Capitulo 24

3.5K 252 0
                                    

El negó con la cabeza.
-Llévenselo a una celda individual, está demasiado joven como para meterlo con los grandes.
-Gracias sargento, es usted muy considerado.
-No me subestimes jovencito-me aclaró-Ahora llévenselo.
Me empujaron un poco hasta tirarme dentro de una celda que contenía una cama y a un lado un baño. Mire a mi alrededor y maldije por lo bajo, otra vez caí en este agujero y esta vez necesitaba de un milagro para poder salir de aquí. Me senté en la cama y traté de calmarme, poniéndome como loco no voy a lograr nada. Las horas comenzaron a pasar y se me hacían interminables. Me puse a pensar cuantos años podría llegar a pasar en un lugar como este y juro que llegue a desesperarme.
-Vélez, tienes visitas-me dijeron. Levanté la cabeza y vi como mis dos amigos se acercaban.
-¿Que hiciste Christohper?-preguntó Zabdiel.
-Tenía que hacerlo-le dije.
-Pero, ¿acaso no te pusiste a pensar en las consecuencias?-dijo Richard. Los miré.
-¡No, maldita sea!-rugi y me puse de pie-¡Ese maldito infeliz me buscó y me encontró!.
-Ese no es el problema ahora Christohper-me dijo Zabdiel-El problema ahora es que tendrás un juicio y una sentencia. Erick, puede hundirte.
-Pues que lo haga, no me interesa.
-Ambos sabemos que si te importa Christohper-dijo.
-Si, tienes razón-dije soltando un suspiro.
-Nosotros hacemos todo lo que podemos, no estás solo en esto. Debo decirte que tu prima está como loca buscando un buen abogado, la condenada de verdad te quiere-me contó Richard.
-¿Mi prima? y yo que quería devolverla por donde vino-dije nostálgico.
-Y la otra que está trepando las paredes es ______-dijo Zabdiel.
-¿______?-pregunté.
-Si-asintió Richard-Le dijeron que habías golpeado a Erick, que el estaba en el hospital y que tu estabas preso y lo primero que hizo fue preguntar por ti.
-Mi ______-musité.
Era por ella que yo estaba aquí adentro pero juro que no estaba arrepentido y juro que todas las cosas que le dije a Erick fueron cosas que me salieron del alma, cosas que deseó, cosas que imagino. ______ Brooks está metida en mi cabeza de una forma que no puedo describir. La noche se me pasó lenta en aquel lugar, no puede dormir pensando en todo lo que podía pasar si no salía de aquí. De verdad tuve que haberme controlado pero el me sacó de quicio. Además, ¿como logró saber todo eso?, alguien estuvo hablándole de mi vida. Al día siguiente los guardias me dieron de desayunar y me dieron la noticia de que tenía una vista. Vi como ella entraba con cuidado y con algo de asco miraba a su alrededor.
-¿Ana? ¿Que haces aquí?-le pregunté. Ella se acercó más a la celda.
-No sabes lo preocupada que he estado por ti-me dijo ella.
-No hacia falta que vinieras Ana-dije mientras me ponía de pie.
-A pesar de que quieres darme celos con la odiosa de Brooks, yo estoy aquí. Y hablando de ella, ¿donde está? ¿no era que tenían algo?.
-Si, si lo tienen teñida-escuché la voz de Angie. Ambos nos giramos a verla, no estaba sola, ______ venía a su lado-Vamos Ana, ellos tienen que hablar de sus cosas...o hacer cosas, ¿me entiendes verdad?.
-No vas a pedirme que me vaya por ella, ¿verdad?-me preguntó la rubia. Mire a ______ y a Angie, luego volví mi vista a Ana.
-Va a ser mejor que te vayas Ana, esté no es lugar para ti-le dije lo más amable que puede.
-Eres un mal agradecido-me dijo indignada y comenzó a caminar.
-Si, si lo es-le dijo Angie mientras caminaba detrás de ella. Fije mi vista en ______ y ella se acercó un poco más.
-Solo vine a decirte que ya tenemos la forma de sacarte de aquí-me habló distante.
-¿Estás segura o también viniste a la vista higiénica?, ya me toca.
