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15. Humanidad

-Pues eso se avisa- Dije algo molesto.

-No entiendo que tiene de especial eso de " jugar" con los labios- Levantó los hombros el alado y miró al mayor.

-Bueno...es tu turno- A diferencia de a mí, a Suga le sonrió gentilmente.

-Venga entonces- Simplemente comentó.

El de rostro afeminado se acercó al contrario e inclinó un poco su cabeza para poder besarlo. No obstante nos sorprendimos cuando se frenó para carraspear.

-Lo siento...- Se sonrojó levemente y volvió a por lo que iba.

El mayor en respuesta solo levantó una ceja esperando a que sus labios hicieran contacto.

¿Por qué estaba nervioso?
Bueno...Para qué preguntárselo. Se notaba que al "ángel" le molaba Suga cosa que hacía ver que no era cierto que no entendía que había de especial en "jugar" con los labios.

Al final los dos acabaron besándose aunque noté más profundidad en el acto. Fue simplemente...Algo raro.

Jimin carraspeó una vez más y sonrojado se tapó la boca mientras mojaba su labio inferior con la lengua.
-V-vayamos marchando- Nos ordenó algo nervioso.

Cuando volvió a caminar por delante de nosotros miré a Suga y le sonreí de lado. Este no expresó nada ante mi gesto. Simplemente siguió al alado.

Jimin nos hizo entrar a la casa por una entrada secreta que llevaba directamente al sótano.

-Una vez que hayáis encontrado a V y a vuestro amigo volved a este lugar y salir por esta entrada. No os separéis...Y recordar esconderos.- Nos susurró antes de marchar por su parte.
Suga y yo nos miramos.

Si nos decía eso debía ser por algo.

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Tenido mucho ciudado de no ser vistos el mayor y yo fuimos moviéndonos por la casa. Mirando por todos los rincones y habitaciones posibles haciendo el mínimo ruido posible.

Él caminaba detrás de mí y yo estaba tan concentrado, tan alertado y atento que no me dí cuenta de cuando nos separamos.

-Yoongi- Dije a media voz ya que no podía gritar.

Muy bien...Acabábamos de romper una de las órdenes de Jimin.

No hubo ni un solo movimiento al llamarlo. De hecho hubiera retrocedido de no ser porque escuché la voz de Taehyung.
Mi corazón se disparó y casi corriendo me dirijí al lugar de donde provenía.

Pronto me dí cuenta que el rubio no estaba solo al escuchar otra voz en aquella habitación. De hecho, estaban manteniendo una conversación.

Apoyé mi espalda sobre la pared blanca de la mansión y me asomé con mucha cautela por el hueco que dejaba la puerta medio abierta.

Mis ojos se abrieron por un momento al ver a Taehyung arrodillado en el suelo, con las manos atadas. El tal Hoseok estaba caminando tranquilamente dando vueltas alrededor de él mirándole.

-Me das pena Taehyung. Mucha pena- Le dijo con desprecio el pelirrojo.

-Lo siento si eso te causa molestia- Le contestó el mencionada con la mirada fija a ningún punto. -He venido por mi propia cuenta...Ya he dicho que no hacen falta ataduras-

-Cállate- Se paró delante de él y le observó detenidamente por un momento. Ladeó su cabeza y sonrió.
-Tú lo único que quieres es entregarte a los placeres de la vida...Como hacen los humanos. Quieres tener toda esa basura impura en la mente y ensuciar tu alma- Con una mano cogió al rubio de la mandíbula e hizo que levantara la cabeza para mirarlo sin deparos.

Él contrario atado no podía hacer nada, solo estaba bajo el control del pelirrojo.

-Si amar para ti es basura impura que ensucia, entonces sí...Sí quiero ser como la humanidad- Le miró como el otro deseaba aunque sin ninguna expresión en la cara.

El pelirrojo río y algo brusco le soltó.

-Eres débil...Y por eso no puedes regresar hacia atrás. O al menos luchar por vivir-

El rubio sonrió de nuevo con la mirada en la nada.

-¿Mirar atrás? Puede que me enseñaras a amar...Pero no me enseñaste como es ser amado de verdad- Le replicó.

-No sabes de qué hablas- Se rió Hoseok de él.

-Sí...Sí que lo sé- Dijo el rubio manteniéndose neutral.

Una sonrisa preciosa se dibujó en su rostro y agachó la cabeza. Él contrario la percibió y de nuevo lo observó extrañado.

En ese momento pudo darse cuenta de las marcas que le hice en el cuello anoche.
Se le frunció mucho el ceño e inesperadamente lo abofeteó.

-Te has entregado a otro... Desgraciado-

Quise salir del lugar donde estaba y hacer algo, pero no debía perder la cabeza. Debía mantenerme en mis cabales.

-La Humanidad no es perfecta Hoseok...Pero es hermosa cuando no son orgullosos, cuando son amables, cuando aman de verdad. Si hubieras esperado un poco más te habrías dado cuenta de ello y también te habrías dado cuenta de lo cuan hermosos son realmente porque pese a que sean más débiles que nuestra raza...Su espíritu es más fuerte. Yo los amo y me gustaría vivir como ellos. Me gustaría reír y llorar con libertad. Me gustaría poder demostrar afecto a las personas que quiero...

En eso nos gana la Humanidad...
La hermosa Humanidad-

/Sorry, sorry. Se que tardé mucho en actualizar esta vez ( >▲<)
Pero de alguna manera intentaré compensaroslo. ♥♥

Bueno...No hay nada que decir respecto a este capítulo. Todo lo que dice Tae sobre la humanidad son cosas que yo misma pienso. Puede que de vez en cuando seamos egoístas pero es verdad que cuando amamos, en cualquier ámbito, somos capaces de darlo todo, de sacrificarnos o de incluso llorar por alguien a quien realmente no conocimos como persona. (Esto último lo digo por la muerte de nuestro ángel Jonghyun. "Lo siento por recordar") Me parece muy tierno el apoyo que entre todos nos estamos dado y creo que cosas así son las que compensan las malas.

PD: Gracias por seguir apoyándome. De verdad os amo ♡♡/