Parte 2:

575 42 10
                                    

Una agradable sorpresa, tal vez no tanto.

Jungkook entró a uno de los dos pequeños departamentos que su compañera tenía en alquiler, la parte de enfrente contaba con una enorme ventana rectangular con un marco de madera, el patio era grande con algunas descuidadas plantas de ornato dispersas por allí, al entrar se dio cuenta de que el departamento estaba bien distribuido y seguramente a su amigo le agradaría eso, todo el espacio era abierto no había divisiones solo el baño y el pequeño patio de servicio en la parte de atrás, había algunos muebles, un librero, una pequeña mesa de centro con mosaicos incrustados y el enorme sillón al pie de la gran ventana.
—A mi me agrada, te daré el deposito y un mes por adelantado, además de que esta cerca de la escuela— le dijo al par de chicas que se reían con nerviosismo por su causa. Él trataba de actuar normal pero debía aceptar que lo estaban avergonzando— ¿te parece bien?
—Cla-claro, pero hay ciertas reglas— contesto Isabella al chico.
—¿de verdad? ¿cuales?— pregunto intrigado.
—Pues, son sencillas reglas para conservar la buena convivencia.
—Claro.
—, primero que nada, esta prohibido traer chicas a la casa— Jungkook la miraba atento— no se permiten fiestas escandalosas, y no se pueden hacer remodelaciones en la habitación.
Todo debe permanecer igual.

Kook asintió, definitivamente eso de no llevar chicas a casa a Tae le valdría un comino y lo de las fiestas ruidosas... Al pensarlo ladeó un poco la cabeza, sera difícil.
—Muy bien, creo que no habrá problema — y, si lo abría eso Tae y ella tendría que arreglarlo— mañana mismo iniciaremos la mudanza.
Al decir esto, Kook y las dos chicas se dirigieron a la planta baja donde Isabella vivía, no conocía muy bien la historia de su compañera pero sabia que su padre había fallecido dejándola sola y arrendaba el piso superior para solventar los gastos de la universidad.
Isabella le hizo un recibo por la cantidad de dinero que le había dado y le dio un contrato, el que le daría a Tae para que lo leyera y firmara.

Cuando Kook se fue de la casa no dejaba de sonreír, ese par de chicas si que eran extrañas, definitivamente no actuaban de acuerdo a su edad.

****

—¿Como es que lo trajiste aquí?— preguntaba Isabella a su amiga dándole un manotazo.
—Pues entró al salón y vino directo hacia mi, casi me desmayo de la emoción y los nervios, y cuando preguntó por ti, pues bueno que te puedo decir, me calme un poco, me pidió traerlo aquí después de clases por que necesitaba una habitación y así fue.
—Oooh, ¿para que querría él una habitación? Es extraño ¿no te parece?— Gabriela había ido hasta la cocina y mordía una manzana en ese momento.
—Un poco, si. ¿Por eso te inventaste lo de las reglas, no es así?— le dijo mascando la fruta.
—Si, para ver si desistía pero no lo hizo.
—De todos modos mañana comenzara a mudarse.
Alguien llamo a la puerta. Era Jackson Wang el otro chico a quien le alquilaba la otra habitación, era alguien bastante amable y solidario, siempre que necesitaba hacer alguna reparación en la casa él le ayudaba.
—¡Hola chicas!— saludo con su habitual alegría— ¿Ya han cenado? Por que les traje algo de cenar— al decir esto Jackson levanto en alto un paquete con pollo frito y un paquete con cervezas.

Gabriela se emociono.
—Nada mejor que el pollo frito acompañado con cerveza.

Siempre que cenaban con Jackson era como una pequeña fiesta, le agradaba Jackson era como un hermano mayor para ella, literalmente.

Algunas veces a Gaby se le olvidaba que era menor de edad y bebía de mas. Se quedo dormida en el sillón.
La noche era fresca, Jackson e Isabella fueron al piso de arriba.

"Nunca sola" †Terminada†Donde viven las historias. Descúbrelo ahora