Algo que quisiera decirte (lucaya)

Navidad

Ha pasado un tiempo desde que acepté salir con Josh. Y finalmente ha llegado el 24 de diciembre. Después de pasar todo el día con familia y amigos, Lucas y yo hemos decidido celebrar la Noche Buena juntos.

- ¿A dónde me llevas Lucas?- y allí me encontraba yo, andando con un vestido rojo y un gran abrigo negro por las frías y nevadas calles de Nueva York, mientras mi querido novio me tapaba los ojos y me guiaba.

- Ya casi estamos, no seas impaciente.- me susurra al oído lo que produce en mi un escalofrío.

- No soy impaciente, solo es que llevamos mucho tiempo andando... Y solo tú sabes a donde estamos yendo.- me justifico.

- Impaciente.- Repite riéndose por lo que yo termino haciéndolo también, no sé por qué pero su risa me resulta de lo más contagiosa.

- Vale... Vale... Tal vez un poco.- Acepté.

- Madre mía, ¿qué le has hecho a mi querida Maya?

- Yo nada, en todo caso tú.- digo apartando rápidamente sus manos y girándome para mirarle fijamente a los ojos.- Tú me haces cada vez mejor.- le confieso antes de besarle.

- Menudo espíritu navideño.- añade cuando concluye nuestro ves con una gran sonrisa.

- Sí, así que no te acostumbres.- le advierto con otra sonrisa.

- Bueno, bueno... Gírate que ya hemos llegado.- Rápidamente obedezco y descubro el Topanga's bastante cambiado.

Unas guirnalda rojas decoran toda la habitación. Pequeñas velas rojas, doradas y plateadas crean un ambiente de lo más romántico, una grande adorna la mesa redonda con un mantel blanco y adornos dorados. Pero lo que realmente me ha sorprendido es que en uno de los platos de la mesa había un cuadro con un sombrero de vaquero y una guitarra española dibujados en él.

- Lucas... Tú...- susurro cogiendo el pequeño cuadro.

- Sé que no llega a la altura de los tuyos pero...

Sin pensarlo dos veces le he besado.

- Es perfecto.- le digo con una sonrisa.

- Genial, tenía miedo de que no te gustase.

- No... Pero ya que hemos llegado quiero darte mi pequeño regalo de navidad.

- No hace falta.

- Claro que sí.- digo antes de agarrar un pequeño colgante con forma de sombrero vaquero pero con una imagen de los dos, de hace unos años.

- Maya...

- Sé que es un poco hortera pero no he podido evitar comprarlo.

- Me encanta.

Cuando se dispone a darme un beso le detengo.

- Antes de eso, tengo otro regalo que darte.

- ¿Otro?

- Sí, pero este es más de los dos.

Rápidamente me giro para coger dos pequeños papeles de mi bolso.

- No...

- Sí, yo he pasado hoy el día con mi familia... Y tú me has acompañado... Así que me gustaría que en NocheVieja estuvieses con tu familia.

- Maya, no me lo puedo creer.

- Pues vas a tener que creertelo, ya he hablado con tus padres y todos vamos a viajar a visitar a Papi Joe y al resto de tu familia.- digo clavando mis azules ojos en los suyos.

- ¡Muchas gracias, Maya!- Me agradece besándome apasionadamente.

- De nada, te amo.- digo cogiéndole la cara con las palmas de mis manos y devolviéndole el beso.

- Yo también te amo.- Sus verdes ojos transmiten tanto amor que no habría necesitado esas palabras para saber lo que sentía.

Y así es como comenzó nuestra cena de NocheBuena, seguida de unos platos cocinados por Lucas que parecían de un verdadero chef. Sin duda uno de los mejores días de mi vida.  Me alegro mucho de tener a Lucas en mi vida. Sin embargo, presiento que algo no muy bonito va a pasar muy pronto, y tengo la sospecha que tiene mucho que ver con mi conversación pendiente con Josh. De todas formas voy a disfrutar de esta cena llena de amor.

Feliz Navidad.

Feliz Navidad a todos! Espero que lo estéis pasando genial. Es un gran día, así que como regalo OS traigo este capítulo que a pesar de ser cortito trato de transmitiros el amor que se sientes estos personajes.