Capítulo 21

73.6K 6.5K 620
                                    

Me levanto bien temprano para ir a clase de dominación, pues hoy es jueves y hoy la clase empieza antes. Sé que la directora me dijo que los efectos secundarios no se detendrían, pero hoy me desperté sintiéndome mejor.

A pesar de que me levanté antes, Raiza se fue primero que yo, pero eso fue porque ella ni se molestó en arreglarse, apenas se dio una ducha y se vistió, ni siquiera se peinó. Yo en cambio, el día anterior estoy segura de que estaba desechable, por eso hoy quise arreglarme aunque sea un poco.

La clase del día estuvo súper casual, ósea solo practicamos con los poderes pero nada nuevo, aunque no paro de preguntarme qué habrán aprendido los días en los que falté.

Pues bueno, el día pasó rapidísimo. Y al terminar con mi clase de manejo de la hipnosis, me dieron de nuevo nauseas, así que salí corriendo muy rápido hacia mi habitación, pero me estrellé de nuevo con Evan. El cual al verme, se quedó perplejo, mirándome fijamente a los ojos. Tardé tan solo diez segundos en notar que mis gafas se habían caído al suelo con el golpe, y que lo que observaba él eran mis ojos bicolor. Rápidamente me agaché y tomé mis gafas, me las volví a poner y salí a correr de nuevo para esquivar preguntas. Lo escuché llamándome a lo lejos, pero lo ignoré, sabía que me iba a hacer muchas preguntas, y no estoy segura de ser capaz de responderlas, además de no querer hacerlo.

Al entrar en mi habitación, cerré la puerta tras de mí, me recosté en ella y me deslicé hasta el piso. Evan había visto mis ojos. Yo creería que la historia de Abigail es bastante conocida aquí, así que es obvio que todos en el instituto deben saber cómo luce una mezcla como yo, y deben saber identificarla con solo verme. Creí que podría durar más ocultando el secreto, y tan solo en mi primer día ya lo he estropeado. Sé que en algún momento tendré que hablar con Evan, pero por ahora trataré de alejarme lo más posible de él.

Vomité un poco, y ya después me sentí fresca como una lechuga. Raiza llegó unos pocos minutos después y se la veía muy feliz, así que no pude evitar preguntar.

-¿Qué te trae tan contenta?

-Nada, es solo que conocí a un chico- dijo sacándose la chaqueta.

-Ah si?¿Y cómo se llama?- dije viéndola con mirada pícara.

-Se llama Evan- un momento, ¿Evan? -. Pero no me gusta, solo es que me contó un chiste muy bueno que no me ha dejado de dar risa.

-Ah, ¿y cómo se conocieron?- dije, aunque se nota por mi tono de voz que esto me resulta un poco incómodo.

-Pues, es que él es amigo de un chico de tierra, que sí me gusta, y me lo presentó. Por cierto, creo que el chico de tierra se está empezando a fijar en mí, se llama Matthew y es muy adorable conmigo, y pues como eres mi mejor amiga, le he hablado sobre ti, espero que no te moleste- negué con la cabeza -, bien, y pues creo que Evan es su mejor amigo, no estoy muy segura, pero creo que así es, y pues Matthew me dijo que si nos gustaría tener una cita doble- ¡¿qué?! -. Sé que es inesperado, pero Matthew no quiere dejar a Evan solo y pensó que se podrían llevar bien, y yo también lo creo, pues Evan es un chico de lo más de dulce y carismático, de seguro te caería bien.

-Amm...- ¿cómo se supone que le arruine esto a mi mejor amiga?

-Ay por favor Avril, haz esto por mí, Matthew en verdad me gusta, y creo que podría funcionar.- sus ojos de perrito hacer que me rinda.

-Ash! Está bien, lo haré solo por ti, pero me debes una, y no me puedes obligar a socializar con Evan o con Matthew, okay?

-Sí, sí, te lo prometo, ¡eres la mejor!- me dio un fuerte abrazo que casi hace que me caiga.

-¿Y cuando es?- dije tomándola de las muñecas para finalizar el abrazo.

