Antes que mi padre pudiera discutir o rebatir lo dicho por ella con alguna frase, mi mamá se esfumó tras la puerta no sin antes dar un portazo pertinente. A los pocos minutos, alguien más se coló en aquel "laboratorio"... era yo.

-¿Por qué no vienes a cenar? -preguntó mi otro yo, mirando con curiosidad las camillas y a sus ocupantes.

-Estoy ocupado, hijo -era obvio que mi padre deseaba sacarme de allí cuanto antes, aunque en ese momento nunca lo percibí de esa forma-, ve a comer con tu mamá y Ema, cuando me desocupe iré.

-¿Por qué Kristen y los otros siguen en este lugar? ¿Se van a morir? Mi mamá siempre sale llorando de aquí y...

-¡Ya fue suficiente Derek, sal de aquí ahora! -aún recuerdo ese grito, y ese momento...

-Derek -gimió la Kristen del recuerdo, estirando con esfuerzo una mano hacia mi yo de 16 años-, ayu... dame...

Tuve que morderme la lengua para no llorar como mi yo pasado, quien no podía hacer otra cosa que gritar pidiendo una explicación, una que no tendría en esa ocasión.

Involuntariamente observé a Kristen atrás de mí, sus ojos brillaban a causa de unas lágrimas que amenzaban con salir. Ella me devolvió la mirada y lo único que pude hacer fue abrazarla, sé que sufrió mucho por los actos desesperados de mi padre, y aunque por fortuna ninguno murió, no fue agradable para nadie que mi papá experimentara con ellos como si fueran conejos de laboratorio.

Y pensar que cuando los Majinghost nos atacaron en el momento en el que nos descubrieron, aún era demasiado pronto para que cualquiera de ellos hiciera algo; apenas si empezaban a recuperarse de los innumerables ensayos a los que sus cuerpos fueron sometidos.

Yo sabía de mis posibles poderes por ser el hijo de un Majinghost, de todas maneras, era tan joven y cobarde... la muerte de Ema me rompió el corazón más de lo que puedo imaginar y casi al mismo tiempo siguieron mis padres. Debí hacer algo en ese mismo momento, pero el dolor... ni siquiera sabría cómo describirlo, las palabras se quedan cortas a como se experimenta en carne propia.

Isabel debió adivinar mis pensamientos porque en seguida me ofreció una mirada cargada de compasión.

-No me mires así, tonta -parpadeé varias veces para limpiarme la vista de algunas lágrimas traicioneras. Luego, con mi mejor gesto de suficiencia, agregué-. Eso pasó hace mucho tiempo y no necesito tu lástima.

-Alto ahí, medio gringo -bufó Louis. ¿Perdón? ¿Quién se cree que es?-, a Isa nadie me la irrespeta.

-Mira quién habla -siseé con una media sonrisa venenosa-, además, ella no te pertenece.

-Fue mi novia -todos a nuestro alrededor nos miraban con incomodidad. ¿En qué momento habíamos pasado de un recuerdo a hablar de Isabel? La situación era patética en sí misma.

-Y ahora es la mía -dije en un impulso, más alto de lo que pretendía.

Isabel me miró confundida así que, ya habiéndole dado paso a este momento, la abracé por detrás y a la vez que descargué mi mentón en su hombro estando algo más calmado, miré fijamente a Louis.

-Isabel es mía -repuse.

No sé por qué lo dije exactamente, tal vez un empuje de grandeza, tal vez algo más. Lo único que sé con exactitud es que, si tuviera que morir justo ahora, me gustaría que Isabel se quedara con la idea de que la quiero, porque es cierto; porque me gustaría arriesgarme por segunda vez a vivir esto que dice llamarse amor.

★★★★

Capítulo dedicado a Sandy_CL

Uuff pasaron casi tres meses XD

La verdad tuve algunos problemas con Internet, pero principalmente con la inspiración así que decidí darme un tiempo para refrescar la mente y de paso, escribir capítulos extra, porque sé que leer cada mes un capítulo no es tan agradable, por lo menos no para mí.

Ya casi termino la historia, la cual por cierto me está quedando un poquito más corta que la anterior aunque no demasiado. Estaré subiendo un capítulo cada cinco o seis días aproximadamente como para darle otra revisada rápida.

Los extrañé (/u\) gracias por seguir aquí ♥♥♥

Una Mirada hacia el Pasado #2Where stories live. Discover now