Cliché (COMPLETO) » En edición

41. Bolas no ubres

Bien, pero ¿por qué está llorando?

"Claro ... sí, sobre uh, Bessa, sobre eso. Realmente no me... importa." Niall expiró, frotándose la nuca con torpeza mientras los ojos de Bessa se ensanchaban ante sus palabras, a la vez que él se encogía de hombros.

"¿¡Qué!?" Ella espetó, haciendo que Harry tirara por el dobladillo de mi chaqueta por detrás, liderando la salida mientras todos nosotros retrocedíamos lentamente lejos de ella, como si fuera una especie de bomba a punto de explotar.

"Mira, Bessa, realmente no puedo seguir haciendo esto, te mentí de nuevo, ni siquiera voy a esa universidad, no soy un chico malo, en realidad estoy trabajando como maestro". Niall confesó con un suspiro un poco impaciente, desabrochando sus aretes y los piercings de la nariz y los labios mientras Holly observaba sin emoción en su rostro, a la vez que Bessa jadeaba en estado de shock.

"Estos son falsos, los conseguí en Claire's*. Los tatuajes también." Él admitió sin ningún indicio de vergüenza en su voz, su acento irlandés acentuado, a la vez que él le daba un guiño infantil y sonreía.

"Sí, me tomó horas copiar esos falsos tatuajes." Holly habló, su voz monótona y su rostro en blanco mientras sacaba su bolso, abriéndolo para revelar aún más tatuajes falsos dentro.

"LMAO, todo el mundo sea falso como la mierda." Carlos parloteó desde un lado, su atención inmediatamente fue atrapada por una curvilínea y alta rubia que pasó junto a él, haciéndole sonreír.

"Aye, ¡excepto yo Mami!, yo soy completamente real, ¡no hay silicona en este trasero!" Él la llamó, siguiendo a la pobre muchacha mientras silbaba.

"¿Hablas en serio? dijiste que eras una estudiante universitaria ¡me lo dijiste!, ¿y qué hay de nosotros?" Bessa gritó de repente con frustración hacia Niall, tirando de las raíces de su cabello rubio llena de cólera mientras Harry y yo intercambiábamos miradas.

"¿Qué? Está bien, nos conocimos en Halloween ¿recuerdas? Todos los piercings y tatuajes eran sólo un disfraz. Dormimos juntos una noche y tú sólo... te obsesionaste. Sólo estuve contigo por tanto tiempo, ya que Harry me convenció de quedarme contigo para que no pudieras volver a él." Niall explicó, dejando escapar una risa incómoda mientras el rostro de Bessa se tornaba rojo.

"Ha, qué bien lo hiciste tarado." Resoplé para que sólo Harry oyera mientras le golpeaba en la cabeza.

"Tía." Harry gruñó, apartando mi mano.

"¡Dijiste que eras un chico malo! ¡dijiste que te gustaban las chicas buenas!" Bessa gritó, apuntando con un dedo acusador hacia él con irritación y sintiéndose traicionada.

"No. Sólo es un profesor de inglés de veintitrés años que gusta de tener relaciones sexuales con fetos en faldas muy ajustadas de colegialas..."

Niall rápidamente colocó su gran mano sobre la boca de Holly, quien ni siquiera parpadeó ante su accionar, sin inmutarse, todavía pareciendo aburrida e impasible al igual que su voz cuando Niall tragó.

"Bien, Holly, eso es suficiente." Él siseó en su oído con una sonrisa nerviosa, aclarándose la garganta antes de dejarla ir y ella sólo parpadeara en respuesta, su cara todavía sin emoción.

"Sólo una pregunta, pero ... ¿por qué no has golpeado a Bessa todavía?" Harry interrogó mientras observábamos a Niall y Bessa continuar discutiendo, a la vez que Holly empezaba a hablar por teléfono.

"Bueno, después de golpear salvajemente a Kathy ... ya sabes, estoy tratando de ir por el camino del señor." Le murmuré, haciendo que Holly levantara la mirada, con una expresión vacía en su rostro mientras sus ojos oscuros se relacionaban con los míos ante mis palabras.