-¿April estas bobeada? –me dice riéndose.

-¿Otra palabra nueva para tu diccionario soso?

-No, hablo enserio. –se pone serio. –¿Estas con el ‘’Jade’’ que creo que estas? –dice haciendo comillas con sus dedos.

-¿Con que ‘’Jade’’ piensas que estoy? –también hago comillas con mis dedos.

-¿Jade Wilde? –dice asombrado.

¡CUANDO DEJARAN DE SORPRENDERSE TANTO! Acaso cargo un papel en la frente que dice FEA.

-¿Porque te sorprendes tanto? –le digo frunciendo el ceño. –Además, ya no tenemos nada.

-Pero lo estabas pensando.

-Puede ser.

-Oh! Por dios, no lo puedo creer. ¿Enserio? ¿Jade Wilde? ¿El Cretino que me dejó toda la cara hinchada porque pretendía acostarme con su novia?

-¿Tu qué? –le digo confundida y asqueada. –Espera, cuando salíamos, viniste a mi casa con una cara hinchada, ¿fue ese día?

-Sí, pero recuerda que habíamos terminado en ese entonces.

-Genial, no puedo creer que haya salido con dos cretinos. –le digo sin vacilación y sigo caminando furiosa.

¿Por qué? ¿Por Jade? Realmente no me importa.

 -¿Y quién era ella? – ok, si me importa.

-¿Enserio quieres saberlo? –creo que no quiero saberlo.

-Sí.

-Sabanna. –mi boca se forma una O y supongo que en mi frente aparece automáticamente la palabra LOSER. ¿Cómo no me di cuenta? ¿SABANNA? ¿Qué le vio Jade a Sabanna? Aparte del cuerpo y la cara bonita.

No puedo creer que no me lo haya dicho.

 -Ah.

Caminamos en silencio durante una hora hasta llegar a mi casa 

-Espera, April. –Dylan me coge de la muñeca antes de llegar a la casa y me hace girar. –quería darte algo.

 Dentro de una bolsita color azul oscuro saca una pulsera con el signo del infinito.

 -Oh, Dylan es hermoso, muchas gracias. –lo abrazo y el me lo quita mientras me coge la mano para ponérmela.

 -Simboliza unidad, eternidad, algo que nunca acaba, algo que es infinito. –me dice al oído lo que me hace estremecer. –como nosotros.

Lo miro después de que termina de abrocharla. –Dylan, siempre seremos amigos, ¿siempre lo fuimos no? Y puede que haya pasado algo entre nosotros, pero eso pasó, y aunque muchos digan que ya no podemos volver a ser amigos, solo por el hecho de que fuimos algo, es erróneo, y nosotros somos la prueba. –le digo tocándole el hombro y dándole un beso en la mejilla. –muchas gracias Dy. Siempre seremos amigos.

-Siempre. –me dice sonriéndome pero no de tristeza, realmente captó mi mensaje, si es que pretendía algo.

-Ahora ven, vamos a saludar a mi mamá.

Entramos y mi mamá está en la cocina haciendo una torta por lo que escucho la batidora, típico de ella, todos los viernes prepara un postre diferente.

-Mira mamá quien vino a visitarnos. –le digo entrando a la cocina con Dylan a mi lado.

-Oh, Dy, cariño, cuanto tiempo sin verte. –apaga la batidora y le da un abrazo. –que gusto me da verte.

-También me alegro de verla Sr. Anderson.

-Oh, cariño dime Gina. –hace una pausa y gira sus manos. –como en los viejos tiempos. -Dylan solo le sonríe.

Sin duda mi mamá aun ama a Dylan, quisiera que amara a Jade así para traerlo a comer postre, pero él no está, ya no está, y probablemente no quiera hablarme.

 -Llegaron muy temprano, así que tienen que esperar para el postre. –dice mamá volviendo a prender la batidora.

-Con ese olor, espero con gusto. –le sonríe.

-Oh cariño, y ¿qué es de tu vida?

 Dylan y mamá empiezan a hablar pero me pierdo en mis pensamientos, imaginando que Dylan pudiera ser Jade justo ahora, conversando con mi mamá, que probablemente solo con ver a Jade y sus tatuajes haría todo lo posible por separarnos, pero sé que si llega a conocerlo bien lo querrá como a Dylan, si es que yo lo termino de conocer.

Pero… uno nunca termina de conocer a las personas, ¿verdad? Supongo que hay mucho tiempo en la vida para ver como son, y yo me apresuré solo porque no me dijo lo que quería saber, que exactamente ni yo se lo que quería saber.

Jade Wilde  Una idiota obsesión.Where stories live. Discover now