-Es mañana en la tarde. No es a cenar ni nada por el estilo, es solo salir a conversar un rato y conocernos mejor, ¿qué opinas?

-Pues, no es el mejor plan del mundo, pero supongo que no está mal.

-Gracias por hacer esto por mí. Ahora, es tiempo de ir a cenar o nos dejarán sin comida.

-Cierto- dije asintiendo fuertemente con la cabeza y después salimos.

La comida fue como siempre un gran buffet, y aunque estaba delicioso, no lo pude disfrutar del todo bien, pues Evan no me quitaba los ojos de encima. Por una parte sentía que me miraba con odio, pero por otra, sentía que me estaba analizando, como si fuera algo que nunca creyó ver. La tensión se podía agarrar en el aire. ¿Cómo rayos se supone que lo voy a esquivar, si vamos a tener una cita doble en la cual por más de que no quiera hablar tendré que hacerlo? Agh!

Cuando estamos con Raiza en nuestro cuarto, charlamos como una hora, y finjo que estoy dormida hasta que Raiza sí lo está. Descanso un poco sobre mi cama, esperando a que aquel guardia envíe la nota por debajo de la puerta. A partir de ahora la vería todos los días a las once. Pero, el problema es ¿cómo le diré que en mi primer día ya alguien se ha dado cuenta de mi secreto? De seguro estará súper molesta conmigo.

Momentos más tarde entra la nota con la misma frase de la vez pasada. La vuelvo a doblar y me pongo mis gafas. Esta vez no me puse gorro, porque mi cabello permanecía rubio, aunque ahora un poco más oscuro por alguna razón, pero mis ojos no eran ni azules ni grises, eran ambos.

Salgo y dejo que el guardia me guíe hasta la oficina de la directora Rogers.

Al estar con ella, retiro mis gafas, y logro ver una enorme sonrisa en su rostro.

-Hola Avril.

-Hola directora Rogers.

-Pues Avril, hoy no haremos la gran cosa. Solo te enseñaré como lo básico de tu nuevo elemento, y las mayores complicaciones que puedes tener a lo largo de este proceso.

-Genial, pero, ¿puedo decirle algo antes?- mi cara hace que la sonrisa de la directora disminuya un poco.

-Claro, ¿que ocurre?

-Amm...¿Todos en el instituto saben la historia de Abigail?

-Si Avril, su historia es demasiado conocida, y es enseñada por precaución- ¡rayos! -, ¿por?

-Pues, hoy iba un poco apurada hacia mi habitación, y en el trayecto me choqué contra un chico que conozco, lo cual hizo que mis gafas se cayeran y él vio mis ojos, y creo que lo descubrió.- lo dije tan rápido que temí quedarme sin aire.

-¿Cómo se llama el chico?- después de lo que le conté ¿me hace esa pregunta?

-Evan.

-Evan... ¿tiene cabello castaño, ojos marrones y es alto?

-Sí.

-Okay Avril, no te preocupes por él, pero si puedes no hables tanto con él, si insiste, pues creo que no tendrás más remedio, pero asegúrate de que no le cuente a nadie más- asentí -. Continuando, debes saber algo importante. Resulta, que me di cuenta de algo; Abigail tenía dos elementos compatibles, como lo son la tierra y el agua, pero tú, tienes dos elementos contrarios, aire y agua. Eso puede hacer que te desmayes con frecuencia y en el momento menos esperado, además de hacer otras cosas no muy importantes, así que quiero que tengas mucho cuidado.- asentí.

Unas dos horas más tarde, vuelvo a mi habitación, después de que la directora me ayudara con el poder extra y con eso de sentir mi elemento, además de explicarme ciertas precauciones, y lo mejor que posee mi segundo elemento y cómo puedo sacar ventaja de esto.

Hola! Quiero darles mis gracias infinitas por sus 713 leídas y sus 66 votos, están llenando mi kokoro de una manera que no se imaginan. El siguiente capítulo será interesante, además quiero comentarles que no voy a profundizar en los entrenamientos de Avril y la directora, ya que siempre será casi lo mismo. Si les gusto el cap comenten y voten, no sean lectores fantasma☺️, hasta la próxima semana.

Pao.

Instituto de ElementosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora