Capítulo 23. - Big Barbie recargada.

1K 84 11
                                    

2 meses después...

Abro los ojos con delicadeza, usando mis dedos como cepillo para mi, ahora desastroso cabello. Intento levantarme, pero un muy cansado Nico sujeto a mi cintura. Río suavemente antes de levantarme & caminar hasta el baño, donde amarro mi cabello en una coleta alta & despeinada, seguido de tomar mi teléfono de la mesita a un lado de mi cama. 

Reviso mis no tan importantes notificaciones & bajo hasta la cocina para buscar algo de alimento, que es lo único que necesito ahora para ser feliz...durante los próximos 45 minutos, probablemente. Introduzco un trozo de pan a mi boca & de un salto estoy sobre el sillón, buscando algo bueno que ver. 

El timbre comienza a sonar & maldigo por lo bajo mientras me levanto a regañadientes, acomodando mi pijama de pandas colo rosa. Abro la puerta dejando salir un bostezo, que es silenciado por una chica idéntica a Big barbie, solo que un poco más operada. Dios mio, podría pinchar su trasero con una aguja & sería asqueroso ver tanto silicón. 

- Daniela, ¿no es cierto? - Cuestiona con una ceja enarcada. 

- Esa misma. - Sonrío un poco. - ¿Quién eres tú? 

- Malena, es un gusto conocerte. - Habla escupiendo veneno en cada una de sus palabras. - Bien, se por buena fuente  que tu sabes mucho sobre ese chico, Mario. - Ensancha su sonrisa. - ¿Puedes decirme donde vive?, en serio lo necesito. 

- Bueno, soy su novia. - Remarco la frase. - Puedes decírmelo a mi. Su mueca de asco está cansadome. 

- Bueno, recuerdale que tengo que verle esta noche, a las diez. Nos vemos. - Me lanza un beso hipócrita antes de irse. 

¿Es normal que mi sangre esté más caliente que la caldera de esa bruja? 

Doy un portazo, arrojando mi ultimo trozo de ese delicioso pan con furia, mucha mas de la que yo esperaba dejar a la vista. Nico se encuentra bajando las escaleras con tranquilidad, ajustando sus pantalones de pijama, que por cierto son mas ridículos que los míos. Su mirada cae sobre mi semblante apunto de explotar, me sonríe con timidez seguido de salir corriendo como un idiota. 

La puerta vuelve a ser tocada, por un ser que desconozco, pero si es Mario, les juro que voy a golpearlo tan fuerte que tendrá que usar silla de ruedas los siguientes 7 años, ademas de que lo dejaré sin descendencia. Camino con rabia hasta la puerta & abro esta, encontrándome con la original & única, mi favorita hasta ahora, Big Barbie Silicón. Ella luce operada, si, pero dio, su hermana era un monstruo. 

- Daniela... - Suspira relajada. - He visto a mi hermana por aquí, siento...cualquier cosa que te haya dicho, ella está más loca que yo, ¿puedes creerlo?. - Sonríe cínica. 

- ¿Qué diablos es lo que esa perra operada planea?, sin ofende, claro. - Sonrío de vuelta. 

- ¿Cómo lo digo para que no suene tan mal? - Dice poniendo una mano sobre su barbilla. - Planea usar a Mario, no me preguntes por qué, no lo se. Ella está involucrada en un proyecto de negocios con la familia de Mario, & para cerrar el bendito trato, tiene que salir con ella. 

- ¿Por qué debería confiar en ti?, tu me odias, yo te odio. Vamos, ni siquiera se tu nombre. - Reclamo llevando las manos a mi cabeza. 

- No te odio, solo me encanta tu sufrimiento, ademas de que, en un inicio me atraía tu novio, pero ya no más. Por cierto, mi nombre es Elisa. - Me tiende una de sus manos. - ¿Confías en mi?, detesto a mi hermana tanto como tu ahora mismo, juntas podemos darle una patada en el trasero. 

Me quedo sería un minuto, pensando en si será buena idea confiar en esa chica, pero vamos, no hablas pestes de tu hermana solo porque si, Barbie sabe algo que me puede ayudar, & yo puedo ayudarla a ella, no creo que sea tan malo, ¿o si? 

- Pateemos el trasero de tu hermana. - Digo tomando su mano, dejando huir una sonrisa triunfante. 

Espero de verdad, con toda mi alma no estar metiendo la pata hasta el fondo. Probablemente me lleve en medio otro castigo, pero no importa tanto, me han castigado tanto desde que Mario llegó a mi vida, que no está de más alguno que otro resbalón más. 



(Las operadas en multimedia, ajjaja) 





Un perfecto imbécil. ‹‹ Mario Bautista. #CbllrsAwardsWhere stories live. Discover now