Llegó el momento en que Pablo y Sergio tenían que juntarse, Sergio ya estaba ahí y Pablo entró tratando de aguantar las ganas de matarlo, Marizza estaba haciendo la otra parte del plan y Sofía espiando a Pablo, aunque en ese momento se centró en otra cosa, Gabriel y Raquel estaban ahí mismo, en otra mesa y ella no paraba de mirarlos, nunca se imaginó que después de que él le dijo a ella que le gustaba ya estuviera con otra, estaba tan atenta a ellos 2 que por un momento se olvidó a lo que había ido. Mientras en la otra mesa…
Sergio: Está de más decirte que me alegro mucho de que hayas recapacitado
Pablo: Sí, vos tenías razón, finalmente lo hice
Sergio: Qué tenés pensado?
Pablo: Bueno… (En ese momento llegó Marizza con unos policías, ella al ver a su hija le indicó a los hombres donde estaba Sergio y ella se quedó con Sofía, Pablo también la vio y sintió muchas cosas, quería abrazarla, llenarle la cara de besos, se moría por decirle que a pesar de no haberla criado y conocerla hace tan poco ya la amaba pero no podía, además en ese momento su objetivo era Sergio)
Marizza: Qué hacés acá?
Sofía: Eh…
Marizza: Después vamos hablar de esto en casa, mi auto está por allá, andá, y no me discutas (Sofía quería seguir viendo a Gabriel pero por otro lado le había dolido tanto que prefirió hacerle caso a su madre). Muy bien Sergio, por fin nos vemos las caras
Sergio: Qué es esto? Una trampa? (Dijo mientras lo esposaba)
Pablo: Qué creés vos?
Marizza: Averigüé y eras prófugo, de verdad creías que me iba a quedar de brazos cruzados después de lo que le hiciste a mi hija?
Sergio: SOS UN ESTÚPIDO PABLO!! OTRA VEZ VOLVISTE A CAER POR CULPA DE ESTA TIRA BOMBAS!! PERO SE VAN ARREPENTIR, ME VOY A VENGAR!! (Se lo llevaron. Marizza y Pablo se miraron y abrazaron felices, luego de soltarse se quedaron muy cerca)
Pablo: Lo hicimos
Marizza: Sí
Pablo: Bueno… mi viejo ya no está para jodernos la vida
Marizza: Por fin
Pablo: Bueno… ahora podrías volver a…
Marizza: No Pablo, no es tan fácil, no puedo dejar a Esteban tan fácil. Tengo hijas con él, no las puedo alejar de su padre
Pablo: Pero no te he dicho eso, me refería a que podrías volver por lo menos a visitar a tu familia… unos días aunque sea, no?
Marizza: Bueno… sí, no había pensado en eso, mis hijas conocerían a mi vieja, volvería a verlos a todos
Pablo: Andate conmigo
Marizza: Qué?
Pablo: Digo… que yo te llevo
Marizza: Tengo que pensarlo, tengo que pensar qué les voy a decir a todos, no va a ser fácil
Pablo: Te entiendo
Marizza: Me voy
Pablo: Vi que estaba Sofía, puedo ir a verla? Con alguna excusa voy y…
Marizza: Sí, pero no ahora, no creo que sea bueno (Pablo asintió un poco triste y Marizza se fue)
En la otra mesa – Gabriel y Raquel también habían estado observando todo pero ella se estaba aburriendo de que él ni la mirara
Raquel: Gabriel qué te pasa? Yo estoy acá, no allá
Gabriel: Sí… perdón
Raquel: Está un poco aburrido esto, por qué no vamos a otro lado (Sonrió coqueta y muy sexy)
Gabriel: Bueno vamos (Ella le dio la mano y se fueron)
En Argentina eran solo las 5 de la tarde por lo que Mia estaba en casa de Sonia y su dary contándole las novedades de la adopción
Mia: Y eso… estoy feliz
Franco: Yo me alegro mucho por vos mi amor, te merecés toda la felicidad del mundo (Mia recordó a Manuel, él era su felicidad… o parte de ella)
Sonia: (Llorando de emoción) Ay Miita!! Que felicidad
Mia: Ay bueno pero todavía no es seguro, falta que se confirme aún, además de un montón de papeles (Sin embargo Sonia la notó extraña)
Sonia: Eh… Franco podrías dejarnos solas un momento por favor?
Franco: Pero… (Sonia le hiso una seña y él se fue)
Mia: Qué pasa?
Sonia: Eso quisiera saber yo, qué te pasa?
