Esa mañana en el café fue muy emocionante, me puse al tanto de todo lo que había pasado en años. Casualmente hablo de toda la secundaria, menos de Niall, y yo tampoco le pregunté. Nina había sido mi amiga desde que usamos pañales prácticamente, nos habíamos contado todos los secretos y ella había sido la primera que se enteró de Niall.
- Em, y bueno ¿tu vida amorosa? - preguntó un poco incómoda.
- Bien, bastante bien de hecho, estoy comprometida - dije sonriéndole mientras levantaba mi mano izquierda moviendo mi dedo suavemente.
- ¡¿En serio?! ¡No puedo creerlo! Es hermoso.
- Si, eso creo - dije mirando el anillo.
- Siempre pensé que te casarías con nadie a menos que fuera Ni... - se detuvo de inmediato cuando se dio cuenta de lo que había dicho, levante mi miraba, bastante sorprendida, y ella me miró con ojos tristes y cara de arrepentimiento, me sorprendió tanto su reacción que solo pude reír.
Comencé a reírme a carcajadas y ella solo me miraba sin comprender que era lo que pasaba, una vez que terminé su cara se calmó.
- Ay ¿Qué paso? - dijo desconcertada.
- Es... solo... que... - respiré profundo para intentar recuperar mi respiración normal - te veías tan preocupada.
- ¡Me diste un susto terrible! Yo pensando que te ibas a levantar e ir, te reís en mi cara.
- Disculpa, es que, esperaba que me hables de él antes y como que lo esquivaste y se te escapo.
- Si, lo sé. Es que después de tantos años sin verte no sabía cómo te tomarías que te hablen de él así como así.
- Ahora lo tomo bastante bien, creo. Por lo menos ya no lloro tanto - dije con una mueca fingiendo una sonrisa, no quería que sepa que si me seguía afectando - Y ya que estamos hablando de esto, quería hacerte una pregunta. ¿Sigue vivo?
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Nunca dejaré de amarte
RomanceAños después de una tragedia Ivy vuelve a Irlanda, su hogar y la ciudad que fue testigo de la muerte del amor de su vida. Buscando respuestas encuentra más de lo que esperaba.
