🎄 ESPECIAL NAVIDEÑO 🎄

385K 34.4K 65.7K
                                    

KANSAS

—¿Qué le regalarías al diablo para Navidad? —inquiero inclinándome hacia un estante y hundiendo un dedo con desagrado en la panza de un oso de peluche.

El muñeco comienza a cantar una horrible canción navideña.

—¿Por qué si quiera pensarías en obsequiarle algo al diablo? —replica Beasley recorriendo el pasillo del mercado con un carro de compras a punto de rebalsar—. ¿Sabes lo que costaría el envío hasta el centro de la Tierra? Son alrededor de6.300 millas y se encuentra a una temperatura mayor a los 6.000 grados contando que...

Lo interrumpo.

—Ya entendí, cierra la boca o ayúdame a decidir qué voy a regalarle a Sierra, Einstein. —Él arquea una ceja en mi dirección y esos intensos ojos oceánicos brillan con diversión—. ¿Por favor? —añado.

—Te ayudaré si tú me ayudas a encontrar algo para Jamie —negocia—. No estoy seguro de qué se le regala a un animal para Navidad.

—¿Un hueso de hule? ¿Una correa?

—No es un perro —dice indignado.

—¿Máscara?

—¿Para que lleve su aspecto de mapache rabioso a otro nivel? —pregunta—. No, nada de cosméticos derivados del petróleo.

—¿Un terrario? —Reprimo una sonrisa y él enarca ambas cejas con seriedad recordando el incidente con el arácnido.

—No eres de gran ayu... ¡¿De dónde sacaste eso?! —chilla de repente, mirando espantado a algo detrás de mí.

—¿Te gusta? —dice la niña levantando entre sus pequeñas manos a un cachorro Beagle—. Le puse Timberg, ¿puedo quedármelo? —suplica antes de estrechar al can entre sus brazos y que él le lama la mejilla.

—En realidad, tu amigo ya tiene nombre. —Me pongo en cuclillas y escudriño la placa que hay en el collar—. Se llama...—Comienzo a reírme ante la ironía del nombre.

—¿De dónde sacaste esta bola de pelo? —exige saber Beasley—. Quien sea que lo trajo a un centro comercial violó las políticas del establecimiento, y si lo robaste irás a la correcional de menores, o sea a la cárcel de...

Me pongo de pie y lo golpeo con fuerza en el brazo al ser testigo de cómo la mirada de la niña se cristaliza asustada y su labio inferior comienza a temblar.

—¡Mira lo que hiciste! —lo acuso haciendo un ademán a la infante.

—No quiero que mi hermana sea una delincuente canina —se defiende con el ceño fruncido, pero entonces sus ojos se dirigen hacia Zoe y su mirada y expresión se tornan más suaves. Suspira y se arrodilla frente a ella, aún guardando distancia con el Beagle—. Lo lamento, pero creo que esta pequeña cachorrita echa de menos a su dueño —dice tomando con las puntas de sus dedos las patas traseras del animal y asegurándose de que es una hembra. Mira ahí abajo como si fuera una partera observando la cabeza de un bebé salir por la vagina por primera vez en su carrera—. Ahora vamos a buscarlo para que no termines en prisión —añade antes de ponerse de pie y sacar el pequeño alcohol en gel que comenzó a cargar consigo siempre que Zoe está cerca.

Lo golpeo por eso.

Otra vez.

—No es una nena, es un varón y se llama Timberg —lo corrige la niña—. T-y-m-v-e-r-g —deletrea para mi diversión yel completo horror de Malcom.

—Necesitas prestar más atención en tus clases de Lengua —añade mi frustrado y espantado novio pasando una mano a través de su cabello—. ¿Si quiera sabes deletrear algo bien?

TouchdownDonde viven las historias. Descúbrelo ahora