Tras La Pared/Saga Behind The Souls - Parte I

Capitulo 17: Obsesión

- Siéntate ya Tommy — dijo la empalagante voz de Matthew tras de mi

El y Nícolas tomaron asiento en las primeras sillas sin apenas mirarse ocupados de sus propios asuntos.

Camine despacio situándose en el sitio libre al lado de Nícolas.

- No Tommy... Ahí se sienta Perla — me dijo el moreno — ven... Siéntate conmigo

Obedecí

- ¿ Y a que hora nos honrará la dueña del santo con su presencia?

- Ya hemos mandado por ella — intervino Parker

Espere en silencio y sin apenas respirar la llegada de Perla. Si el vestido que vi pasar en la mañana era para ella, entonces se vería especialmente bella

Me reí ante mi pensamiento. Talvez moriría en cualquier momento y yo pensando en cómo se vería una mujer con un vestido.

La situación no era para nada normal: tenía la extraña sensación que la "humanidad" de Kauffman no tenía nada que ver con el hecho de que yo estuviera aquí.

Parecía como si... No... No podía ser...

- ¡Vaya! Hasta que te apareces

La voz de Matthew me saco de mi ensimismamiento y obligó mi vista a girar hacia la entrada del salón.

Ella estaba ahí, hermosamente adornada con el vestido azul noche de corte largo, su cabello castaño estaba recogido en una coleta alta mientras ondas artificiales caían por sus hombros. Los ojos sin duda alguna eran la corona de toda aquella preciosa visión.

Alguien le había maquillado sin duda alguna, el cargado delineado negro que llevaba acentuaba el magnetismo de sus ojos color sangre.

Nícolas y yo nos pusimos de pie al verla cruzar el umbral de la puerta

- Teníamos hambre — soltó Matthew al aire

- No la molestes Matthew — Nícolas se giró hacia ella — a válido la pena la espera ¿ verdad Tom?

Me petrifique. ¿Que coños debía decir? Si decía que si (como deseaba con toda el alma) me mataban y si decía que no... Me mataban también

- Tienes suerte Kauffman — dije — tu mujer es hermosa

- Ya lo haz oído Perla — dijo tomando su mano y guiándola hacia su sitio en la mesa — y tu que pensabas que se te veía mal

- En realidad dijo patética y no la culpo — farfulló Matthew — no entiendo porque le haz pedido que se arregle tanto cuando ya todos sabemos cómo es en realidad

- No le hagas caso a Matthew, Perla... Ya sabes cómo es...

Ella no contesto. Bajo la mirada hacia su falda y se perdió tras un mechón de pelo.

- Tom... Perla pidió especialmente que tú estuvieras en la mesa en día de hoy — comento Matthew con evidente afán de molestar — al parecer se han hecho muy buenos... Eh... ¿amigos?

Nícolas volvió a la misma expresión esperando una respuesta y quedarme callado justo ahora no podía significarle nada bueno.

- No somos amigos — susurré a la par que ella levantaba la vista para verme — solo ha sido mi enfermera

- Ha sido por humanidad — afirmó Kauffman — a ella le apena que Tom este encerrado mientras todos almorzamos aquí.

- Si, por supuesto — se burló el moreno

- Es una fecha especial, ¿Verdad Perla? Siempre eres tan caritativa

- Y a propósito de ello Perlita querida ¿cuantos años cumples? — se burló Matthew

- Basta Matt — le gruñó

Ella le devolvió la vista y ambas miradas chocaron con fuerza. Se quedaron así por algunos segundos.

- Veintitrés — hablo ella por primera vez

- Vaya y yo que creí que 16... Claro lo digo por el tamaño y la cara... Pareces una niña

- Ese es su encanto Matt — interrumpió Nícolas — es una ficha para una mujer aparentar menos edad de la que en realidad tienen ¿tu qué opinas Tom?

- Eh... Si... Supongo — conteste

- ¿ Y a ti cómo te gustan Tom? ¿Las mujeres de verdad o algo así como Perla? — sonrió Matthew

- Matthew me estás tocando las pelotas — dijo el ojiazul mientras bebía una copa de vino

- Déjala que se defienda sola Nick — le palmeteo el hombro

- Si tienes razón, vamos Perla, ¡respondele a este marica de clóset como se debe!

Esta vez fue Matthew el que se quedó callado mientras todos en la sala reíamos.

- Bien... Pues cuéntanos Tom ¿ como es tu novia? — insito Nícolas con extraño interés

- Pues... — balbuceé un par de veces intentando en vano hacerme una idea de Ría — bueno ella es hermosa

Perla bajo la vista hacia su plato y empezó a comer.

- ¡Oh si! Por supuesto que lo sabemos... Le hemos estado siguiendo a Bill y a ti por mucho tiempo antes de que... Tu sabes — me guiñó el ojo — guapa ¿eh? Mujer de buen cuerpo, alta, elegante

- Una buena mujer que exhibir — completo una vez más Matthew buscándole la vista a Perla

- Ría es una buena mujer por mucho más que su físico — afirme — soy afortunado, igual que tú Nícolas.

- Si que lo soy. Tu novia puede ser hermosa pero definitivamente no hay quien compare a Perla en belleza. Y me da gusto Tom, que te refieras a tu mujer con tanta admiración... Mi padre siempre me dijo que detrás de todo gran hombre, debe haber una gran mujer. Yo tengo a Perla y tu tienes a Ría.

Esa última frase la dijo fulminandome con sus enormes ojos celestes. Asentí con la cabeza y le dedique toda mi atención a mi plato de comida.

El resto del almuerzo transcurrió en un silencio sepulcral, roto únicamente por el sonido de los cubiertos al rozar la porcelana fina.

Nícolas alzó una copa y brindo por la salud de Perla cuando finalizamos y seguidamente se apresuró en posar en su cuello níveo un pesado collar de diamantes.

- ¿Te gusta? — le susurró muy cerca al glóbulo de la oreja, creando un ambiente incomodo para los que no participábamos de su morreo.

- Es muy bello — susurró ella con voz apenas audible

Salimos del salón y Liszak me escoltó hacia mí asilo. Por sobre el hombro vi subir a Perla de la mano de Nícolas hacia la segunda planta, y tras ellos Matthew, quien me hizo un gesto obsceno en sincero afán de burla.

Le volteé los ojos y camine tranquilo hacia mí encierro.

Cuando me hube echado en mi colchón destartalado, no pude evitar sentirme lastimado.

¿Se entregaría alguien tan puro a un cerdo como Kauffman? ¡Y que me importaba a mi!

Pero esa vocecilla que salía de mi cabeza cuando era niño y me portaba mal surgió y me susurró "claro que te importa"

Agite mi cabeza alejándola por completo e intente pensar en otra cosa.

Esa noche no pude dormir.