Capítulo 9

19K 1.2K 519
                                    




Camila's POV

A partir del desmayo que tuve y mi breve estancia en el hospital, Lauren se había convertido en mi puta sombra.

Se pasaba todo el tiempo posible pegada a mí cuando estábamos en la universidad. Exceptuando los periodos de clases, Lauren estaba conmigo a cada segundo, en cada paso. Al principio era difícil fingir que estábamos bien frente a todos después de la discusión que habíamos tenido, sobre todo esa que sucedió dentro de mi habitación del hospital. Pero con el pasar de los días, el tiempo que compartíamos en la universidad comportándonos como un par de chicas enamoradas se había convertido en una tregua para ambas.

Con eso, los rumores de que había algo mal en nuestra relación habían disminuido y me alegré por ello. Sobre todo cada vez que descubría a Sophie Miller intentando matarme con la mirada cada vez que Lauren me tomaba de la mano cuando andábamos por los pasillos del campus, usualmente para que ella me llevara a mi salón de clases al término de los almuerzos.

Los almuerzos... Ese era otro tema.

Con todo este asunto de la anemia Lauren estaba insoportable. Frente a todos era una novia jodidamente empalagosa que se encargaba de ir a la cafetería por mi comida y prácticamente dármela de comer en la boca. Todo el mundo se maravillaba con su gentileza y yo tenía que fingir que me gustaba cuando todo lo que quería hacer era vomitar en ese mismo instante. En primer lugar porque mi cuerpo realmente rechazaba todo alimento. Y en segundo porque no me quería tragar la actitud protectora de Lauren. ¿Qué esperaba? ¿Que después de todo lo que la había escuchado decirle a mi padre simplemente creyera que tenía buenas intenciones conmigo? ¡No soy estúpida!

Fuera de la universidad nuestras peleas continuaban. Quizás un poco peor que al principio.

Lauren ya no se detenía antes de decirme que era una niña tonta e inmadura y yo obviamente le respondía todos y cada uno de sus insultos. Jamás le permitiría hablarme de esa manera sin dejarla en su lugar. Al final siempre era yo quien la dejaba callada, aunque ya no con besos.

El beso que le había dado había sido... una completa estupidez. Fue contraproducente porque, aunque logré que se callara por unos segundos y dejara de decir cosas que en ese instante realmente me herían, ese beso me había provocado un extraño sentimiento de calor en todo el cuerpo.

Los labios de Lauren eran suaves y su lengua era dulce y húmeda. Odiaba admitirlo pero ella besaba demasiado bien. Cuando estábamos en la universidad y todo el mundo nos veía sólo nos dábamos besos simples y castos que no me movían ni un pelo, pero aquel primer beso que Lauren me robó, el que le di después de caerme de la barra en la fiesta de Dreavyn y el que estampé en sus labios durante nuestra discusión en el hospital eran cosa aparte.

Era como si continuáramos discutiendo en silencio, utilizando nuestras lenguas y dándonos mordidas en los labios y apretones con las manos. Sé que suena ridículo, pero es así. Era una forma mucho más placentera de discutir porque a pesar de estar besándonos siempre había una batalla constante para ver quién obtenía el control de la otra y joder, creo que siempre era un empate.

No sé cómo ella lo lograba pero me hacía desconectarme de todo. Me hacía desear más y el conocimiento de ese hecho era tortuoso para mí. Lauren me besaba con ansiedad y cuidado, con deseo y ternura. Con odio y... ¿Amor?

No. Eso no podía ser. De ninguna jodida manera.

Lauren y yo nos detestábamos. Éramos completamente opuestas y si estábamos metidas en esta situación fue por sus estupideces y por meterse en algo que no le concernía.

Además, Lauren continuaba con la farsa también por conveniencia. Sé perfectamente que ella teme perder su empleo si hace algo que realmente me haga enfadar o a mi padre. Prueba de ello es que haya estado a la mañana siguiente de la fiesta de Dreavyn en la mansión. Seguramente había ido a asegurarse de no haber perdido su estúpido empleo después de haberle gritado al grande y poderoso Alejandro Cabello.

Caminos - Camren (EN EDICIÓN)Where stories live. Discover now