Jade Wilde Una idiota obsesión.

De vuelta a la realidad.

Parece mentira lo rápido que pasa el tiempo cuando estamos juntos. Ya tengo que regresar a casa y aún no me quiero ir.

-Creo que debo regresar a casa.

-Claro mi amor. Ahorita mismo. –se dirige a coger las llaves y el casco. ¿Me pregunto por qué nunca utiliza la camioneta?

-¿Porque nunca utilizas la camioneta?

-Fue un regalo de mi madre.

-¿Y nunca la has usado? –pregunto sorprendida.

-No, ni pienso hacerlo.

Está muy dolido con sus padres. Bueno, quien no lo estaría. Lo abandonaron desde el primer día que nació.

-¿Te afectó mucho lo de tus padres verdad? –me siento mal por él.

-Creo a nadie le gustaría que lo abandonen el día de su nacimiento.

No respondo. Esto debe ser muy duro para él.

-¿Te gusta la camionera? –me pregunta gracioso.

-¿y a quien no? – contesto igual.

-¿Sabes manejar? –solo si aprender con mi papá es saber manejar. Entonces sí.

-Siempre practicaba con mi padre. Solo que no tengo licencia.

-Yo puedo enseñarte. –me dice divertido.

-Me encantaría. –le sonrío. –pero en otro momento. Tengo que ir a casa.

-Claro bebé. Vamos.