PHOENIX ➢ Robb Stark

D I E C I S I E T E

  Después de aquel beso, no volvieron a hablar de aquella forma. Por parte de Robb era porque tenía cosas muy importante que hacer, apenas le daba tiempo para saludarla. Y por la parte de Skylar era porque el beso, aunque le había gustado, sabía que era lo correcto en esa situación. En la guerra no hay espacio para amores.

  Las únicas veces que establecieron una conversación en esa semana, fueron solo unas pocas palabras. Skylar estaba todo el día con Bran y Rickon, mientras que el Stark estaba con los lords planeando las estrategias.

  El Bolton al igual que el Stark estaban ocupados, así que tampoco hablaba con ella. Pero la semana paso, y con ello ya estaba todo listo, los caballos, los hombres, los estandartes. Y así el tiempo para irse se hizo presente, todos estaban agitados y nerviosos, muchos sabían que la guerra ya estaba allí. No solo era para liberar a Ned Stark,  si no para ayudar a los Tully que estaban siendo atacados por los mismo Lannister.

  Skylar vio como Robb mandaba a sus hombres, para después  verla y acercarsele.

  —¿En serio quieres venir? —pregunto por tercera vez en el día. Ella se le quedo mirando con una sonrisa suave, y asintió—. Sabes que es peligroso, pued--

  —Si, es peligroso, pero correría el riesgo —se le quedo mirando a aquellos ojos celestes—. El fénix puede ser pacifico, pero en las peleas son peligroso. El fuego que puede amenar.

  —Un fénix no es como un dragón —le dijo el Stark, cosa que hizo sonreír más a ella.

  —Cierto, porque mientras el dragón es guiado por el fénix. Siempre ha sido guiado por él fénix, y por eso los Targaryen tuvieron mucho tiempo en su trono —su voz sonó firme, y segura Advirtió que Robb se le quedo mirando sonriendo—. No pelearé, solo me aseguraré de que no metas la pata.

   —No meteré la pata, te lo aseguro —le contradijo.

   —No puedo creer eso —negó—. Todos cometen errores —Skylar agarro la mano del Stark, y lo vio fijamente a los ojos—. Primer consejo; no te enamores, vas a la guerra, no a un baile. 

   —¿Y si ya es tarde para ese consejo? —susurro mirando su rostro como lo más hermoso que haya visto jamas.

   —En ese caso; No pienses que eso terminaría bien.

  Después de las despedidas, algo que se le hacia muy triste a Skylar. Aunque no se puso despedir de Rickon, ya que este estaba encerrado en sus aposentos. Bran lo ultimo que les dijo de él era:

  —No quiere salir, dice que todos los dejan —habia dicho, los dos mayores se quedaron viendo para luego ver al menor y asentir.

  —Rickon no se puede comportar como un niño para siempre. Es un Stark, y ya casi tiene seis años —Robb suspiro—. Madre no tardará en volver.

  —Volveremos, te lo prometo, Bran. Traeremos a tu padre también —le dijo al niño, para luego acercarse y darle un beso en su frente—. Y tu serás un buen Lord de Invernalia mientras Robb no este.

  —Nadie le prestaría atención a un niño lisiado —comento Bran mirando al suelo, su voz estaba apagada.

  —Hasta el hombre más pequeño puede ser un buen líder, y también puede serlo un lisiado —le revolvió el cabello a Bran, y le dedico una sonrisa cálida—. Las personas deberían saber que no todo es físico, si no que muchas cosas importantes están aquí —ella puso un dedo en su frente.

  —Nadie lo ve así —le contradijo.

  —En ese caso, mi familia era nadie, y yo también —dijo sonriendo divertida—. No solo los valientes ganan las batallas, Bran —el niño no le contesto, solo esbozó una sonrisa a medias.