My Boy ; KookMin

037.

—No, no tonto—dijo JiMin mirando a JungKook teniendo problemas con su atuendo.

—Estas cosas son mierda..—masculló JungKook entre dientes mientras dejaba caer la corbata en su cuello.

—Déjame y te ayudo...—JiMin se acercó al pelinegro y agarró la prenda para poder arrollarla alrededor de su cuello—¿Tu y NamJoon terminaron el plan ayer?

—Si ¿de verdad no quieres saber lo que planeamos?

—Nop—JiMin terminó con l corbata y puso sus manos en los pectorales de JungKook—Estoy seguro de que lo que planearon es bastante malévolo como para arruinar cualquier cosa.

—Te lo aseguró, esos dos no se casan, por qué no se casan—JungKook tomó las manos de JiMin y las puso alrededor de su cuello—Y la fiesta nos queda a nosotros...

—¿Tanta comida para nosotros?

—Estará NamJoon ahí, te aseguro que no es suficiente ni para el—JungKook puso sus manos en la cintura de JiMin y le acercó a su cuerpo—Pero podremos bailar...

JungKook comenzó a moverse lentamente, como si estuviera bailando, al compás de una música suave y melodiosa.

—Pero yo no sé bailar...

—Eres una deidad ¿de verdad hay algo que no puedas hacer?—al oír esa palabra, JiMin soltó abruptamente el cuello de JungKook y se alejó algunos centímetros—¿Todavía te incomoda?

—No me incomoda el echo de tener poderes extraño o ser un dios o algo así, me incomoda el echo de que casi te mato JungKook...—JiMin le dio la espalda a JungKook mientras jugaba nerviosamente con el borde de las mangas de su traje blanco.

—Pero no lo hiciste JiMin...—dijo JungKook al lado de la cabeza de JiMin, abrazándole por la cintura y poniendo su cabeza en el hombro del rubio—Te detuviste, pensado en lo que sientes...eso es lo importante ¿no?

—Supongo que si...—JungKook sonrió.

—¿No se supone que debas ser tú el de los sentimientos y yo el troglodita?

—Lo papeles cambian Kook...—JiMin se puso frente a JungKook y volvieron a retomar su postura anterior, con JiMin rodeándole el cuello a Jeon, y JungKook rodeándole la cintura a Park.

Entonces, los ojos de Jeon se volvieron amarillos, mientras que lo de JiMin...tomaron ese color rojizo. Jeon tragó grueso. Se sentía nervioso, pero el beso que JiMin dio después bajó todo esos nervios. No era un beso salvaje, como lo espero JungKook al ver los orbes rojizos de JiMin, más bien era suave, lento y lleno de algo especial.

Entonces un gran estruendo hizo que ambos chicos separaran sus bocas, sus cuerpos siguieron iguales. Al mirar hacia la puerta.

Jeon MinHyuk parado justo frente a ellos, con los ojos como platos y la boca medió abierta. Cierta decepción había en los ojos de su padre, a Jeon le valió madres esa decepción.

—¿Que pasa aquí JungKook?—interrogó con cierta autoridad MinHyuk.

—¿Aquí? Pues yo solo le doy el amor respectivo a mi novio ¿por que?—JungKook no dudó en acercar más a JiMin.

—¿No podemos hablar un momento?

—Tu lo has dicho, no podemos—dijo JungKook—Vete, seguramente tienes invitados de los que ocuparte, papá.

El hombre ya un poco canoso, cerró la puerta de un golpe y se pudieron oír sus latidos fuertes y sus pisadas enojadas.

—¿Hemos cometido un error, JungKook?—preguntó JiMin aterrado de que la boda pudiera llevarse acabo. JungKokk sonrió y agarró el mentón de JiMin.