-Ni siquiera cuando estás apunto de terminar preso por unos cuantos años dejas de ser idiota, ¿verdad?.
-Se que te preocupaste más por mi que por Erick-le dije serio.
-No vine a hacer sociales contigo-sentenció. Al parecer de verdad estaba enojada-Para eso tienes a otras. Solo vine a decirte que esta tarde será tu juicio y que declararé a tu favor, lo único que tienes que hacer es guardar silencio y confirmar todo lo que yo diga-comenzó a caminar, entonces me acerqué más a los barrotes.
-¿Por que lo haces?-le pregunté y ella se giró a verme.
-Por tu prima-me respondió.
-¿Estás completamente segura de eso?-le dije y me miró bien-Por favor, acércate-le pedi. Me miró con duda y se acercó, con cuidado tomé sus manos, ella miró la unión de ellas y luego volvió la vista a mi-Muchas gracias.
-¿Por que?-me preguntó.
-Por querer ayudarme-respondi-Aunque sea por mi prima.
-Yo sé lo mucho que ella te quiere-dijo sin mirarme a los ojos. Entonces con cuidado solté sus manos para tomar su rostro, ella me miró algo sorprendida-¿Que haces?-preguntó nerviosa.
-Shhh-le dije y despacio la acerqué más al pequeño espacio que había entre los barrotes, acaricié su mejilla-Déjame besarte-le rogué en un susurro.
-No-negó efusivamente mientras ponía las manos sobre las mías e intentaba alejarse.
-Por favor ______, déjame hacerlo, te lo estoy rogando. Además es mi manera de pagarte lo que estás haciendo por mi-dije mientras mi mirada estaba clavada en sus ojos.
-Yo no quiero nada de ti-aseguró.
-______, ¿por qué me haces esto?.
-Yo no te hago nada Christohper, tú eres el que hace mal las cosas-dijo.
-Por favor, déjame hacerlo. Lo necesito-le pedi. Ella volvió a negarse pero no se alejó, sus manos apretaron un poco más las mías, las cuales estaban sujetando su bello rostro-Cierra los ojos.
-No. Tu cierra los ojos-dijo.
-Siempre lo hago cuando te beso-le confesé y sonrei levemente para luego acercarme más al tiempo que mis ojos se cerraban. No iba a ser violento ni pasional en este beso, quería ser...¿tierno?. Rocé sus suaves labios con cuidado, separándolos un poco.
-Creo que ayer fuiste muy claro cuando me dijiste que yo te hacia más mal que bien. Bueno, lo entendí, me quedo claro. Yo quise establecer una relación amistosa pero al parecer eso no cuadra contigo y bueno, si así lo quieres, asi sera-se alejó de mí agarre y yo la mire algo sorprendido-Tú ahi y yo aquí.
-______...
-Ya me cansé de intentarlo Christohper, eres...tan cínico, no lo comprendes. Yo no soy como Ana Mana y además pienso que acostarse con alguien que apenas conoces es... aborrecible.
-¿Y si me conocieras más?-le pregunté.
-Tampoco-me dijo. Suspiré levemente.
-Entonces, ¿así son las cosas?-dije.
-¿Que te parece si lo discutimos cuando salgas?-preguntó.
-¿Por que no ahora?.
-Porque no se me da la gana y no puedes hacer nada al respecto. Estás encerrado-me guiño un ojo y comenzó a caminar para alejarse.
-Loco, ¿sabes? ¡QUIERES VOLVERME LOCO!-le grité bien fuerte para que me escuchara, suspiré y me acosté en aquella pequeña cama. Escuché que alguien corría hacia mi celda, levanté la cabeza y la mire.
-Lo siento, se me olvidó-dijo. Una caja cayó sobre mi cuerpo, la tomé, eran unos cigarrillos, volvi mi vista a ella y me sonrío levemente-Solo fuma si ya has desayunado. Ahora sí, adiós-se despidió y se fue.
Me senté en la cama y mire la caja entre mis manos. No la comprendo, ¡me es imposible!, si ella solo fuera un poco más clara conmigo, yo no estaría tan confundido. Las horas comenzaron a pasar, hasta que uno de los guardias entró y me dio un traje que me había mandado mi prima. Faltaba media hora para que el juicio comenzará, me cambie y me senté a esperar a que vinieran por mi.
