"Puedo ser..."

Reinicios

Los rayos del sol se colaban por las cortinas mal cerradas, sin embargo, los dos adultos que la noche anterior disfrutaban en aquel cuarto ya habían acabado de ducharse y cada uno se vestía para poder armar su día como solía ser siempre. Hajime arreglaba su corbata para irse al trabajo, mientras Tooru peinaba su cabello, ya vestido y listo también para poder comenzar su día laboral.

-¿Nos veremos para comer juntos? -Preguntó el de menor edad (por tan solo un mes) mientras se aproximaba al de menor altura, ayudándole con su traje.

-No creo que sea posible, tengo un par de reuniones hoy. -Mencionó, dejándose ayudar mientras su rostro reflejaba pura seriedad, expresión que podía llegar a intimidar a cualquiera menos a Oikawa, el estaba mas que acostumbrado a ella.
El castaño terminó por resignarse y antes de cualquier cosa, robó otro besito de los labios de su moreno, sonriendo poco después y tomando un pequeño maletín que yacía sobre una silla. Volvió para besar a su querido Iwa-chan.

-Saldré primero... Suerte en el trabajo. -Dijo antes de que el adverso le sujetara de la cintura y le acercara a su cuerpo para robarle uno de esos besos profundos y apasionados, de los cuales ambos eran adictos.

-Ten un buen día... Se relamió los labios antes de ver a su castaño salir, chequeó su teléfono y tras dejar todo en orden, tomó sus cosas y salió del cuarto.

Era momento de volver a la realidad, no podía vivir en un sueño eterno junto a aquel hombre que le provocaba miles de suspiros, aun que si podía escapar una noche de todo lo demás, sentía que todo valía la pena. Todo valía la pena si estaba junto a Oikawa tan solo una noche más.