Cuarenta y seis

4.8K 459 98
                                    


Deze afbeelding leeft onze inhoudsrichtlijnen niet na. Verwijder de afbeelding of upload een andere om verder te gaan met publiceren.


Hoseok  regresó al departamento que compartía con Jimin luego de ser dado de alta, el pelinaranja se mudaría eventualmente. Lograron tener una larga conversación antes que el primero lograra dejara el  hospital. Juntos nos explicaron la decisión de mantenerse algo alejados por un tiempo pero no perder por completo la comunicación. El sus corazones deseaban mucho poder seguir viéndose, volver a construir aquello que se ha roto entre ellos. La esperanza de que todo lo bello que tenían volviera estaba ahí. La decisión que habían tomado tenía mucho sentido. Tendrían juntos un futuro lleno de su amistad. Mucho que ofrecerse mutuamente.

Lo relacionado con Hyerim no se ha tocado demasiado con nosotros, solo superficialmente, lo necesario. Sabemos que ellos has hablado largamente del tema pero no han mencionado nada al respecto, intentan mantener ese tema para ellos. Resolverlo por si solos. Por mi lado, estuve viendo a Hye varias veces por las tardes, el castaño aunque indirectamente busca la oportunidad de preguntar por ella cuando estamos alejados del resto.

—Quiero ir a verlo, Sunhee —se lamenta Hyerim—. ¿Sería muy malo que vaya y lo vea? No tengo ningún derecho de ir después de lo que ha pasado —lloriquea. 

Ella lo estaba llevando también bastante mal, tan mal como los dos amigos que se han enamorado de ella sin impedimento. Tenía la reconciliación más complicada. Los chicos podían  seguir juntos y avanzar, olvidándola, dejándola atrás como un mal recuerdo de sus rotos corazones pero con una solidad amistad que este evento no acabo por romper. La pelinegra por supuesto que tenía el corazón roto, hecho trizas, sin embargo el consuelo de retomar si quiera una corta y respetuosa relación parecía lejano. 

—Podrías ir. Aunque traería consecuencias —advierto nada segura, después de todo Hoseok si quería verla. Deseaba verla, en sus sueños la llamaba.

—¿Cómo podría? No puedo hacerlo, sería una total descarada —se lleva las manos hacia su cara resignada—. Quisiera correr donde él como siempre bajo una fachada de amiga, ocultado mi maldito amor. Si antes no podía hacerlo de la manera que quise, ahora ni siquiera puedo hacerlo como una tonta amiga preocupada. Si tan solo hubiera seguido callando.

Al principio Hyerim lloraba mucho, tanto que pensaba que podía llegar hasta la inconsciencia. Su madre estuvo tan preocupada cuando vio a su hija en ese estado, me lo dejaba claro en cada visita. La pobre señora no estaba enterada de la razón de tanto llanto, no hacía más que pedirme ayuda para calmar a su única hija.  Sus lágrimas habían cesado luego de cuatro días para mantenerse en su posición de auto culpa absoluta. Donde la rutina era encerrarse en su habitación repitiéndose sus errores y malas decisiones. 

—Es una alivio que me mantengas informada de su estado, de lo contrario me volvería loca —dice en una especie de agradecimiento—. Si no fuera por tus visitas ya hubiera hecho otra locura de la que me arrepentiría luego. 

One Night《 》Min Yoongi  (COMPLETA ) ✔Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu