Every Minute [HunHan]

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ADVERTENCIA: Sobredosis de ternura.

¡A leer!

Viernes 13

Luego del primer día que SeHun había empezado su "plan" (principalmente ideado por Binnie) se encontraba más tranquilo, ya se imaginaba cómo serían las próximas reacciones de LuHan y las preocupaciones no eran mayores en él. 

Había sido un buen final del día cuando entregó la última flor en medio de MeiLing  y sus dos hermanas, fue incómodo absolutamente, pero valió la pena cuando LuHan no quiso separarse de él por un largo tiempo. Incluso,provocando que los cinco chicos acabasen en un cercano parque luego de los berrinches del castaño  por no querer dejarlo. 

Sin duda, había sido un gran día y ya no podía esperar comenzar el día viernes. Las flores estaban ordenadas, solo eran seis de estas, pero de distintos tipos y colores. A diferencia del día anterior estas a además de llevar sus respectivas notas colgantes del tallo también portaban un pequeño bombón con diferentes formas junto a las notas,desde corazones hasta otras formas como lunas o estrellas. Era perfecto, definitivamente. 

A diferencia del día anterior, volvió a retomar la rutina con su madre y YooA, yendo primero a la escuela de su hermana y finalmente, a su destino. Con los ramos firmemente aferrados a sus manos y la pequeña y delicada flor por sí sola, se adentró a la recepción que por fortuna de él allí le esperaba BaekHyun que luego de verle cruzar la puerta,dejó de lado su conversación con la chica que también llevaba un uniforme, pero de otro color. 

BaekHyun saludó a YooRam  y a él, por supuesto y con ello prosiguió a ayudar al menor con los ramos y comprobar que tanto como las de ayer, estás seis eran realmente lindas, sobre todo la que colgada sin envoltura y de un lindo tono blanco.

 —Hasta más tarde, señora Oh —Se despidió el fisioterapeuta amablemente, correspondido en una sonrisa y una despedida de la mujer está no se retiró hasta abrazar fuertemente a su muchacho y besar su frente para partir. 

BaekHyun  tenía una pequeña idea para impresionar a LuHan hoy, quería ser de ayuda esta vez y no estaba dispuesto a solo quedarse a espiar detrás de la puerta, ¡él también quería participar! 

Por ello, el camino hacia la sala fue realmente silenciosa por su parte, fue extraño para SeHun, siempre tan acostumbrado a las palabras de su amigo o cualquier estupidez que surgiera de él, pero no le dio mayor importancia cuando finalmente cruzaron la puerta corrediza hacia la sala. 

—SeHun—Murmuró el mayor, cerrando suavemente la puerta para ver también, como era que SeHun caminaba hacia la camilla y subía hasta acomodarse, como cada día.