Trece

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—¿Esta moto es tuya? —él asiente con una sonrisa.

—así es, hace tiempo que no la utilizaba ¿te gusta? —asiento mirándola nuevamente.

—¿has venido a recoger a Rosé? —él niega en silencio sin quitar esa bonita sonrisa de su rostro delgado y blanco. Le echo una rápida mirada a sus labios finos y rosados para nada resecos y me llueven muchos pensamientos con esos labios pero los evito como puedo. No me dice nada y eso me desespera. —ten un buen viaje Jungkook —le deseo sarcástica, vuelvo a caminar pero me enseña mi mochila con todas mis pertenecías —¡mi mochila! —intento tomarla pero él la aleja; lo miro molesta.

—Sube —me ordena mirando hacia al frente.

—No voy a subirme —le aviso cruzándome de brazos, él suelta una carcajada odiosa pero siempre con su estilo tan... Idiota.

—¿Quieres que tire tus cosas a el río Han? —sin protestar me siento detrás de él con mis piernas a los lados; me pasa un casco negro, sin dudarlo me lo pongo en silencio, estamos muy cerca y eso me pone nerviosa. Me sujeto de su chaqueta de cuero negra fuertemente para no caer —¿sabes que cuando parta vas a ser la primera en morir? Como las motocicletas no tienen cinturones ni nada, es mejor que estemos muy juntos. —me toma las manos y las enreda en su cintura fuertemente, es incomodo y no me gusta... —así ¿entiendes? —asiento tímidamente. —cuando parta no hay vuelta atrás tn_____ —apenas escucho eso arranca aceleradamente. Me aferro hacia él abrazándolo mucho más fuerte, apoyo mi cabeza en su espalda asustada. Mi adrenalina sube y baja como una montaña rusa, siento como si estuviera volando y no es un sentimiento para nada desagradable.

—Jungkook... —susurro cuando ha parado en un semáforo.

—¿si, tn____? —me cede amable, apenas podemos escucharnos por culpa de los cascos que nos impiden mucho.

—Eres un jodido hijo de... —arranca nuevamente impidiéndome hablar. Estoy tan molesta que incluso podría asfixiarlo.

En todo el viaje estoy en silencio deseando llegar a casa luego. Cuando llegamos aún sigo aferrada a su espalda.

—Ya puedes bajarte si quieres —me alenta. Sin pensarlo dos veces quito mis manos de su cintura y me bajo de la motocicleta. Le devuelvo el casco de mala manera. —¿ahora ya me perdonas? Te he llevado en mi moto en la cual nadie sube a no ser que sea yo, he ido a buscar tus cosas y te he traído a casa sana y salva ¡además...! Olvídalo —niega bajándose del vehículo.

—te perdono, pero preferiría no dirigirnos la palabra, solo lo necesario —le propongo dándome la vuelta para entrar a la casa.

—de acuerdo —asiente sin expresión alguna, yo tampoco puedo reaccionar de otra manera aun que me frustra un poco a veces. Entro a la casa junto a él en silencio, cuando cierro la puerta puedo escuchar como pisa los escalones brutalmente para llegar a su habitación, luego de los pasos hacia su habitación la puerta se cierra de un solo portazo. No tengo idea de lo que ha ocurrido pero sé que está molesto. Es tan temperamental, primero está odioso, luego amable y ahora está molesto otra vez, a veces siento que es peor que una mujer.

Voy a la cocina y me sirvo un poco de agua que hay en el refrigerador, me parece que papá no ha dejado ningún mensaje en el teléfono hoy, pero no me preocupo mucho, debe estarse divirtiendo en Osaka y me alegra que sea así ya que había estado trabajando demasiado, se merece un gran descanso, ya puedo cuidarme sola y él sabe que soy muy responsable con mis cosas aunque Jungkook me lo está arruinando por completo, es toda su culpa.

Suena el teléfono y lo contesto de inmediato al ver el numero de mi amiga EunBi.

—EunBi ¿cómo estás? ¿te encuentras mejor? —le pregunto pero ella no responde fácilmente.

—tn_____... estoy un poco mejor —susurra mientras sorba por la nariz.

—¿Quieres que vaya a tu casa ahora? Tengo la tarde libre —le propongo alertada.

—No tn_____, no es necesario, muchas gracias por preocuparte por mí —susurra en un pequeño hilo de voz.

—soy tu amiga, voy a preocuparme siempre —le recuerdo con lástima, es terrible escucharla así.

—a veces pienso que eres demasiado buena, muchas gracias por ser mi amiga... —se queda en silencio unos segundos dudando si decirme algo —tn____ temo que no iré a clases por dos semanas, mi madre está muy mal por la muerte de mi abuelo y quiere que la acompañe ¿no te molestaría estar sin mí algunos días? —pregunta apenada

—No, no tranquila yo estoy bien, dile a tu madre que tiene todo mi apoyo —susurro sometiendo el dolor de EunBi en una guerra en mi cabeza, me duele que ella esté de esa manera.

—Sí, ella te aprecia mucho. Debo colgar, nos vemos tn_____ —no le respondo nada, solo cuelgo cuando ella lo hace. Eso me ha puesto mal, sinceramente es horrible que se muera alguien especial y único, el abuelo de EunBi era un anciano muy formal y de un tierno carácter que amaba leer cuentos a niños en jardines u hospitales, tenia un gran corazón que de seguro sanaba a cualquiera de tan solo escuchar sus latidos, sin embargo, éstos dejaron de sonar por la madrugada, sé que no debería meterme mucho en asuntos como esos ya que son muy delicados y difíciles de sanar; creo que es mejor dejarlos sanar en silencio, sin hacer nada más que pensar, pensar en cosas que te hagan feliz. Como lo hice yo...

{...}

Me despierto lentamente y con pereza. Mi cuerpo se siente pesado, no puedo moverme mucho estoy algo inmóvil y eso me aterra... No me digas por favor que es otra parálisis del sueño por favor. Abro los ojos como plato al ver al idiota más insoportable del mundo durmiendo junto a mí, sin camiseta, solo con unos pantalones sueltos a la cadera, no por favor... Esto debe ser una pesadilla, ¿no pasó nada entre Jungkook y yo anoche?

I'm Bad | JJK©Where stories live. Discover now