Cuatro

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 —¿Qué harás el fin de semana? —pregunta mi amiga mientras juguetea con unos de los muchos anillos que tiene puestos en sus dedos, los cuales adora con locura, son su posesión de gran valor Un tesoro que ya había costado miles de wones, su obsesió...

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—¿Qué harás el fin de semana? —pregunta mi amiga mientras juguetea con unos de los muchos anillos que tiene puestos en sus dedos, los cuales adora con locura, son su posesión de gran valor Un tesoro que ya había costado miles de wones, su obsesión dichos accesorios era ilimitado.

—Tal vez me ponga a estudiar. Aunque cabe la posibilidad que ni siquiera sea capaz de leer una sola hoja de la separata que recibí —si era realista conmigo iba a llegar a casa y probablemente desperdiciaría mis horas de estudio encontrando algo mínimamente tentador.

—Yo tengo planes querida amiga —se jacta Haesun en respuesta a mi nada revelador plan—. Una reunión me espera el sábado. Amigos de mis padres van a organizarla, la mayoría que asistirá será gente mayor pero su hijo que a estado estudiando en el extranjero vendrá. Está muy bueno y bueno, quizá pase algo entre nosotros, deséame suerte.

—No necesitas suerte. Lo sabes —me limitó a responder. La castaña resulta ser encantadora, esa personalidad era la responsable de conseguir ser interesante para el sexo opuesto.

Frunzo los labios al caer en cuenta que todos tenía planes precisos. Tampoco podía contar con ir hacer locuras con Jiwo porque fue de viaje a su pueblo natal a visitar a su familia.

—Deberías poner esfuerzo en hacerte amiga de los chicos que se quedan en tu casa, podrías salir con ellos cuando nosotras estemos ocupadas —sugiere Haesun, deja de tocar sus anillos—. Si estuviera en tu lugar tendría ya una genial amistad con todos

—No es posible, dos de ellos casi nunca están. Con Seoyeon nos enfrentábamos constantemente y el muchacho que recién llegó me quiere lejos. Nos quiere lejos a todos mejor dicho —cuento resumiendo mi pesada lista de impedimento encogiéndome de hombros—. De alguna u otra forma no puedo acercarme.

—¿Querías ser confidente del nuevo, cierto?

—Sí. Es alguien difícil.

Desconocía que Yoongi fuera la misma persona de la discoteca, quise evitar empezará con sus cuentos por eso había omitido dicha parte. Deducía que pasaría si lo decía, ella inventaría que él y yo estábamos unidos por la cuerda roja del destino, sin vuelta atrás toda una drama televisivo sería armado.

—Pero... —detiene su hablar para poner atención más allá de la mesa donde estamos sentadas.

Queriendo ser parte intento corroborar los sucesos que están ocurriendo sin percatarme pero me lo impide.

—Está viniendo  —avisa entre dientes—. Sigue sin rendirse. Irritante. Debería tener claro que ya no quieres nada.

Otra vez él.

Se negaba aceptar que lo nuestro ya no tenía retorno. Habíamos estado juntos un mes. Sus intentos por convencerme a retomar nuestro romance eran incesables.

Con Dongsun cometí un gran error, acepte ser su novia sin estar enamorada o mantener una pizca de interés romántico. Intente sentir algo más que amistad, aquellos sentimientos amorosos en absoluto brotaron. Lo peor no fue que terminamos porque seguía sin sentir nada romántico, fue porque lo encontré besando a una de sus compañeras de clase.

One Night《 》Min Yoongi  (COMPLETA ) ✔Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora