-¡Alto!. -grito.

Los hermanos se dan vuelta y me miran frunciendo el ceño.

-Me acabas de decir ángel. -le digo a Alessio mirándolo.

Su cara se transforma. Se pone pálido.

-Solo James me decía así. -continúo.

Todos los que estaban abajo sentados en los sillones se callan al escucharme decir eso.

-James me contó que te decía así y me gustó porque a pesar de todo lo que haz hecho o en el puesto que estás ahora, tenes una cara de ángel. Tus ojos celestes cielo y tu pelo rubio. Sos un ángel, Adrienna. -dice Alessio sonriendo.

Me quedó mirándolo por unos segundos. Sonrío y asiento.

-Eso fue lo mismo que me dijo James cuándo le pregunté por qué. -digo. -A mi oficina, ahora.

Ordeno y doy media vuelta encaminándome hacia mi oficina. Abro la puerta y paso, me siento en mi silla y espero a los hermanos Gangardi.
Luego de algunos segundos ellos entran y se sientan en los sillones.

-¿Cómo es que sabes tanto de lo que me decía James?. -pregunto mirando fijo a Alessio.

-Éramos muy cercanos con nuestros primos, aunque no lo creas. -dice mirándome con una sonrisa.

Odio que me sonrían en momentos como estos.

-No, no lo creo porque ellos nunca me hablaron de ustedes, ni siquiera su propia familia.

Ellos se miran entre sí.

-El día de la reunión de toda la mafia a ustedes no los vi sentados en la mesa con sus parientes, ni siquiera los vi en otra. -continúo.

Me paro de mi silla y voy hacia dónde está el whisky, que tomaba James, con los vasos. Saco uno de los estantes y me sirvo de esa bebida alcohólica tan rica y fuerte.

-¿Quiénes son?. -pregunto dándome vuelta y viéndolos fijo.

-Somos los primos de Jason y James. -contesta Alessandro.

Tomo un sorbo de mi bebida sin dejar de mirarlos.

-Entonces, explíquenme, ¿por qué no estaban en la reunión con toda su familia? ¿por qué no los nombraron antes? ¿por qué no los conocía como conozco a los miembros de todas las familias que están bajo mi poder?.

Ellos fruncen el ceño.

-¿Cómo que bajo tu poder?. -pregunta Alessio.

Asiento.

-Todos los problemas que tenían sus primos los arreglé yo. Todos los que eran sus enemigos ahora son mis socios, hasta los rusos.

Sus bocas se abren por la sorpresa. Sonrío.

-Ahora, ¿me explican?.

Trato de sonar dulce, pero el enojo y la impaciencia me están matando.

-Porque nos odian. -dice Alessio.

-¿Por qué?. -pregunto.

-Porque nunca quisimos estar en la mafia. -dice Alessandro.

Asiento.
Nos quedamos en silencio. No les creo.

Alessandro suspira, rueda los ojos y dice:

-No podes desconfiar de todos, Adrienna.

Lo miro con el ceño fruncido.

-Desconfias de tus hermanos que son tu propia familia, de tus amigos, de nosotros, de nuestra familia. ¡De todos!. -dice mirándome fijo.

-Si puedo desconfiar de todos ellos porque les di toda mi confianza y la destruyeron ellos solos.

Lágrimas amenazan con salir y la ira va creciendo.

-¡Me destruyeron!. -grito. -¡Al igual que Jason y James!.

Ellos quedan petrificados en sus sillas y me quedan mirando con lágrimas en los ojos.

Perfecto.
Ruedo los ojos y suelto un suspiro. Doy media vuelta y me apoyo en el estante dándole la espalda a Alessio y Alessadro, tomo todo el whisky que quedaba en mi vaso de un solo trago.

-Estás mal, te destruyeron como vos dijiste, pero hay una razón y la tenes que entender cuando sea el momento. -escucho que dice Alessandro.

Me doy vuelta enfrentándolos todavía con el vaso en la mano.

-Y, ¿cuándo es el momento?. -pregunto. -¿Cuándo voy a saber el por qué?.

-Falta. -me contesta Alessio con una sonrisa.

Aprieto la mandíbula y tiro el vaso contra la pared haciendo que reviente y los pedazos caigan al piso.

-¡Estoy harta de escuchar siempre lo mismo!.

Ellos me quedan mirando con un poco de nostalgia en la mirada.

-¿Dónde quedó la Adrienna que nos contaban nuestros primos con fascinación?

La pregunta de Alessandro me deja desconcertada unos minutos.

-La Adrienna que sus primos les solían contar se murió el mismo día en el que supuestamente se murieron en el incendio. -contesto segura de mis palabras.

Ellos asienten.

-Va a volver. -dice Alessio seguro.

-Nosotros vamos a hacer que vuelva. -concreta su hermano.

Sonrío. Que tiernos.

-No lo creo muchachos, porque tengo a Jason y James al frente mío y lo único que quiero es arrancarles la cabeza.

Adrienna. ©   (2º libro) - Editando. Where stories live. Discover now