Capítulo 22. - Adornos navideños.

1K 91 4
                                    

Daniela POV. 

- ¿Por qué tenemos que hacer esto hoy, justo unas horas antes de navidad? - Pregunto colgando una hilera de luces en la ventana. 

- Porque...bueno, en realidad no lo se, mi madre puede llegar a ser muy despistada. - Responde mi hermano encogiéndose de hombros. 

- Saliste a ella. - Sonrío con gracia. 

- Eres una embustera, niña. - Me reclama con una sonrisa. - Anda, termina de poner eso antes de que Mario llegue & te arroje hasta la cocina de un golpe con esa puerta. - Se burla con una mirada divertida. 

Suelto una risotada por lo tonto que suena eso, pero mis carcajadas cesan en cuanto siento la puerta principal golpeando mi espalda, dejándome estampada sobre la pared, posiblemente con una costilla rota. Puedo escuchar a Alejo reír, & a Mario maldecir en voz baja caminando hasta mi sosteniéndome con sus fornidos brazos hasta dejarme en el suelo. 

- Bueno, no creí que la navidad fuera tan dolorosa. - Me quejo con una mueca.

- Pequeña niña rusa, las cosas no siempre van por el camino de rosas. - Dice Nico entrando por la misma puerta con Ana sobre su espalda.

- ¿Eso es Shakespeare? - Digo abrazándolo.

- No, eso lo leí en un cartel extraño en un local.

- Bueno, por lo menos leíste algo en la vida. - Río seguido de besar su mejilla.

Camino de nuevo hasta el árbol de navidad, que está siendo prácticamente destruido por mi estúpido hermano & mi estúpido novio, que hacen tonterías con las esferas. Ruedo los ojos & golpeo sus cabezas, ganándome una mala mirada por parte de ambos.

La canción "All I Want For Christmas Is You", se reproduce en la pequeña vocina que Juanpa trajo desde casa, antes de invadir la mía junto con Mau hace segundos. Comienzo a cantar la canción, colgando una pequeña hilera de serpentina con purpurina de color dorado, de inmediato Nico se pone a mi lado para cantar también.

La situación me recuerda tanto a cuando eramos niños, bailando por toda la cocina o por todo el vecindario, tomados de las manos mientras los vecinos se nos unían o simplemente miraban desde sus casas con sonrisas en el rostro. Desde que tengo memoria, todas mis navidades las he pasado con Nico & su familia, lo que me hace muy feliz & no sabría que hacer el día que no fuese así.

Miro a mi mejor amigo, que está muy concentrado colocando la estrella en lo mas alto del árbol, mordiendo su labio inferior & frunciendo en ceño tiernamente. Suelto una risa antes de lanzarme a sus brazos & envolver mis piernas en su cintura.

- Navidad... - Comienza a decir la frase que inventamos cuando pequeños.

- & una vida juntos... - Respondo besando su mejilla otra vez.

- Eres mi mejor amiga, siento miedo de algún día perderte. - Dice con la cara enterrada en mi cuello.

- Por favor, voy a quedarme contigo hasta que te mueras. - Respondo causando las risas de ambos.

- Disculpen arruinar la escena amorosa, pero siento que me están quitando el papel de novio. - Dice Mario con una mueca.

- Bla, bla, bla. - Dice Nico. - Ahora, pondré muérdago sobre sus cabezas & vas a besarla.

Cierro los ojos con frustración por la vergüenza que Nico está haciendomme pasar, como toda su vida desde que nacimos seguramente. Como aquella vez en la que me arrojó su jugo de manzana frente al niño con cabello negro que me gustaba cuando estábamos en jardín de niños. Aun tengo pesadillas por ello.

Estaba enamorada...

Nico se para sobre una silla, poniendo una rama de muérdago sobre nuestras cabezas, mientras Ana & Mau dan pequeños golpes en nuestros cuero con su trasero.

Tomo el rostro de Mario entre mis manos, admirando el brillo de sus ojos, mientras él sostiene mi cintura con dulzura, levantándome levemente del suelo. Sonrío antes de besarlo, sintiendo el sabor a hierba buena que siempre tienes sus labios, dulces & frescos a la vez. Rosa su nariz con la mía, formando un beso esquimal, mirándome a los ojos, diciéndome con la mirada lo que su boca no es capaz de expresarme.

- Siempre. - Susurra cerca de mi con una sonrisa danzante.

- Siempre. - Repito cerrando los ojos ante su tacto.

- Siento interrumpir este hermoso, & cito, hermoso momento, pero...¿Qué no eso es hiedra venenosa? - Dice Juanpa señalando a Nico.

- Bueno, lo intenté. - Dice mi mejor amigo sonriendo, seguido se hacer un mal paso que lo lleva a caer al suelo. Suelto una carcajada contagiosa.

Es la mejor navidad de todas, sin duda alguna...

Un perfecto imbécil. ‹‹ Mario Bautista. #CbllrsAwardsWhere stories live. Discover now