Dragon Cry

Parte 14 El emperador de Arconet

La ciudad apesar de ya estar en ruinas, Mordekaiser la reduce a escombros. Yorick corre hacia mí y Olaf corre hacia Forter.

Pero el imponente fuego que nos rodeaba en forma circular sobre el suelo no les importó en lo más mínimo; lo atravesaron fácilmente, y llegaron a una distancia considerable de nosotros. Me levanté sin dudarlo y mis ojos se tornaron de un color blanco-gris, tenía la suficiente determinación como para luchar sin titubear.

Sentí un frío más intenso de lo normal, de tal manera que congelé el veneno en mi interior y todo mi brazo se llenó de un hielo oscuro, era totalmente negro como la misma oscuridad. En cuanto cubrió todo el brazo y parte del pecho, mis ojos se tornaron del mismo negro que el hielo, incluso parecía como si fuera una persona diferente.

Yorick no se detuvo y me atacó con su pala, pero esta vez lo detuve con mi mano congelada, no hice ningún movimiento más; le sostuve la pala y con un poco de fuerza, le destrocé la pala en pedazos, los cuales cayeron al suelo. Yorick con su brazo derecho me golpea el brazo, destrozando el hielo con su fuerza abrumadora, el tono tan oscuro de mis ojos perdió intensidad; volví a congelar mi brazo, pero el color oscuro también se había degradado.

Yorick estaba a punto de golpearme la cara, pero aparecí atrás de él y lo congelé por completo al tocarlo, esta vez no cometería el error de destrozar su cuerpo, por que volvería una vez más como lo haría un verdadero zombie. Karthus y sona no habían hecho un movimiento alguno, permanecían calmados.

-Parece que han atrapado a Yorick.-dijo Karthus.

-Es débil.-dijo Mordekaiser con una voz tan dominante, que hizo parecer que realmente poseía un poder mucho mayor.- Karthus, regresa al cuartel con sona, tomaré el mando esta vez y con mis propias manos los eliminaré.

-Olaf, quiero que vayas donde Armont y protejas con tu vida esa caja. Estoy seguro que es lo que buscan ellos. Me enfrentaré solo contra ellos dos.- continuó diciendo Mordekaiser mientras levantaba su mazo dorado y lo transformaba en guantes también dorados, que colocó en sus manos y se acercaba lentamente y muy decidido hacia nosotros.

Los guantes tenían escrito Arconet con un diseño muy original, las letras comenzaron a mancharse y teñirse de un negro igual al que tenían mis ojos antes de que perdieran su tono original.

-Siempre había querido luchar contra el que es considerado el emperador invencible.- dijo Forter extendiendo su mano derecha cubierta de un fuego que flameaba sobre el aire hacia él, que se acercaba cada vez más. Tenía una mirada con mucha determinación.

Mordekaiser tiró toda su armadura del pecho y de los brazos, dejando solamente los guantes, sus músculos eran muy grandes, y tenía tatuajes en sus brazos de lineas oscuras, que después nos dimos cuenta que eran runas mágicas; y en su pecho tenía grabado en la piel "Mordekaiser, el emperador de la oscuridad".