Conociendo- Aceptando

1.2K 98 11
                                    

-Te encontré, pequeño Moyashi

Lavi lo había descubierto. Al llegar al bosque no fue difícil dónde podría encontrar a ese niño. Una vez ubicado se acercó lentamente, asomándose por detrás del gran árbol, tratando de no hacer mucho ruido. Al menos para que el castaño no lo notara hasta que le hablara.

-¡¿Queee?! ¡Vete de aquí!

Al percatarse de esa presencia, nuestro querido Red reaccionó de forma hostil. A Bookman Junior no le afectaron aquellas palabras. Ya se esperaba ese tipo de reacción por parte del menor, por eso le contestó con bastante calma y con su habitual sentido del humor.

-Jo, eres muy cruel. Debes ser mas considerado con tus amigos cercanos.

De nuevo esa palabra. Seguía un poco confundido, ya había encontrado al pequeño, pero ¿que le diría? Aún no llegaba a una respuesta certera. Esperaba no cometer un error o si no el Panda se enteraría y Lavi no se la acabaría, y por los bastantes reclamos que ya estaba recibiendo anteriormente. Si Lavi era observador, Bookman tenía esa capacidad al triple.  
La mirada del pequeño se desvió fijándola ahora en el suelo. Tenía el ceño fruncido. Y con estas palabras trató de arreglar la situación. Más que arreglar quería hacer notar que el nunca había tenido a una simple persona para llamarle amigo, mucho menos tener a varias para considerarse sus... amigos. Eso.

-Yo nunca he... tenido amigos.

Era cierto, y ya lo había aceptado con determinación hace mucho tiempo. Es por eso que ahora estaba confundido, pues al decir esas palabras un nudo se estaba formando en su garganta, un dolor espantoso. Mientras le contestaba su voz era mas queda, y apretaba con su mano derecha su brazo izquierdo. En verdad le afectaba tener ese brazo. ¡Maldición que si! ¡Estaba sufriendo por culpa de ese brazo!
Lavi supo que no era mentira. Se le quedo viendo unos instantes, decidiendo sentarse a lado del castaño. Solo esperaba que el otro no decidiera irse. Mientras Red veía la cercanía del pelirrojo al sentarse, tomó la decisión de escucharlo.

-Entiendo.

-No es cierto...

-Claro que lo entiendo, como sucesor de Bookman, esta mal relacionarse con las personas de forma amistosa. Así he estado por casi 18 años.

Pero Red no respondió. El hecho era no conocer qué era un Bookman o de lo que fuera que estaba hablando el pelirrojo. Por eso se limito a no contestar nada. No conocía al tipo y menos su pasado.Podía ser una mentira para tratar de mostrar algo de compasión o empatía, y Red no necesitaba ni quería recibir eso de los demás. Además...

-Así que no me crees.

-Bueno, pude notar que eras un poco, hipócrita.

Porque esa fue su primera impresión. Cuando vio la sonrisa del chico ojiverde, notó una pequeña falsedad y algo forzada por esa acción, por el simple hecho de sonreír. Eran mínimas las veces, pero uno o dos ocasiones habían bastado para poder percatarse de eso. Y era algo que se le había quedado muy grabado.  
Eso para Lavi fue un golpe duro. No solo por el hecho de ser así al principio cuando entró a la Orden, pero que un niño que solo lo había visto por pocas veces se lo dijera, era bastante sorprendente. No pudo evitar mostrar su cara de doliente. Ni Allen de grande se lo había dicho o se hubiese percatado de eso. Pero ese niño, sí.

-Ya. Ha decir verdad, cierto es que solía ser así. Mi personalidad no la puedo ocultar, me gusta ser así, pero, antes no tenía ni un contacto afectivo. Porque las personas eran y, bueno, siguen siendo estúpidas. He llegado a conocer gente que realmente merece ser conocida y querida. En algún momento de tu vida tambien los encontrarás.

No era del todo cierto, pero tampoco había mentira. Solo había agregado palabras para sonar un poco más convincente. Tenía la esperanza que funcionara. Esperaba su respuesta, pues el pequeño aun no respondía. Analizarlo, tenía que analizar sus acciones. Y registrar. Después de todo, seguía siendo un aprendiz de Bookman, era algo que ya no podía evitar hacer.

Pequeño Accidente - YullenOù les histoires vivent. Découvrez maintenant