ain't love - ❝ milo manheim ❞ [TERMINADA]

epilogue

Allí me encontraba yo, en unas calles de Portland haciendo mi trabajo de mi electivo de fotografía que había tomado junto a Elize ambas estábamos tomando fotografías en un parque. Habían varias parejas hace algunos meses había volví a Portland, luego de la muerte de mi madre logré hacer todo por mi misma, con una beca que gané volví.
Pero no me sentía totalmente segura de ver nuevamente a los chicos pero pronto tenía que hacerlo, luego de unos minutos mirando las fotos algo llamo mi atención un chico de ojos avellas tirado en algún lugar en mi foto se me hacía muy conocido, su sonrisa se me hacía familiar y yo ni siquiera sabía el por qué.

Simplemente, la guarde para irme a comer a Chiken's Store con Elize era hora del almuerzo pronto tendríamos que volver a la universidad ya que vivíamos en esta. Y compartíamos habitación juntas. Estaba demasiado feliz con todo lo que había logrado sola, estábamos recién en el primer semestre de estudios y aún me acordaba de todo lo que había pasado hace algunos años. Al final, había terminado contactos con todos mis conocidos.

—¿Qué fotos mandaras?

—Sólo estás. —Mostré la foto del chico, del puente y algunos peces.

Era lo máximo que podían mostrar, abrí mi laptop nueva para enviarle un correo a la profesora con mis fotos más las fotos de Elize. Saco un pequeño pendrive que tenía en el bolsillo de mi chaqueta mire las iniciales.

M&S. 

Se me hacía algo raro que yo tuviera algo así, lo conecte a la laptop y me abrió una carpeta con varias fotos. Me sorprendí, en una tenía el cabello corto y castaño, no como ahora que lo tenía negro con algunos mechones azules. Nunca pensé que en ese tiempo tuviera mi cabello así, me veía mal.

—Mi yo del pasado. —Comenté y Elize me miró.

Sonrió, para apretar a la siguiente página.

—¿Y él? —Me pregunto por un chico que estaba en la foto.

Sonreí, aún me acordaba de esa foto. Fue el día de los juegos salíamos todos juntos, pero en una parte estábamos él y yo mirándonos algo sorprendidos, antes de que pasará todo lo de Alice y yo.

Tenía como un nudo en la garganta, los extrañaba y sobre todo a él.

—Milo Manheim. —Respondí. —Fue mi novio cuando tenía dieciséis años.

—¿Y sigue acá en Portland? —Asentí  —¡Buscalo!

—De seguro ya es feliz con alguien más, no quiero arruinar su felicidad.

Dicho eso saque el pendrive para cerrar la computadora de golpe mientras volví a mirar al chico de la foto, se veía demasiado borroso. Pero aún así su físico me recordaba a alguien, guarde mi laptop en mi mochila para levantarnos sin antes pagar la cuenta pronto cerrarían las puertas de la universidad y eso era lo que menos quería.

( . . . )

La mañana del lunes, fue tranquila mis clases empezaban a las diez y treinta de la mañana, fui al casino por comida para luego ver el diario de las fotografías de los estudiantes de primer año ya estaba listo en la biblioteca, fui a esta y mire mis fotos estaban en la tercera hoja y en todas salía mi nombre Sydney Johnson.

Estaba hasta la foto del chico y me sentía feliz a la profesora le había encantando mi trabajo según leí en mi correo, guarde mis cosas para ir a mi clase. Sin antes llevar la laptop, para guardar mis clases al llegar estaba casi lleno y sólo había asiento por la parte de atrás y para mi eso no era un problema, esta clase me tocaba sola sin Elize y eso me entristece un poco.

Una chica de cabello castaño corto, ojos verdes y piel bronceada entro al salón todos se callaron y las chicas susurraban cosas entre sí.

—¿Quién es Sydney Johnson?

Levante mi mano y esta se acerco a mi mostrandome la foto del chico del libro, la furia se veía en sus ojos y yo le miraba confundida.

—¿Y eso qué? —Pregunté.

—¡Cómo te atreves a sacarle una foto a mi novio! —Gritó furiosa.

—Ni siquiera sabia que era tú novio, ¿cómo se llama o qué?

—Milo Manheim, y no quiero que le saques más fotos. —Dijo esta furiosa, mi lápiz cayó.

¿Había escuchado bien? ¿Ella comento que Milo Manheim era su novio? Debería estar soñando pronto despertaria.

Un chico alto con ojos avellanas se adentro al salón buscando algo con la mirada, se acerco a mi puesto y mis manos sudaban, no podía creerlo.

—¡Holiday! ¡Vámonos! —Dijo este sin mirarme. —Es sólo una foto.

La chica miro nuevamente a él, algo furioso mientras que este me miraba. Rápidamente desvíe mi mirada, tenía miedo de que me conociera.

—Perdón, Holiday es algo celosa.

Asentí, y estos dos se fueron mi corazón latía a mil.

Y como pensé.

Milo me había borrado de sus pensamientos y de su pasado, él tenía una vida nueva con una chica nueva. Mis ojos estaban llenándose de lágrimas mientras que estás recorrían mis mejillas.

Pensé en nunca más volver a verle y es lo primero que hago en cuanto vuelvo a Portland, veo que es feliz en como mira a la chica y de su forma de ser con ella. Me molestaba y sobre todo que este no me recordará.

Y pensé en darme por vencida.

Milo Manheim me iba a torturar todo mi año en la Universidad, de eso estaba segura.