Capítulo 16

1.4K 162 13
                                    

Me quedo estática.

¿Arya?

Seguramente me haya confundido con otra persona, pero su mirada es como si estuviera seguro que yo fuese esa persona. Aaron me mira sorprendido, niego con la cabeza asegurándole que no lo conozco. Nunca he venido al reino de hielo hasta ahora.

—Señor mi escolta acaba de ingresar a la Guardia Real, es la primera vez que ha venido a este reino. Me temo que se ha confundido de persona.

—Joven, los ojos de mi tesoro no los olvido, aunque me borrase la mente y jovencita sus ojos son los mismos de los que hablo.

Me quedo estupefacta ante su declaración, pero sé que se ha equivocado.

—Lo siento, pero como ha dicho el príncipe nunca he venido a este reino, por ende, es la primera vez que tengo el gusto de conocerlo.

El rey suspira mientras se acerca.

—De acuerdo, entonces me disculpo por mi error. Ahora, ¿qué necesitan de mí?

—Tengo entendido que han traído a un hombre ayer en la tarde y lo han llevado a las mazmorras. Ese hombre es uno de mis escoltas, nos hemos separado en un accidente. Me gustaría que lo liberaran.

Aaron habla por mí, en esta situación no tengo ni voz ni voto.

—Entendido, sin embargo, me gustaría pedir algo a cambio.

—¿Qué seria? —pregunta Aaron

—Que cenaran con nosotros, estoy seguro que han tenido un largo viaje y necesitan reposo. —su proposición nos deja en sorpresa, pero nos quedamos en silencio. —Traed al hombre de las mazmorras

El rey se dirige a los soldados que vigilan la puerta, ellos rápidamente acatan la orden y salen de la habitación.

—Por favor, les prepararé habitaciones para que puedan cambiarse y ponerse ropa acorde a nuestro clima. Estoy seguro que han pasado frio.

—Gracias por su proposición, pero nos gustaría esperar que llegue nuestro amigo. Luego iremos a las habitaciones. —respondo antes de que pueda evitarlo.

Aaron ante la falta de respeto que he cometido; me mira enojado. Los nervios me carcomen por dentro, pero dejo mi rostro serio. Miro al rey quien se muestra sorprendido para luego, ante todo pronóstico, comience a reír.

—Tienes incluso el mismo carácter —escucho su murmullo, miro a Aaron quien parece no haberlo escuchado. El rey se acerca y con una sonrisa que logra ponerme los pelos de punta se dirige hacia mí. —De acuerdo, será como dice jovencita.

Asiento. No decimos nada más, hasta que escucho pasos en el pasillo.

—¡Soltadme! ¡Verán que cuando me suelten los voy a machacar!

—Ese definitivamente es Fredic y se ve que no ha tenido un buen día —comenta Aaron divertido, yo simplemente asiento.

Miro hacia la puerta esperando que entren con Fredic. La puerta al abrirse muestra a dos soldados tratando de mantener la ira de Fredic a raya. Mi rostro se descompone a causa de la furia que siento por dentro. Mi sangre comienza a hervir al ver a Fredic con el rostro golpeado, el cabello suelto y sucio. Su ropa fue cambiada por ropajes viejos y desgarbados. Lo han atrapado, herido y tratado como a un criminal.

—¡Malnacidos! —mi grito atrae la atención de los presentes en el salón.

Cegada por la furia me acerco a los dos soldados que tienen agarrados a Fredic, al que lo tiene agarrado por la izquierda lo reconozco, es el idiota que me insultó en el bosque.

La Guerrera de la LunaNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