Mia: Nada, por?
Sonia: A mí no me tenés que mentir, te conozco y mirada me dice algo
Mia: Bueno está bien, te lo voy a contar porque confío en vos y porque ya no doy más, necesito decírselo a alguien o voy a reventar, pero vos no se lo podés contar a nadie, ok? (Sonia asintió y Mia respiró profundo). Estuve con otro hombre
Sonia: Qué?
Mia: Es que… no sé que me pasó, perdí el control y…
Sonia: Y por cosas de la vida… ese otro hombre no será Manuel?
Mia: Cómo sabés?
Sonia: Porque te conozco, vos nos de andar engañando, sé que si lo hiciste tiene que haber sido por alguien que realmente quieres o quisiste
Mia: Bueno, tenés razón, fue con él. Sonia yo te juro que quiero a Felipe…
Sonia: Si lo sé, eso no me lo tenés que decir, yo sé que lo quieres porque él te ayudó a sanar la herida que tenías cuando terminaste con Manuel, pero no lo amas, o me equivoco?
Mia: No lo sé, estoy confundida
En España
Marizza y Sofía llegaban a su casa, esta última había estado en silencio todo el camino y era algo muy extraño
Marizza: Ahora vamos hablar
Sofía: No tengo ganas, quiero dormir
Marizza: Vos no te moves de acá
Sofía: Qué quieres? Regañarme por haberlos espiado?
Marizza: No, pero quiero saber porque lo hiciste
Sofía: Porque no soy tonta, sabía que algo me ocultaban, por qué no me dijiste que vos y Pablo tuvieron algo? O tienen…
Marizza: Yo no tengo nada con él, pero… tuvimos
Sofía: Y por qué me mentiste?
Marizza: Porque es… pasaron muchas cosas muy doloras, y no quería recordarlas, perdoname
Sofía: Bueno sabes qué? Yo tampoco tengo ganas de pelear
Marizza: Te pasó algo más? (Ella asintió con la cabeza) Qué cosa?
Sofía: El chico… el chico que te dije que me gustaba estaba con otra en el restaurante… eso era lo que quería seguir viendo y vos no me dejaste
Marizza: Bueno… perdoname, yo no sabía
Sofía: No importa, si los seguía viendo hubiese sido por puro masoquismo, mejor así
Marizza: Bueno pero… si él no te quiere es un tarado, lo sabés verdad?
Sofía: Es que… no es tan así, pero mejor no quiero hablar, sí? Adiós (Y se fue)
Marizza se fue a dormir, a su lado estaba Esteban durmiendo, ella lo miró, no sabía qué hacer, podía hacer lo que le dijo Pablo, solo ir por unos días a Argentina, pero sabía que si hacía eso después no iba a hacerle tan fácil volver y no podía dejar a sus hijas sin su padre, tampoco sabía que explicación iba a dar…
Por otro lado Mia regresaba a su casa después de hablar con Sonia, y estaba pensando seriamente en una cosa… dejar a Felipe, quería estar con Manuel pero no todo iba a ser tan fácil, él iba a tener un hijo, además sabía que si se separaba lo más probable es que no le dieran la adopción, pero por otro lado con Manuel podría tener hijos propios, pero... ¿Qué haría finalmente? Tenía que pensarlo mucho, no quería hacer sufrir a Felipe, ella lo quería muchísimo, pero él se merecía estar con alguien que lo amara de verdad
Y por otro lado estaba Pablo, estaba feliz, nunca se imaginó que un simple viaje para acompañar a su amigo se convirtiera en todo esto, se reencontró con Marizza, además tenía una hija, su padre estaba pagando, aunque las cosas no sean perfectas, la mujer de su vida estaba casada y su hija… creía que otro era su padre, pero aún así no podía evitar estar feliz.
Al día siguiente Marizza se despertó muy temprano y llamó a Sonia, aunque le costó un poco lo logró
Sonia: Mi ciela, sos vos? (Dijo en voz baja para que no la oyera)
Marizza: Sí
Sonia: Es raro que llames, tenés algún problema?
Marizza: No, solo te llamo para avisarte que en unos días voy a Buenos Aires por un tiempo, aprovechando que mis hijas salen de vacaciones
Sonia: QUÉ? CÓMO QUE VENIS?
Marizza: Te podés callar que te van a oir? Después te explico todo, nadie más lo puede saber hasta que yo llegue, ok?
Sonia: Ay mi ciela que felicidad, te extraño tanto. Qué explicación vas a dar?
Marizza: No lo sé, aún no lo sé
