Lección 7

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Me habia levantado temprano aunque fuese fin de semana tenia comprar los boletos de opera, cuando llegue mi padre estaba en casa, maldicion eso era una mala señal para mi, trate de hacer el tonto y fingir que lo habia notado, necesitaba llegar a mi habitacion.

-Tobías- dijo mi padre mientras me veia subir los escalones.

Maldicion susurre para mi mismo.

-Si padre- conteste al no tener otra opción.

-Tu madre y yo tendremos una cena de negocios hoy.

Vaya pero que alivio no estarían en casa por lo que no habria problemas o al menos eso pensaba.

-Nos acompañara- finalizo mi padre.

-Pero, padre...

-¿Pero?- interrumpió el.

-Ya tenía planes hoy- conteste nervioso.

-Nos acompañara a nosotros es una orden no una opción Tobías- dijo mi padre sin mas antes de irse.

-De acuerdo.

Dije sin mas que decir, me dirigui a mí cuarto y trate de llamar a Kim para cancelar, ella no contestaba, tenia la suerte de ser una persona insistente o al menos lo era con ella.

-Buenooo-dijo bostezando.

-¿Te desperte?.

Vaya pero que linda se oye su voz adormilada, quien diria que Kimberly Carlier era floja los fines de semana.

-Para nada-dijo sarcásticamente.

Pues al parecer el sueño no le quitaba lo sarcastica.

-Lo siento si lo hice pero me surgio algo, no creo que pueda llevarte a la opera.

-Esta bien no hay problema.

-Te lo compensare despues.

-No hace falta.

-Claro que si, realmente queria ir contigo pero mis padres quieren que los acompañe a una cena de trabajo que tendran.

Queria verte con todas las ansias del mundo.

-¿Porque irias a una cena de trabajo de tus padres?.

-No lose, lo mismo me preguntaba... Pero bueno son los padres.

-Supongo.

-...Te llamare despues.

-Claro.

Un dia sin verla para mi era un completo desperdicio.
Se acercaba la hora para ir a la cena por lo que comencé a arreglarme mientras me ataba la corbata mi madre entro a mi habitacion, su embarazo ya era un poco mas notorio.

-Se que tenías una cita con Kimberly- dijo mi madre mientras se sentaba en mi cama.

-No era una cita.

-Claro.

-Bueno para mi si es una cita, par ella no lose- dije con una sonrisa- las mujeres suelen ser algo complicadas a veces.

-Pero aun asi la amas.

-Si- dije algo avergonzado, mi madre realmente me daba la confianza para hablar con ella sobre temas como estos.

-Y ella,¿ya lo sabe?.

-Aun no, la verdad no estoy seguro de lo que ella sienta por mi.

-¿Estas seguro? No creo que cualquier chica pueda estar contigo demasiado tiempo aunque seas atractivo.

El rey de los Idiotas©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora