- Fe en Melbourne -
Ya había amanecido, Denise me agarró de la mano y me dijo:
- Ya ha amanecido dormilón.
Sonreí y la dije:
- ¿Ya? No sabes lo bien que he dormido esta noche.
Me dijo:
- Me alegro, pero debemos seguir emprendiendo el viaje.
La dije:
- Sí, así es.
Los dos salimos de la casa. Luego de eso recogimos todo y volvimos a los vehículos, ésta vez me monté con: Denise, Haizea, Luis, Lucas y Stephanie. Ya en el coche, Lucas dijo:
- Lo de las cuerdas y las latas es muy buena idea, deberíamos de usarlo más a menudo.
Luis le contestó:
- Lucas en Melbourne no tendremos que pensar en usarlo.
Haizea le dijo:
- Aún no sabemos si lo que nos ha dicho Paul es cierto, puede que estemos haciendo este viaje para nada.
Stephanie la contestó:
- No, me niego a que este viaje no haya servido para nada.
Lucas la dijo:
- Eh cariño, Haizea no ha dicho eso, sólo es una opción.
Stephanie dijo:
- Espero que no sea así.
Denise la dijo:
- Stephanie todos esperamos que no sea así.
La seguí:
- No lo es, confío en Paul, dice la verdad, no es una trampa.
Luis me dijo:
- Sólo hemos hablado con él por radio, ¿cómo puedes confiar tanto en él?
Le respondí:
- Es sólo que, tengo fe en Melbourne.
Haizea preguntó:
- ¿Dónde estamos?
Lucas miró el mapa y la respondió:
- En Bután, en menos de una semana ya habremos llegado a Nha Trang.
De repente, el vehículo se quedó sin gasolina. Yo golpee el volante y les dije:
- ¿Queda algo de gasolina?
Lucas dijo:
- Les preguntaré a los otros.
Contactó con Jess y la preguntó:
- Nos hemos quedado sin gasolina, ¿tenéis algo?
Jess le respondió:
- No, nada.
Ellos pararon y nos bajamos de los coches. María nos dijo:
- Debe de haber alguna gasolinera cerca.
Ainhoa la siguió:
- Sí, algunos de nosotros deberíamos ir a buscar gasolina mientras algunos se quedan aquí.
María, Yon, Ainhoa, Lucas y yo íbamos a ir en busca de gasolina. Unai nos dijo:
- Si tenéis problemas, llamadnos e iremos enseguida.
Yon la dijo:
- Sí, descuida, estaremos bien.
Nosotros nos montamos en el vehículo con gasolina, Ainhoa se puso en el asiento del conductor, pero antes de arrancar, Haizea dijo:
- Yo también voy con vosotros.
La abrí la puerta, entró y Ainhoa aceleró.
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El mundo infectado
AdventureLa historia, trata sobre una clase de 3º de secundaria. Una mañana de invierno, en horario escolar, ocurrió algo horrible, ocurrió un holocausto zombie. Los zombies invadian el colegio, cuando parecía que los protagonistas iban a morir, aparecieron...