Capítulo 38

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*Lauren pov*

—Cuídate mucho, por favor, recuerda abrigarte y si te sientes cansada o algo habla con Lauren, cariño. Yo hablé con ella…—Rodé los ojos dándome la vuelta mientras Camila escuchaba el sermón de su madre en medio del aeropuerto.

Recuerdo que hace tres días atrás cuando almorzamos con Sinu me había dado LA charla. Literalmente no se le olvidó nada, me tuvo dos horas sentada escuchándola. No la culpaba, bueno, Camila es su única hija y yo, de alguna forma, se la estaba robando por un tiempo. Tres semanas.
Tres hermosas semanas con el amor de mi vida.

—No ruedes los ojos porque tú también ya recibiste mi charla antes.—Mi madre me abrazó de la cintura apoyando su cabeza en mi hombro y la envolví con mis brazos.—Te voy a extrañar mucho, de verdad.

—Vamos, ma. Ya estoy grande, te dije que voy a llamarte cada día.—Me reí viendo a mi padre que simplemente negó sonriendo.

—Eso no tiene nada que ver, Michelle.—Se alejó negando y frunciendo el ceño luego de golpearme el brazo.—Eres mi hija y voy a extrañarte mucho igual.

—A ver si me puedo quedar a vivir allá.—Murmuré y me golpeó otra vez.—Ya. No puedo. ¿Quién me va a hacer la lasaña más rica del mundo?—La abracé otra vez riéndome.

—El otro día me dijiste que Camila cocinaba genial.—Rodó los ojos.

—Bueno, pero no le digas que prefiero tu lasaña.

Se rió y me dio un beso en la mejilla mientras escuchábamos que anunciaban nuestro vuelo.

—Clara, déjala. Va a llegar tarde.—Mi padre se rió.

—Pero es que… Bueno. Cuídate mucho y cuida de Camila.—Asentí con una sonrisa.

Camila volvió a mi lado, estaba sonriendo y no pude evitar sonreír yo también mientras la veía. Estaba tan hermosa y feliz, ella estaba feliz, más feliz de lo que yo estaba por nosotras.

—¿Te acuerdas de todo lo que te dijo tu madre?—Pregunté burlándome. Pasé un brazo por sus hombros mientras caminábamos con nuestras valijas luego de habernos despedido de nuestras familias.

—Luego del “Te voy a extrañar, cuídate mucho” no me acuerdo nada.—Se rió.—No quiero ser mala, pero ya necesito que seamos tú y yo.—Sonreí y le di un beso en la cabeza.

—Desde ahora somos tú y yo, bebé.

*

Camila se sentó del lado de la ventanilla y ya estaba acomodándose para dormir, teníamos unas largas horas de vuelo hasta la mañana siguiente cuando llegáramos a Barcelona. 

—¿Puedes cambiar la cara? Estamos yendo a Barcelona.—Me dio un leve empujón en el brazo y simplemente lo ignoré soltando un suspiro porque tenía razón.

No me podía pedir que estuviera feliz luego de ver como un tipo la miraba como si fuera un trozo de carne, cuando literalmente la miraba de una manera asquerosa estando yo a su lado tomándole la mano.

Estaba tan harta de tener que ver como algunos hombres miraban a una mujer como si fuera cualquier cosa, sin respeto alguno, sin un poco de discreción y mucho más cuando estaban con su pareja al lado, porque es seguro que no sólo me había pasado a mí de tener que ver aquello. Me sentía tan enojada, tan indignada y me quedé con las ganas de decirle varias cosas solo porque Camila me lo había pedido.
¿Es que no se daba cuenta de que estaba mal? Estaba muy mal que aquello pasara. Una mujer ya no puede vestirse bien, vestirse con ropa ajustada o al cuerpo porque ya es convertida en un objeto sexual para los hombres. Y no me refiero a todos, hablo de aquellos que son totalmente asquerosos y creen tener el derecho de ver así a una mujer, de hacerla sentir incómoda con sus miradas asquerosas, creen que está bien porque ellos son hombres y nosotras mujeres y no. No es así. Una mujer debería poder vestirse de la manera que quiera sin tener miedo de salir a calle por lo que le digan, por ser mirada de tal forma o tener que soportar que algún tipo le dijera cosas y también es injusto para los hombres que no son así, que respetan a las mujeres y son metidos en la misma bolsa, por así decirlo, sólo por ser del sexo masculino. Todo era una mierda y yo estaba a punto de explorar si no fuera porque ella estaba a mi lado y ahora se había apoyado contra mí para hacerme sentir mejor.

—Yo debería bajar del avión.—Murmuré molesta y Camila se alejó para verme.

—Ya está. No importa. No te enojes por eso. Mira, estamos por pasar las mejores semanas de nuestras vidas y estas así de molesta por un tipo idiota que no se llevó más que una mirada.

—Es que…—Respiré hondo negando.—Odio que alguien te vea así, como si fueras cualquier cosa. Me da asco que te miren de otra forma que no sea con respeto. Odio que pase esto. Estoy indignada, él se rió cuando me vio, Camila.

Sonrió soltando una pequeña risita y pegó sus labios en mi mejilla dándome muchos besos.

—Cada día te amo más, ¿sabes?—Me acarició la mejilla.—Tienes las mejillas sonrojadas.—Se volvió a reír.—Olvídalo.—Me dio un beso en los labios y luego en toda la cara solo para molestarme porque sabía que odiaba que me hiciera aquello.

—Bueno, déjame.—Fruncí las cejas suspirando.—¿Te parece bien que me moleste así?—Camila se alejó y miró hacia adelante en los demás asientos.

Había una chica, no era grande, quizás tendría unos dieciséis o diecisiete años, que nos había estado mirando todo el rato supongo porque la escena la divertía. Camila se rió y la saludó con la mano.

—Hola.—Dijo.—Me parece lindo que te molestes por eso.—Camila me miró sonriendo.—Hacen una linda pareja.

—Ya lo sabemos.—Sonreí cuando ella se rió.

—Es un poco adorable a veces, pero otras… ya ves.—Camila se encogió de hombros y la chica sonrió otra vez volviéndose a quien le hablara a su lado.

—Tienes que ser más humilde con las personas, un gracias hubiese estado bien, ¿Sabes?—Se acomodó mejor y levantó mi brazo para apoyarse en mí mientras yo la abrazaba.

—Bueno ya lo sé para la próxima.—Le di un beso en la cabeza.—¿No vas a ponerte música?

—Alcánzame los auriculares y mi iPod.

—Que molesta eres.—Suspiré buscando lo que quería en un bolso que Camila había puesto a su lado.—Toma. Duerme mucho, por favor.

Se rió poniéndose los auriculares y se acomodó para estar bien por un par de horas mientras me abrazaba por la cintura con ambos brazos.

*

*Camila pov*

Remove the chains {Camren}Where stories live. Discover now