-Vamos Vélez, ya es hora-me habló el sargento. Me puse de pie y abrieron la celda.
-¿Cree que salga sargento?-le pregunté. El sonrío por lo bajo y me hizo caminar un poco más para entrar a una oficina.
-Pues lo veo un poco difícil hijo pero nada es imposible.
-Cualquier cosas, si llego a quedarme, le aseguro que vamos a llevarnos bien-dije algo divertido.
-Ya lo creo Vélez, ya lo creo-palmeó mi hombro.
Me pusieron las esposas, como si fuera un criminal de primera clase. Esté país siempre está al revés, los verdaderos maleantes andan sueltos mientras que la gente honesta y buena se pudre dentro de estás carceles. De verdad deseo con todo mi corazón salir de esto y juro que voy a comportarme, juro que no volveré a ser impulsivo. Comenzaron a caminar conmigo y más rápido de lo que pensé llegamos al juzgado, una puerta de madera se abrió y me empujaron levemente para que entrara. Todo el mundo se puso de pie, ya que el juez a cargo de la causa entraba por la otra puerta. Divisé a mi prima y a ______ sentadas al lado de Mike, mi abogado, mi fiel abogado, quizás mi padre se haya apiadado y lo haya contactado. Del otro lado divisé a Erick sentado al lado de su abogado, sonrei para mis adentros al ver el estado en el que estaba. La felicidad que recorrió mi cuerpo fue muy gratificante, eso significaba que yo no había pasado una noche dentro de esta cárcel en vano. Sentados detrás estaban Zabdiel y Richard, los miré a ambos y los dos sonrieron contentos, algo me decía que yo ya estaba salvando.
-Comencemos-dijo el juez. Me sentaron al lado de mi abogado y al instante mi prima me abrazo, no pude devolverle el gesto pues tenía las esposas en las manos.
-El acusado, es el señor Christohper Bryant Vélez Muñoz de 19 años de edad por atentado físico al señor Erick Brian Colón Arista, que es el demandante. Pido a los abogados que se acerquen al estrado-nuestros abogados se levantaron y se saludaron con un apretón de manos, volvieron su vista al juez, dijeron algo en voz baja y Mike se volvió a sentar. Me quitaron las esposas.
-¿Crees que salga?-le pregunté en voz baja.
-Si creen todo lo que dirá la señorita Brooks, lo más probable es que si-me contestó.
-¿Y que es lo que va a decir?-pregunté intrigado.
-Ya lo veraz-dijo Mike con una leve sonrisa. Giré mi cabeza para mirar a ______, su mirada se cruzó con la mia pero al instante la apartó. Ella no solo es mi perdición, sino que ahora también le voy a deber la libertad. ¡Esto es increíble!.
-Llamó a declarar al señor Erick Brian Colón-habló su abogado, este se puso de pie y con poco rango se acercó al estrado, se sentó y un hombre con un libro se acercó a el.
-Jura decir la verdad y nada más que la verdad-dijo el hombre.
-Si, lo juro-dijo Erick y apoyó la mano sobre el libro.
-Señor Colón, ¿hace cuanto que conoce al señor Vélez?-le preguntó.
-De nombre hará un año-dijo el y me miró-Así como persona, un mes aproximadamente.
-¿Tenían una buena relación?.
-Ni buena ni mala, apenas trataba con el.
-Mal nacido-musité.
-¿Que pasó ayer por la tarde?-le preguntó su abogado.
-Yo estaba caminando por el jardín de la universidad, entonces divisé a Christohper, me acerqué a el y lo salude amablemente-dijo-Entonces comenzó a insultarme, a decirme cosas sobre...-se detuvo y miró a ______-No importa...y luego me golpeó.
-¡Eso no fue así, infeliz!-rugí poniéndome de pie.
-Señor Vélez, le voy a pedir que guarde silencio-me dijo el juez. Soltando un gruñido me senté en mi lugar.
-¿Entonces usted asegura que el señor Vélez lo atacó sin motivo alguno?-le preguntó el abogado.
-Sin ningún motivo-aseguró el desgraciado.

My Little Obsession >Christopher Vélez y tú< (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora