El mundo infectado 11-13

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- Confesión -

Al llegar al pueblo, Haizea paró el coche, yo la informé:

- Es ahí, en esa casa.

Nos bajamos del vehículo y nos dirijimos a la casa, al entrar, dije mientras movía los cuerpos:

- El walkie debería de estar aquí, joder.

Ella me respondió:

- Lo habrá cogido alguien.

Yo suspiré y la dije:

- Bueno, vámonos ya de aquí.

Al volver al coche, Haizea se puso al volante y arrancó dirección al pueblo. En el camino Haizea me dijo:

- Stephanie me dijo que escuchasteis una voz familiar ahí detrás, ¿te haces una idea de quién era?

Yo negándola con la cabeza la contesté:

- Que va, era una mujer, pero, su voz me resultaba muy familiar.

Haizea me respondió:

- Bueno, no sé quién puede ser.

Al llegar al pueblo, nos bajamos del coche, ella me dijo:

- Vaya, el pueblo está vacío.

Yo extrañado la respondí:

- Mejor para nosotros.

Luego de saquear unas casas cogimos un poco de medicinas y comida. Vimos un edificio grande a lo lejos, la propuse:

- ¿Y si vamos allí?

Me respondió:

- Vale, me parece bien.

Al llegar, Haizea dijo:

- Manicomio Kane, entremos.

La respondí:

- Sí, vamos.

Al ir a la puerta delantera de crisral, observé lo de dentro, la informé:

- No hay nadie. Pero la puerta está cerrada, deberíamos ir por la puerta trasera.

Al ir a la parte de detrás, vimos una puerta, Haizea se acercó y la abrió, al entrar, un mecanismo se activó cerrando la puerta y abriendo todas las puertas del manicomio. De cada habitación, salían 5 caminantes, y había 85 habitaciones. Haizea exclamó:

- ¡Jodeer!

Yo intenté abrir la puerta, pero era imposible. La grité:

- ¡Haizea vamos por ese pasillo, casi no hay habitaciones!

Ella y yo comenzamos a correr como nunca, nosotros les disparábamos, los podridos también venían por delante nuestro. Haizea abrió una puerta corredera y me gritó:

- ¡Vamos entra!

Entramos y ella la cerró. Había muchísimos caminantes ahí afuera, yo la pregunté:

- ¿Cuántas balas te quedan? A mí 3.

Me respondió:

- 1.

Exclamé:

- Joder, no, no hay más salidas que esa puerta.

Haizea me contestó:

- Es corredera, no entrarán.

Suspiré y la respondí:

- Ni nosotros saldremos.

Yo me senté en el suelo, con la espalda apollada en la pared. Haizea hizo lo mismo que yo, se sentó al lado mío. Ella se llevó las manos a la cabeza, la dije:

- Eh, al menos no moriremos devorados, tenemos 4 balas.

Ella me respondió:

- Jon, yo, no quiero morir, se que es inevitable pero-

La dije dándole la mano:

- Haizea, empezamos esta mierda del apocalipsis juntos, y al parecer acabaremos juntos.

Ella asintió con la cabeza. La pregunté sonriendo:

- ¿Te-te acuerdas de cuando eramos chavales? De Ugaitz, Unai, Iraida, Yarisa... Joder.

Ella me respondió sonriendo:

- Sí, sí me acuerdo, lo pasábamos muy bien.

La recordé riéndome:

- Recuerdo que la gente nos decía que hacíamos buena pareja.

Me contestó riéndose:

- Sí, teníamos 15 años, justo los que tiene ahora Stephanie.

Ella y yo nos abrazamos, me dijo:

- ¿Sabes qué? Cuando estaba con Ibon, tú estabas enamorado de mi, yo lo sabía.

La asentí con la cabeza, y me confesó:

- Y... Yo ahora estoy enamorada de ti Jon. Qué mas da decírtelo, si vamos a morir. Te quiero, dios...

La miré sorprendido y la respondí:

- Yo, yo también siento cosas por ti.

Me preguntó:

- ¿Y Denise?

La respondí:

- La quiero, la quiero muchísimo como persona pero, estos últimos meses no he podido parar de pensar en ti, y lo que sentía por ti ha vuelto.

Ella comenzó a llorar, luego yo también. La volví a abrazar, y esta vez nos besamos, mientras lo hacíamos, mi walkie sonó, una mujer preguntaba:

- ¿Hola? ¿Alguien?

Yo la respondí:

- Sí, hola, ¿quién eres?

Me contestó:

- Mi nombre es Andrea.

La contesté:

- ¿Andrea?

Me siguió:

- ¿Jon?



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