Capítulo 27. - Miradas azucaradas.

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- Cállate de una jodida vez Daniela, o juro que te daré una patada tan fuerte, que llegarás a la esquina de la calle a tres hora de aquí. - Suelta Ana desesperada. 

- Una mejor amiga no diría algo como eso. - Me quejo limpiando mi pegajoso rostro. Ella hace un mohín. 

- No cariño, una amiga perra haría algo como abrazarte & decirte que va a cortarle las pelotas a ese idiota, es decir, claro que voy a cortarle las pelotas, pero vamos, deja de hacer un drama. Estoy segura de que te ama, & lo más probable es que no se vaya. 

- ES QUE QUIERO QUE SE VAYA. - Me quejo levantando los brazos al aire. - Me odiaría a mi misma si se queda solo por mi, no es justo. Está dentro del equipo en Nueva York, es su gran sueño. 

- Bueno, deja que se vaya & adopta 5 gatos, dos ranas & cuatro perros...o, ve al jodido aeropuerto mañana antes de que se vaya, para que puedas despedirte como se debe. - Me aconseja. - Igual voy a acompañarte, & después de patear tu trasero por idiota, iremos a comprar helados. - Me sonríe enviándome tranquilidad. 

Dejo escapar una sonrisa & abrazo a mi mejor amiga. Nico se ha tardado más de cuatro horas en llegar & eso me preocupa, porque puede que haya muerto o que esté perdido, lo que es muy estúpido, porque, vamos, ¿cómo diablos se pierde Nico viniendo a mi casa?, él prácticamente vive aquí. 

La puerta de mi habitación se abre, dejando a la vista a mi hermano, con una sonrisa en los labios & moviendo sus cejas de arriba hacia abajo haciendo un baile raro. Yo sonrío & voy hasta él, entonces me toma de la cintura & me pone sobre su hombro para bajar las escaleras como una cabra que acaba de come azúcar. 

- ¿Qué nadie puede ser normal en esta casa? - Oigo murmurar a Ana. 

- No, deberías estar acostumbrada. - Se queja Nico. 

Esperen, Nico. ¿No estaba perdido? 

- ¿Qué diablos haces aquí?, creí que te habías perdido. - Me quejo yo ahora, sin poder verlo a la cara. 

- Bueno, lo hice al salir de casa, si, pero luego no, así que eme aquí rubia. - Dice haciéndose un paso hacía adelante, dejándome ver a Juanpa & Mau con cajas de pizza, un oso gigante, & helado. 

¿Quiénes son estos chicos?, ¿Dios?, porque ahora mismo los veo como eso, Dios. Me han salvado de una depresión Pots-partida de Mario. 

Me acerco a ellos & los abrazo con fuerza, escondiendo mi rostro en el cuello de Mau. Es difícil aceptar que es lo más cercano a Mario en cuanto él pise ese avión & no vuelva en tres años, pero, bueno, el chiste de estar enamorado, es aceptar cualquier obstáculo. Voy a extrañarlo, claro que si, pero que va, bien dicen que si lo amas déjalo ir, si regresa es tuyo, sino, nunca lo fue. 

(...) 

Bajo del auto colgando mi mochila sobre mi hombro & camino hasta el aula, donde Ana & Juanpa se demuestran su amo "Discretamente". Mario está sentado en su asiento, a mil metros de todos, casi. Su mirada choca con la mía & de inmediato bajo la cabeza, sintiéndome débil ante él. 

Dejo caer mi mochila sobre la butaca & evito la mirada de Mario, no hace mucha falta hacerme tonta demasiado tiempo, ya que Martín llega a salvarme. Lo veo sentarse a mi lado & poner sus codos sobre la mesa, mientras sus ojos me miran con dulzura. 

- ¿Problemas? - Cuestiona haciendo una mueca. 

- Mario, aunque...es casi lo mismo. - Sonrío. - ¿Tú, algo nuevo? 

- No, nada hasta el momento. Me muero porque sea verano. - Hace un pequeño baile que me hace reír ruidosamente. 

- Yo no, en realidad. - Bajo la cabeza. - Todo esto es tan irreal. - Él suspira resignado & me mira de nuevo. 

- Escucha, Dani. él te quiere, lo sé, solo mira como te ve. - Giro mi cabeza, encontrando al mirada de mi perfecto imbécil. Me hace sentir pequeña. - & aunque haya una tormenta, siempre va a salir el arcoiris. Deja que se vaya, & como un boomerang, volverá, porque te ama. 

Bueno, es el consejo más sabio que he recibido en semanas. 



CHAN, CHAN, CHAN, CHAAAAAAAAN. Falta un capítulo para que acabemos, ahhhhhhhhh. ¿Qué creen que pase?, ah, & les agradezco el apoyo, ya llegamos a 5K, eso es algo hermoso. Las amo. Recuerden votar & comentar. 

Un perfecto imbécil. ‹‹ Mario Bautista. #CbllrsAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora