Be my friend | Min Yoongi.

Fifteen.

Doyeon, Kim Doyeon, un año menor que yo, pero de mayor altura, la chica de la figura esbelta, curvas perfectas. Ella se acercó junto a la chica saltarina, es decir, Dahyun, que andaba muy feliz con el brazo de la más alta enganchado al suyo. Me levanté cuando las tuve al frente y subí la mirada para lograr verla mejor a la cara, ella río un poco por la acción, intenté no gritarle, a cambio, la miré bastante mal.
YoonJi al verla solo buscó su teléfono junto a sus auriculares en los bolsillos de su chaqueta y cuando los encontró pudo ignorarnos tranquila.

— ¿Shin YeWon? La chica del jugo de fresa.

— Kim Doyeon -sonreí de lado- pensé que no volverías a pisar cualquier escuela donde esté Sunmi.

— Bueno, quise hacerlo ¿Por qué no enfrentar mis miedos?

Dahyun, quien miraba emocionada la escena sin decir una palabra -cosa que era extraño, ella vivía hablando sin parar- La niña sonriente se colgó de ahora ambos brazos y pareciendo un maldito grupo de idiotas comenzó a tirar para que yo camine con ellas.
Miré hacia atrás buscando el par de ojos oscuros de Min pidiendole ayuda con la mirada, como siempre solo me quedo viendo sin expresión y se encogió de hombros. Cuando me fuí arrastrada sentí que la pelinegra que quedó atrás estaba riéndose a costa mía, le encantaba burlarse de mi.

— ¿Ella es nueva? -preguntó Doyeon hablando de Yoonji- Nunca la había visto.

— Si, ella es Min Yoonji, pero lo más sorprendente es que es mi amiga.

— Unnie tiene más amigos -dijo Dahyun con toda la felicidad, ya quería golpearla- También está SeokJin, va a la escuela de chicos, yo hasta hace poco la shippeaba -luego comenzó a susurrar- pero él me dijo que es gay.

— Oh, ¿que bien? -Se limitó a responder en modo de duda la chica más alta del grupo.

Dahyun de la pasó hablando, contando tantos chismes como pudo, creo que contó todo lo de la escuela, hasta le dijo cosas que pasaron o se rumoreaba los años anteriores donde Doyeon no estaba. La pobre chica solo asentía o decía una respuesta corta, no sabía que decirle, la verdad que yo tampoco sabría.
En fin, la campana sonó, llevamos a Doyeon a su clase y como era obvio, Dahyun siguió llevándome hasta la nuestra.

— Sé donde esta nuestro salón, ¿Ya me puedes soltar?

— Te quejaste todo el día, tendrías que agradecerme, te traje a tu amiga de la pre-adolecencia.

— Tan entrometida como siempre ¿Cómo es que te enteraste de eso?

— Bueno, me contaron y decidí juntarlas de nuevo.

Quizás la tierna muchacha solo buscaba hacer algo bueno, recibir mi aprobación o que sé yo, pero hay algo que ella nunca sabría, cosas que yo me guardé.
A la edad de 12 o 13 años, la anterior YeWon, la que tenía cabello negro y todavía más pequeña estatura, intentaba encajar entre las personas de la escuela, pero aún así seguía gustandome la soledad, siempre fui de esa manera.
Kim Doyeon era una de mis amigas, de ese grupito que tenía antes donde todas fingían, eso no era para mi, así que un buen día deje de hacerlo, Sunmi y Serri, o las zorra 1 y 2, se molestaron mucho. "quien no es de nuestro grupo es alguien digno de despreciar", maldita frase era aquella. La única que quedó conmigo era Doyeon, la pequeña del grupo, pero a su vez -como siempre- la más alta, pero terminó siendo un gran problema para ambas.

— ¿Señorita Shin? -llamó la profesora- ¿Puede decirme que acabo de explicar?

— ¿En serio? Soy la única callada y me llama la atención a mi, sabe usted bien que siempre estoy muy pendiente de su clase, estoy llevando muy bien mis notas ¿Por qué no le pregunta a las que hablan?