Querido Robert

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  Washington D.C – viernes; agosto 2017

Dejando salir un suspiro, el chico observó nuevamente aquel papel blanco entre sus manos.

Archie observó una vez más el casillero de la universidad. Comenzaba a dudar en hacerlo, pero algo dentro de él le gritaba que era necesario. Así había iniciado todo y así debía ser culminado. ¿Archie ganaba algo con ello?

Sí, libertad.

Esa que anhelaba desde que había decidido aceptar y afrontar los sentimientos que tenía por su mejor amigo. Él no se encontraba pidiendo mucho, tan solo deseaba una oportunidad para hablar y explicar el cómo acontecieron las cosas. Realmente esperaba que Robert lo entendiera y le permitiera a hablar, sino… Archie tendría que acostumbrarse a estar muerto en la vida de su mejor amigo, lo cual no era tan diferente de la actual realidad.

La hoja cayó de sus manos una vez que sintió su teléfono vibrar, realmente se había asustado por algo tan insignificante como eso. Suspirando, se agachó y tomó la hoja y luego sacó el teléfono de su bolsillo visualizando el mensaje de Camila, riendo Archie negó y miró el casillero una vez más.

Era ahora o nunca.

Así que tomando una gran bocanada de aire, Archie se colocó de pie e introdujo la carta por las rendijas del casillero. Tanto tiempo había transcurrido desde la última nota, que estaba seguro de que Robert ya no lo recordaba; pensar en ello lo había tranquilizado un poco, pues realmente quería pensar que Robert no lo odiaría cuando supiera la verdad.

•••
¡Capitulo nuevo!

Leyendo las noticias me enteré de la explosión que hubo hoy en Perú. Si aquí hay lectores de allí, espero que se encuentren bien.

Bonita noche. ♡