Papá, vamos a casa de Owen.

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Esto me daba una muy mala impresión, y sin negarlo, algo de miedo. Entonces me agarré de la ropa de mi padre.

Mi padre me miró y sonrió.

- Está bien, esta es la casa de Owen, y aquí estoy yo para protegerte -me dijo desarreglando mi cabello.

Entonces un aterrador grito se escuchó. Y eso congeló toda mi espalda. O eso sentí yo.

Entonces entramos. Dentro era fascinantemente brillante y bonito, no parecía nada a lo que era afuera.

Entonces llegó el padre de Owen.

- ¡Oh!, señor Galante y señorita Galante, que bueno recibir su visita, ¿En qué les ayudo? -dijo amablemente el hombre.

El se parecía un poco a Owen, y tenía también ojeras. ¿Qué hacen en este lugar para que tengan ojeras ambos?.

- Es que Owen se olvidó su peluche y Camille lo encontró y decidió traerlo -dijo tranquilamente mi padre.

- Oh, es Coco, su peluche de cocodrilo, hace horas lleva lamentando que no lo veía, puedes ir a su habitación Señorita Camille, el estará muy feliz de ver a Coco -dijo su padre sonriendo.

Entonces una de sus sirvientes se acercó a mí y la seguí hasta que llegamos frente a la habitación de Owen.

Golpeé educadamente la puerta, pero no la abrió. Volví a golpear, y nada. Entonces al notar que la puerta no estaba llaveada la abrí e ingresé.

- H-Hola Owen -dije con algo de miedo, el cuarto era muy oscuro, y había peluches de todas clases y todos los tipos que podían existir adornando todo el lugar.

Algunos eran algo, aterradores.

- ¡Un ángel! -diji Owen viniendo hacia mí- ¡Con Coco! -dijo sorprendido.

Entonces cayó sobre mí.

- ¡O-Owen! -dije tratando de empujarlo, el pesaba mucho, y estaba todo sobre mí- ¡Pesas mucho Owen!, ¡Levantate! -dije tratando de empujarlo algo molesta.

Entonces lo miré bien, él estaba... ¿Dormido?. Se veía muy cansado.

Entonces no tuve otra opción que servir como su almohada hasta que el despertara.

Y después de unos minutos recobró la conciencia, abrió lentamente sus ojos y me miró algo sonrojado.

- ¿Camille? -dijo mirándome.

- Te traje a Coco, te olvidaste de él en la escuela -le dije sonriente.

Entonces el miró mi mano y allí estaba Coco.

El se levantó y tomó a Coco, y luego me extendió su mano para que me ayudara a levantar.

En la mañana el había apretado todo mi brazo derecho con dulzura y cosquilleos, entonces tomé su mano y me levanté.

Su mano era muy cálida.

- Gracias por salvar a Coco -me dijo sonriente.

Luego encendió las luces de su habitación. Y pude ver finalmente todos los peluches que había en él, que por cierto eran bastantes.

Charlamos un buen rato.

- ¿Y por qué eres algo raro Owen? -dije directamente.

¿Qué?, ¿Acaso no debo ir directo a lo que quiero saber?, claro que puedo. Y eso hice.

- Es... es que mis gustos son distintos a los demás -suspiró- mi padre es un doctor, o bueno, lo era hasta hace 3 años, mi madre era una química. Crecí asistiendo el trabajo de mi padre y mi madre, eso incluye las cirugías que mi padre hacía y ver como mi madre elaboraba sustancias varias. Así que desarrollé cierto amor y placer en ver la anatomía humana, y en crear sustancias útiles. Digamos que me fascinó la toxicología. Pero ahora que mi madre ya no está... solo tengo sus libros como guía. Me paso noches enteras leyendo sus libros, o viendo vídeos de cirugías o procesos de autopsias. Para mí es bonito ver el cuerpo humano -sonrió tan dulcemente como si dijera la cosa más normal del mundo.

Ya veo porque siempre tiene esa aura sombría y psicópata. Y no dudaré en que él de seguro sabe crear sustancias malas, no me lo imagino si algún día odiase a alguien y lo matase.

Entonces mi padre y el padre de Owen vinieron. Al parecer era hora de irme.

Me despedí de ellos y volví a casa con papá.

Con papá charlamos también mientras íbamos en el coche.

- Papá, Owen es raro -le dije.

- Un poco sí, pero es raro tener a alguien cuerdo en la mafia querida, cada quien tiene una locura que lo caracteriza -dijo sonriéndome- además, Owen es una más de las mejores cartas que tendremos en este negocio -su sonrisa se había vuelto sombría y psicópata.

Ahora que lo pienso, cada uno de ellos tiene una particularidad. Me gustaría saber más de los demás, así como descubrí del porqué Owen me parece alguien sombrío, necesito saber más también de los demás.

Y sobre todo... saber a que se refiere mi padre.

Así que, Owen Dellinger.
Es la segunda familia que conozco después de los Mallurí.

 Es la segunda familia que conozco después de los Mallurí

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Figlia Della MafiaWo Geschichten leben. Entdecke jetzt