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15. Humanidad

Agarrandonos a los dos de las muñecas Jimin extendió sus majestuosas alas para volar. Me sorprendió la rapidez y la agilidad con la que esos seres podían desplazarse de un lugar a otro.
Ascendían a una determinada altura y a partir de allí se movían en línea recta.

Obviamente en todo el viaje Suga y yo estuvimos gritando como nenas.
La altura era impresionante y si caímos...Bueno, si caímos podíamos decir adiós.

Fueron como solo unos 40min lo que a nosotros en coche nos hubiera costado 5 horas en recorrer. Jimin descendió del cielo y antes de que sus pies tocaran al suelo nos soltó a mí y al mayor quienes caímos sobre nuestros pies alucinados y con los cabellos realmente desordenados.

Finalmente el alado aterrizó muy cool echándose el flequillo de su precioso cabello asombrosamente intacto.
Sus alas hermosas se plegaron como un mecanismo perfectamente diseñado.

-Hemos llegado- Nos dijo simplemente.

Sin perder el tiempo comencé a arreglarme los cabellos con las manos mirando a mi alrededor. Ahora nos encontrábamos en lo que parecía una ciudad totalmente abandonada.

Jimin se hizo paso y comenzó a caminar por delante de nosotros. Comprendimos en ese instante que solo teníamos que seguirlo.

-Escucharme atentamente...- Comentó el de rostro afeminado siguiendo con la caminata. -Yo haré tiempo para que encontréis a vuestro amigo y a V. Sólo tenéis que coger y esconderos hasta que yo pueda reunirme con vosotros y llevaros lejos de Hoseok y Namjoon-

-Espera, espera- Protestó el mayor sin dudar. -¿Me estás diciendo que nos estás llevando a donde os escondeis y pretendes que nos metamos ahí? O sea...Vamos a morir- Se rió amargamente.

-No porque para eso he ideado un plan. Además haré todo lo que haga falta para que salga bien- Siguió caminando - Puede que vosotros no podáis hacer frente a Namjoon...Pero yo sí.-

Era verdad...Realmente fue un golpe de suerte que él decidiera ponerse de nuestro lado.

Estuvimos caminando durante un rato aunque en ese tiempo no dejé de mirarle la espalda al alado.

-¿También podrías contra ese tal...Hoseok? Tal y como hablabas...Parece que él también está donde vamos-

-J-Hope tiene las alas cortadas...Es tan vulnerable como un humano. No obstante tiene suerte pues no se separó de su arco, con el que ahora da caza a uno de sus seres queridos- Suspiró profundamente al decir eso.

Se notaba que le dolía. En verdad ellos tenían prohibido sentir...Pero no significava que no lo hicieran.

Jimin observó una mansión a unos pocos metros delante de nosotros cuando frenó su caminata. Se giró hacia nosotros y nos observó serio.

-Estoy preparado- Dije sin dudar.

El de rostro afeminado se acercó a mí sin apartar la mirada. Pensé que me tocaría el hombro y haría lo típico de asentir la cabeza. Sin embargo hizo algo muy distinto...Algo que realmente no me esperaba...
Jimin posó sus labios contra los míos cogiéndome de la nunca.

Lo empujé cuando me recuperé del asombro y lo empujé alejandolo de mí.

-¡¿Q-qué coño haces?!- Me limpié los labios con pura cara de asco.

Él se rió ante no sólo mi reacción, sino ante la de Suga también quien pareció ponerse ya alerta.

-Tranquilos...Que no os voy a violar. Sólo quiero daros un poco de aliento de...- Se quedó pensativo por un momento -...Ángel. Vuestras auras son fáciles de detectar. Es para evitar que nada salga mal-