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*FLASHBACK*

Tony acababa de llegar de su feria junto con Jarvis y su Tía Peggy. Su Madre no pudo asistir pues se encontraba en un evento de caridad para los niños de un orfanato y su Padre estaba como siempre, ausente en busca de ese estúpido soldado.

Se encontraba triste su Padre le había prometido asistir ese día a la feria de ciencias en su escuela, donde participaría. Quería que viera su más grande invento, tan solo a sus 7 añitos.

La promesa de Howard le alegró toda la semana a nuestro pequeño castaño, pero obviamente este no asistió ni cumplió la promesa hecha.

Durante la feria Tony esperaba la llegada de su Papá, se lo había prometido, tenía que ir a ver su nuevo proyecto. El menor quería que se sintiera orgulloso.

Espero por mucho, mucho tiempo, el jurado ya había empezado a evaluar los proyectos de los participantes, y las personas que asistieron observaban los proyectos de sus compañeros.

Tony tenía cubierto el suyo con una manta blanca para que nadie lo viera, pues su Padre sería el primero que lo hiciera.

Cuando los jueces llegaron a su lugar, les pidió amablemente que si podrían esperar solo unos minutos  pues parecía que Howard se había atrasado un poco. El jurado solo asintió y esperaron unos minutos más.

Dicen que la esperanza es lo último que muere.

Tony tenía ese pequeño granito de esperanza, sabía que su Padre en cualquier momento llegaría y podría presentar su proyecto frente a él. Así que solo observaba la entrada del gimnasio, que era donde se llevaba a cabo la exposición.

Unos minutos después Jarvis se acercó y le dijo que presentara su proyecto. Él no queria hacerlo aún pero si no lo presentaba lo descalificarían. Y a Howard no le gustaría eso cuando llegara.

Así que expuso su proyecto. Ya después cuando su Padre llegara se lo explicaría.

Aún tenía esa pizca de esperanza...

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