Últimamente miles de dudas me bombardean a diario, pero tengo mucho por delante y experiencias que me las van a contestar.

Quiero seguir, quiero ser Devon.

¿Volver?

O tal vez es momento de un nuevo inicio.

Vine aquí y aprendí tres lecciones importantes.

Uno, ser un luchador nunca es fácil. Por Roxanne.

Dos, la inocencia y el mañana es un regalo que hay que apreciarlo porque no todos tienen la dicha de tenerlo. Por mis pequeños luchadores del hospital.

Y la tercera pero no menos importante, aprender a llevar la culpa y aprender a que no podemos controlar todo lo que pasa a nuestro alrededor, nos deja una carga difícil de llevar. Por Evane Alessandra.

Mi terapeuta me sigue diciendo que hay algo que debo descubrir por mí mismo para seguir con mi vida. Que sigo huyendo y tengo que averiguar porque huyo... porque esa es mi opción que me viene a la mente cuando salgo lastimado.

Lecciones que hasta donde estoy hoy, las atesoro en lo más profundo de mí.

Cambio y fuera, El único y genuino Devon."

Buenos Aires, Argentina. 29 de mayo, 2019.

26 millones. Miré de nuevo el contrato que me habían enviado, repasando la suma y cuando debería de confirmar mi renovación. Era una suma exorbitante, más cuando fui consciente de que sería el jugador mejor pagado. Y no era la única, tenía más pero sin duda mi cabeza no estaba en esto. Además, era mi carta para que jugara en la copa américa en un mes.

Querían mi regreso, yo lo ansiaba pero no de esa forma. Me costaba entender porque ahora todos estaban más enfocados en mí.

Porque ese mundo hizo desgracia en mi vida. Me quitó la privacidad, mis ideales y sin duda fue lo que inició el final de todo.

Irme fue fácil, terminé mis obligaciones con el equipo y en cierta parte agradecí el espacio que me estaban dando las personas, pero en cierta forma se formaba una presión en mí al negar o aceptar este contrato. Era mi sueño, siempre lo fue pero ¿estaba listo para volver? No.

No quería dejar lo que amaba en el mundo, lo que me apasionaba hacer; pero no puedo retomarlo sin si quiera buscarme a mí.

Era difícil decirle adiós y lanzar todo tu esfuerzo de los últimos años por la borda; pero ya no estaba tan seguro de continuar de nuevo allí. Era como si volviera a la rutina, al viejo yo... y a la misma mierda de siempre. Quería paz, un nuevo inicio aunque no podía estar huyendo para siempre.

Como si todos esperan mi regreso para lanzarme preguntas de: "¿Estás bien?" "¿Volverás a las andadas?" y mierda por el estilo. Porque amo lo que hago pero no quiero que se vuelva algo que en un futuro odiaré.

—Debes pensarlo bien Devon, sé lo mucho que te puede afectar volver a Madrid —asentí viendo a mi representante y dejé los documentos a un lado, tratando de recordar las cláusulas que estaban estipuladas.

—Aún no quiero volver... no sé si estoy listo, además tengo a mi equipo aquí, a mis mini jugadores y no quiero defraudarlos —miré a Mario reírse un poco y palmear mi espalda.

—Quisiera hacer publicidad con lo que haces pero sé que quieres tu privacidad. Yo solo quiero controlar y mejorar tu imagen—yo dije que no.

—No, debo aprender a que los titulares no me definen y mis acciones hablan por sí mismas—él no estaba de acuerdo pero lo respetó.

Hermosa Pertinencia (Beautiful Last Chance)Where stories live. Discover now