—Te voy a matar yo mismo maldito idiota, si no vienes conmigo ahora—le recalcó JungKook con tono fuerte y enojado.
—¡No voy a ir contigo! ¡Vete de una vez!
—¡Te va a partir un rayo si te quedas aquí!
—¡Eso no te importa!—JiMin aún seguía absteniéndose a mirar a JungKook a los ojos. No se volvería para ver como ese par de ojos le intimidaban aún más.
—¡Ven aquí de una vez!—JungKook se acercó al rubio, y le agarró por la cintura para ponerlo en su hombro y llevarlo dentro donde no pudiera pasarle nada.
—¡Suéltame maldito troglodita de mierda!—pataleaba JiMin en el hombro de JungKook, moviendo los pies de arriba abajo y golpeando la espalda del alfa.
—¡Cállate de una puta vez rubio!—le dijo JungKook mientras luchaba para que JiMin no se cayera de su hombro antes de entrar en el edificio.
JiMin no dijo nada más, pero siguió forcejeando contra JungKook y sus fuertes brazos sobre su cintura. Todos los esfuerzos eran en vano ya que JungKook era mucho más fuerte que el rubio.
Cuando entraron en la escuela, JungKook bajó a JiMin y este se paró justo en frente totalmente furioso con el alfa. Ya esa reputación de matón no le importaba a JiMin, ya no le importaba si recibía alguna paliza o grito de parte del alfa frente a el.
—Eres un idiota.
—El idiota que te acaba de salvar de un rayo—respondió JungKook cruzándose de brazos mientras miraba a JiMin desde su altura. Parecía realmente adorable con sus mejillas rojas del enojo y los puños apretados a los lados de su cuerpo.
—Yo no necesitaba que me sacaran de ahí ¿de acuerdo? No necesitaba a ningún cavernícola que me rescatara.
JungKook no podía creerlo.
—¿Acabas de llamarme cavernícola JiMin?
—Si señor cavernícola—respondió seguro de sí mismo. Ya era suficiente
—Te acabo de salvar la vida miserable Omega—JungKook golpeó el pecho de JiMin con su dedo haciéndole retroceder—Deberías agradecerle a tu superior, inútil. Debiste haberte salvado el culo solo, entonces. No debiste meterte con quien no debías, lo menos que hubieras podido hacer es alejarte. Pero no puedes acatar una sola orden de tu superior Omega asqueroso.
JiMin no supo que decir. Ahí estaba Jeon JungKook, demostrándole a todo mundo como se destruía a alguien con solamente palabras.
—Y no me importa quien seas, o que reputación de niño lindo tengas aquí. Te metes conmigo, y pagas las consecuencias JiMin.
Lo próximo que JiMin sintió, fue un golpe en su mejilla derecha y el golpe que se dio al caer al piso totalmente inconsciente.
• • •
Al despertar entre esas dos cortinas blancas y ese olor tan penetrante a cloroformo y alcohol de farmacia, JiMin supo que nada había salido bien.
Al tocarse la mejilla derecha, arrugó la cara sintiendo un dolor un poco agudo en su rostro.
JiMin creyó no tener las mismas repercusiones negativas cuando se trataba de JungKook. Pero al parecer, estaba equivocado rotundamente. Jeon JungKook era exactamente el mismo troglodita mal amansado con todos los seres vivos de la tierra.
JiMin corrió la cortina para ver si había alguien alrededor, y se sorprendió bastante al ver que si lo había. Y no exactamente la persona que más esperaba ver ahí.
—¿Que haces aquí?—preguntó JiMin seco a la persona junto a él.
—¿No Puedo?
—No después de que fueras el motivo por el que estoy aquí—JiMin apartó la mirada de la de JungKook, ahora se sentía un idiota.
Idiota por si quiera haber pensado que JungKook sería diferente por una vez. Y menos con alguien como el.
—Eres un dolor en el culo ¿sabías?—le recordó JungKook.
—Wow, gracias por tus ánimos JungKook..—respondió JiMin rodando los ojos y volviendo a tocarse la mejilla dañada.
—¿Que harás el sábado?
¿Ahora que? JiMin ya no sabía que putas esperar de ese loco frente a el. ¿Volaría una escoba a Narnia después de este encontró o algo? Vaya que JungKook estaba totalmente desquiciado.
—¿Que?
—¿Que harás el sábado? No volveré a repetirlo JiMin—dijo arqueando una ceja y poniendo su apoyo en una pierna.
—Voy a una fiesta...
—Muy bien...—dijo JungKook mirando a JiMin mientras decidía algo en su mente—Iremos juntos.
—Wo, wo, wo—vociferó JiMin sin siquiera pensarlo—¿Que te pasa?
—Nada—respondió como si fuera lo más normal que; 1, te invitaras a una fiesta solo, y 2, que fuera de acompañante de un tipo al que acabas de golpear.
—Nah—dijo JiMin sin poder creérselo aún—¿Donde están las cámaras Jeon?
Buscó las benditas cámaras por todos lados con su vista, pero no vio una sola. Pues al parecer si estaban solos.
—Iremos, eso es todo. No hay ninguna cámara escondida—respondió—Ahora, arréglate. Vamos a comer.
—¿¡Que!? JungKook, reacciona ¿necesitas medicina o algo?
—No necesito sal de esa camilla, tomate unas pastillas, cubre ese moretón con algo y vamos a comer Park.
JiMin no podía estar más sorprendido. Jeon JungKook, el chico más troglodita, seco y brusco del mundo, estaba invitándole el sábado a la fiesta y le estaba invitando a comer. Nada de esto podía ser verdad.
—No tengo todo el día Park. Sal de ahí y mueve tu culo hacia el baño o donde sea que tengas que ir para hacer lo que te dije—JiMin estaba perplejo. JungKook solo se volteó sacó tu teléfono y tecleo algo en el mientras salía de la enfermería.
JiMin no sabía qué pensar, sentir o hacer. Comenzó por pellizcarse el brazo, estaba despierto...¿entonces que fue todo eso? ¿Estaba pasando enserio? Pues parece que si, y bastante enserio.
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Loquisho este JungKook xd
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