Vivir Contigo.

Capítulo 25

Stephania

Luego de tragarme mi orgullo tuve que idear un plan junto con Nick para que ese par se llevará bien, sé que es muy difícil que Julián la perdone pero lo que quiero es que  al menos  sean amigos y quizás en el futuro pueda pasar.

- ¿Y bueno cupido que quieres que hagamos? - decía sentado en el sillón.

- ¡No se, piensa! - dije confundida

- ¿A ver, quieres que te ayude pero aun no sabes que vas hacer?- pregunto sarcásticamente.

- ¡No me confundas más, tu debes saber que podemos hacer, él es tu amigo! - grité

- ¡Teff calmate, mejor déjalo ahí, puede que empeores las cosas! - me advirtió, sabia que Nick podria tener razón, pero tenia que arreglar eso de alguna u otra forma.

- Nicki estas para ayudarme, no para juzgarme asi que si utilizas eso que tienes en la cabeza todo seria más rápido - dije tomando un cuaderno en mi mano.

Estuvimos toda la tarde ideando un plan, todo muy bien hasta que mi querida prima se entrometio, se me hacia raro que no lo hiciera, siempre lo hacia.

- ¿Qué hacen? - dijo sentándose junto a Nick.

- Estamos ..... - lo interrumpí

- ¡Nada ya terminamos! ¡Ya sabes que hacer, trata de convencerlo! - dije secamente

- Esta bien.

Ellos dos se quedaron solos en la sala, no voy a negar que tenia ganas de arruinarle la tarde pero ahora lo importante era Lu.

A la mañana siguiente llame a Lu para invitarla a una pequeña casa que tenía papá a fueras de la ciudad para pasar un bonito día de campo.

*No Tef no tengo ganas!

* Vamos! Eso te distraerá

*Esta bien, pero solo un rato recuerda que mañana hay clases.

Ella me recogió en su auto ya que ella si tenía y yo no, ya me había olvidado de lo bonito que era esa casa, ya era tiempo de disfrutarla.

Cuando llegamos lleve a Lu a un cuarto para que deje sus cosas .

- ¡Lu, ahora vengo voy a ver si todo esta en orden! - asintió

Salí de aquel cuarto y Nick me asustó ya que estaba detrás mio.

- ¡Eres un idiota casi me matas del susto!- dije molesta.

- ¡Asi tendrás la conciencia! - sonrió-  ¡Ya están en el cuarto los acabo de encerrar! - añadió, esto se pondría buenooooo, o al menos Lucia me mataría luego de todo.

- ¿Cómo están? - pregunté.

- ¡Están felices, el amor los invade!

- ¿Enserio? - pregunté confundida

- ¡Claro que no! Estan a punto de romper la puerta y amenazan con hacernos pagar esto - dijo tranquilamente.

Fuimos a otra habitación donde se podía ver lo que ocurría en la otra habitación.
De una u otra manera habíamos colocado cámaras, nosotros podíamos escucharlos y verlos pero ellos ni cuenta.

- ¿No crees que esto es invadir la privacidad? - dijo levantando una ceja.

- ¡Cállate! ¡Es solo para ver como va la situación! - traté de explicar todo de modo que mi plan no sonará tan obsesivo.

Y luego de estar luchando con la puerta, Julián se dio por vencido y pues Lucia estaba en una esquina pensando en como vengarse de mi.

***

-  ¿Ahora que hacemos? - preguntó Lu un poco avergonzada, esto se estaba poniendo cada vez mejor, todo saldria bien, me lo agradecerán.

- No sabia  que actuabas tan bien - soltó mirándola con odio.

-  Te equivocas no he planeado nada para encerrarte aquí, al igual que tu yo tampoco quería verte, esto debió ser idea de Stephania - explicó.

- No deberías mandar a tu amiga a hacer todo - Julian me empezaba a caer un poquito pesado, este hombre era más terco que Nicolás.

***

-  ¡¿Qué le pasa a ese idiota?! - grité.

- ¡Teff déjame escuchar! - me interrumpió moviendo su mano.

- ¡Y después yo soy la chismosa!

***

- ¿Esto tiene algún sentido? - preguntó Lu.

- ¡Quieren que lleguemos a algo! - dijo secamente

- ¿Y no podemos hablar? - volvió a pregunto Lu, mi amiga ponía todo de su parte, pero el muy imbécil no ayudaba ni un poquito.

- ¡¿De que quieres hablar?! Me engañaste, eso lo sabemos todos- gritó

- Te entiendo, lo que hice no estuvo bien, yo no quise ilusionarte. Sí ,me hice pasar por alguien que no era porque yo no soy la típica deportista ni talentosa, solo quería tener amigos y creó que eso no tiene nada de malo.
Y no mande a Tef, ella se ofreció a ir porque yo no tenía el valor de decirte la verdad, sabia que no te gustaría descubrir que la persona que decías estar enamorado era alguien como yo. - decía con lágrimas en los ojos.

-No llores, no quise hacerte sentir mal - pronunciaba palabra mientras se acercaba a ella, cada vez esto se ponía interesante.

- ¿Seria mucho pedir ser  amigos? - pregunto Lu

- Voy a intentarlo , después de todo si no quedamos en algo, esos dos nós van a encerrar- sonrió.

De repente Nick y yo entramos a la habitación como si si estuviéramos en un reality show.

- ¡Ay que bonitooo! No me lo agradezcan - dije desbordando alegría.

- Nadie lo iba a hacer - mencionó Julián sarcásticamente.

- ¡ja! - dije

- ¡Bueno vámonos ya es tarde! - añadió Nick.

- ¡Aun no! ¡Vamos a divertirnos! - di saltitos de felicidad.

- ¡No Tef , enserio vámonos!

Julián y Lucia se fueron en su auto y yo como siempre me fui con Nick, en el camino estuvimos bromeando sobre todo lo que hicimos, parecía que nós conociéramos de años, llegamos a la casa, Nick me dejo alli y se fue ya que iba a llevar su carro al taller.

Fui a mi habitación a darme un baño, cuando salí me encontré con el bello rostro operado de Fernanda.

- ¿Qué quieres? - pregunté molesta.

- ¡Cálmate histérica! Veo que llegaste con Nick ¿No me digas que ya te acostaste con él? - rió

- ¡Yo no soy como tu! Yo si me respeto, tranquila no te quitare a tu amor platónico - dije esbozando una sonrisa

- ¡Tu no le quitas nada a nadie! Eres una niña - dijo mirándome de pies a cabeza.

- ¡He besado más veces a Nick que tu! -   solté, creo que eso no era algo para poder alardear, aunque el hecho de molestarla me ponía de buen humor.

- Te crees mucho por haber logrado eso. Hagamos algo, demostremos quien es más mujer, veamos si puedes enamorar a Nicolas, si en menos de 3 meses lo logras te juro que no me vuelvo a meter en tu vida, pero con una condición : No Te Enamores.

- ¿Yo enamorarme de Nick? No me hagas reír, ya no soy una niña para esos jueguitos - dije acomodando mi almohada.

- ¿No lo puedes lograr, verdad? Tienes miedo - me retó

- No utilizaré a nadie, no se lo merece - dije molesta.

- ¡Awww la niña no le quiere hacer daño, que tierna! - se burló con ironia

- ¡No soy una niña! - bufé

- ¿Aceptas o no?- preguntó ansiosa, esto no terminaría bien, lo sé.