I don't know you » Evan Peters

One more time

Todo pasaba rápidamente.

Sus ojos se tornaron más oscuros desde ese segundo. Miré a mi padre de reojo que lo miraba con un tanto de intriga y molestia.

-Evan, hablaré con Isabelle-suspiro-A solas-acto seguido mi angel, el cual parecía llamarse Evan, se paro de su silla todavía con sus ojos puestos en mi.

-¿Isabelle?-seguía observando hasta que salió de allí-¿Que es lo último que recuerdas?-dijo mi padre en un suspiro.

Entonces me puse a pensar, ¿que demonios hice ayer? ¿por que tengo tantos rasguños en mi cuerpo? ¿por que me duele tanto la cabeza? ¿por que siento que conozco a ese hombre? ¿por que estoy en el hospital?

-¿Que me a pasado?-fue lo único que pudo salir de mi boca en ese momento.

Todo daba vueltas a mi alrededor. Poco a poco camine a la cama de nuevo, sintiéndome más mal que antes.

-Te has cortado de nuevo-dijo mi padre en un suspiro y sentí lo que le había hecho, lo había traicionado por milésima vez. Aunque esta vez al parecer me había pasado de líneas, observe mis muñecas y habían cortes, incluso habían unos todavía sin curar, inclusive habían puntos allí.

Entonces se me vino la pregunta ¿Por qué lo hice?

Pero, nada venía a mi mente. Incluso pensé en preguntarle a mi padre pero no me atreví.

-Isabelle, has perdido tanta sangre y llevas aquí ocho días. Pensábamos que no despertarías, pero lo hiciste. Eso hizo que perdieras la memoria, todo lo perdiste. Tendré que preguntarte que es lo último que recuerdas-dijo mi padre sollozando, ahí caí en cuenta de todo.

Yo estaba levantándome de un coma. Había perdido tanto, que olvide lo último que hice, y por que lo hice. La mirada de Evan se mezclo en mi mente y lo único que pude hacer fue cerrar mis ojos. Su mirada a pesar de ser fuerte y seca, me brindaba felicidad.

-¿Cuantos años tienes?-dijo mi padre tratando de ser fuerte.

-Tengo dieciséis años padre-dije tratando de pensar más allá, pero nada-¿Es 2012?-dije frunciendo el ceño, pero eso hizo que mi cabeza palpitara más.

-Hija-sollozó-Has olvidado un año-dijo el poniendo sus manos en el rostro-No es tan malo-trato de sonar tranquilo-¿Recuerdas lo de tu madre?-dijo mirándome a los ojos.

Es claro, en ese segundo todo volvió a parecer negro. Todo volvía a ser oscuro, ya no veía claridad. Ya no sentía el porque de estar despierta. Quería sentir un rasguño más en mi cuerpo, quería sentir ese ardor por una vez más.

-¿Cuando podré irme de aquí?-dije mirando mis dedos.

-Hablare con el doctor ahora mismo-se paro rápidamente.

-¿Papá?-dije todavía tratando de no sonar coherente-Dile a Evan que entre.

Mi padre asintió y salió de allí.

A los pocos segundos entro por allí. Sus ojos se toparon exactamente con los míos.

Eran oscuros, no podía ver nada más en ellos, solo la oscuridad. Lo que me daba miedo, pero era increíble que en el solo veía ternura y mucha tristeza.

-¿Que necesitas Isabelle?-dijo el sonando frío.

-No quería estar sola-trate de sonar igual, fracasé.

-Allí hay dos de tus amigos-dijo el mirando sus pies.

¿Quien sería? ¿Acaso Hannah y Jacob estarían aquí? ¿Ellos sabrían porque me corte?

Me sentí mal al segundo de pensar que no había ni si quiera pensado en mi mejor amiga y mi novio.

-¿Sabes sus nombres?-dije mirándolo una vez más.

-Hannah y Jacob-dijo el sonando igual de frío o peor.

-Dile que pasen-suspiré-Necesito que te quedes aquí cuando estén-dije-Tengo un poco de miedo-mire como tragaba saliva y asentía rápidamente.

Vi como al minuto tres siluetas entraban por allí.

Vi como empezaban por Hannah. Mi mejor amiga, esta vez vestía con un chaleco rojo que le quedaba muy hermoso por cierto. Siempre he sentido estos celos por Hannah, es verdaderamente perfecta. Entro con esa sonrisa que ni parecía que haya estado preocupada en algún segundo.

Detrás de ella venía Jacob, con una sonrisa de oreja a oreja y con unas flores en una de sus manos. Me pareció tierno al instante. Vi sus ojos azules una vez más y esto hizo querer aventarme a besarlo, claro estaba loca por aventarme en el. Era perfecto, era bien blanco y tenía su pelo un poco peinado hacia arriba, no podía ser más atractivo. Sus ojos azules me miraron y eran tan claros que la verdad, me perdía en ellos.

Vi a Evan quedándose en la orilla de la puerta solo mirando el piso. No lo conozco, pero me duele verlo así.

-Isabelle-dijo Hannah sacándome de mis pensamientos-No sabes lo preocupada que hemos estado Jacob y yo-dijo con una sonrisa ¿que?-Has perdido todo un año de locura-dijo ella mirando a Evan coquetamente.

¿A que diablos se refiere? ¿Por que mira a Evan de esa manera?

-Princesa te he echado de menos-dijo Jacob tomando mis manos y entrelazando sus dedos con los míos-No sabes cuan preocupado he estado-miro mis ojos y se acerco por a poco.

Se acerco y en un segundo ya estaba en mi boca, yo sonreí al sentirlo y lo deje entrar. Solté sus manos y puse mis manos atrás de su cabeza, empece a jugar con su pelo. Sonreí al instante, la verdad extrañaba a mi novio.

Pude sentir que entre el beso habían pasado horas.

Me despegue poco a poco para que no se sintiera incomodo, mire a Hannah y ella se veía un poco confundida y incomoda.

Jacob sonrío y me sobo el pelo. Hannah y el asintieron satisfechos y empezaron a hablar de puras estupideces que habían pasado ese año que no recuerdo y que por lo que veo no quiero recordar.

Vi como Jacob seguía hablando y Hannah se acerco coqueta a Evan, este sonrío de lado queriendo ser gentil, ella se apresuro a ir a sus labios, besándolo, un beso que solo fue un toque, pero me hizo suspirar una vez más.

¿Que acababa de pasar? ¿Por que ella lo beso? ¿Como se conocen?

Mire a donde Evan, estaba mirando atónito. Sus ojos se aguaron y vi como estos se ponían más oscuros, y una vez más de las pocas, me observo y volví a sentir ese "click" en mi estomago.

Eran Mariposas, y no estaban muy felices que digamos.

Y sentí el dolor y el deseo una vez más, quería sentir una línea en mis venas, quería ver la sangre caer.

**

DIGANME QUE LES PARECE

P O R F A V O R : e