Princess

♡ིུ If i had a heart

Sus pies fueron hacia el mostrador y tomo un muffin con chispas de chocolate. Tenía hambre; no había almorzado en la mañana, pero no tenía apetito por las mañanas. Su mente solo tenía cabeza para pensar en aquel hombre que había sido el amor de su vida. Era cuatro de julio, y eso lo ponía aún más sentimental de lo que ya estaba. Con el paso del tiempo Louis se dedicó a buscar a aquel hombre, que no solo tomo su corazón, sino también su cuerpo y alma, dejándolas rotas en mil pedazos. Pero entre más buscaba se dio cuenta que se lo había tragado la tierra sin más. Desapareció de New York como un fantasma, sin dejar rastro, y él, siendo un recién convertido por aquel licántropo—que nunca se enteró quién había sido el culpable de arruinar su vida con tal maldición— le fue imposible controlarse con su desaparición. Mato a gente inocente, los había desgarrado, pero nadie lo ayudaba a controlar esa sed de venganza que le carcomía el cuerpo, hasta que llegó Zayn Malik a su vida. Lo enseño a controlarse, a sobrellevar la carga de que se había convertido en un asesino sin corazón, pero por más que siempre se controle y aprendió a vivir con ello, su parte animal siempre estaba ahí, sin desaparecer.

—Serían tres euros—se giró hacia el frente, entregando el café a la mano de aquel hombre extendida. Parpadeo varias veces seguidas. Había una cicatriz recta en el pulgar, una cicatriz que el había conocido hace mucho tiempo atrás. Sus ojos se levantaron y sintió que el corazón se le salía del pecho por un segundo.

Era él, estaba ahí, con sus embriagantes ojos esmeraldas.

Sus labios se abrieron y un audible susurró salió de ellos:—Harry...

Los carnosos labios de Harry Styles se extendieron en todo su resplandor, revelando unos coquetos hoyuelos que no había visto en años, pero que recordaba con perfección.

—Mi dulce louis, ¿Me extrañaste?

Louis quizo echarse a llorar ahí mismo, haber saltado a sus fuertes brazos y besarlo hasta que no tuviera fuerza alguna; hizo lo contrario.

—Lárgate—susurró, apretando sus puños con tanta fuerza que sus garras comenzaron atravesar la palma de la mano.

Los ojos de Harry brillaron en un toque de tristeza, pero hablo suave, tanto que Louis quizo cubrir sus oídos para no escucharlo.

—Regresé por ti después de tanto tiempo, y no me iré hasta volverte mío de nuevo, incluso si me lleva cien años más.

Una silenciosa lágrima se deslizó por la mejilla caliente de Louis, y el dulce tacto de Harry borrándola de su piel.

—Te odio.

—Te amo, mi dulce Louis, a pesar de que nuestras naturalezas se odien, yo te amo tanto que arrancaría mi corazón inerte del pecho para dártelo en tu mano. Vine por ti después de acabar con aquellos que te separaron de mi.

—Vete, no te quiero más. ¡Me abandonaste, me dejaste y no volviste por mi cuando más te necesitaba!—grito. Estaba llorando de rabia que hervía su sangre. Las manos de Harry, heladas, lo tomaron por las muñecas con fuerza.

—Vamos afuera.

En el callejón que Harry lo metió no hizo más que enfadarlo aún más. Sus ojos cambiando de color a un brillante dorado, empujó a Harry lejos de el. Estaba pasando. Gruño y grito con más fuerza, golpeando la pared de ladrillos sin lastimarse.

Harry lo tomo de la parte trasera de su cuello, acorralando en el. Forcejeo con fuerza, pero la imponente y sobrenatural fuerza de Harry lo dejo en el mismo lugar.

—Respira, tienes que respirar—le susurró con su voz ronca en su oído—. Se que odias convertirte en un animal.

Lloriqueo y siguió luchando para soltar el agarre del vampiro. Pero Harry solo pego completamente su cuerpo al de Louis, robándole un gruñido.

—¡Suéltame!

La mano de Harry se deslizó de la pared hacia su cadera, pegando con fuerza su dotado trasero a su entrepierna. Gruño, pero sintió sus piernas temblar por la sensación.

—No.

—Hijo de pu...—se sobresaltó cuando la mano de Harry lo giró hacia el, quedando frente a frente.

—Vine por ti y no me iré con las manos vacías, mi dulce lobito.