Capítulo 7

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A Eunhyuk le gustaba pensar en sí mismo como una persona compasiva. Se entregaba de sí mismo todo el tiempo. Dinero a los sin hogar, sangre a la Cruz Roja, su música al mundo. Y no había nada que no hiciera por sus amigos. Yuna y Jungshin -y ahora Donghae- eran más como una familia para él que sus padres y su hermana. Hacerlos felices lo hacía feliz.

¿Entonces por qué su estómago dio emocionados saltos mortales cuando Donghae apareció nerviosamente en su puerta pidiendo un lugar donde quedarse después que una tubería rota inundara su apartamento?

—Lo siento, —dijo Donghae por al menos tercera vez desde que dejo caer sus maletas en el centro de la sala de estar— No debería ser por más de un par de semanas. El dueño dijo que tendría la tubería puesta y los suelos y paredes arreglados para entonces.

Eunhyuk tenía sus dudas sobre eso, pero él no quería decírselo a Donghae, que ya se veía tan triste que rompía el corazón de Eunhyuk. —Mi amor, nuestra casa es tuya. Eres bienvenido a quedarte el tiempo que necesites.

La sonrisa que le dio Donghae hizo revolotear el interior de Eunhyuk. —Gracias Eunhyuk. Realmente lo aprecio.

Metiendo las manos en los bolsillos traseros, Donghae miró a su alrededor—. Así que... um. Creo que dormiré en el sofá.

Nadie, y menos aún Eunhyuk, podría resistirse a tal apertura. Se acercó más y pasó una mano por el brazo de Donghae.

—No duermas en el sofá. Comparte mi cama.

Un rubor muy atractivo coloreó las mejillas de Donghae. —Yo... Yo no...

—Cariño, por favor. —Eunhyuk pasó sus brazos sobre los hombros de Donghae, y lo atrajo hacia sí. Cuando Donghae no se resistió, Eunhyuk se agachó para acariciar sus suaves rizos de ébano—. Yuna y Jungshin saben que estamos durmiendo juntos.

— ¿Qué? —Donghae luchó para salirse del abrazo de Eunhyuk y se lo quedó mirando, con sus salvajes ojos oscuros—. Yo pensé que estabas bromeando acerca de eso antes. ¿Cómo demonios lo saben? ¿Tu les dijiste?

—Te prometí que no lo haría.

—Lo sé. —Donghae lo miró—. ¿Lo hiciste?

La implicación de que había roto su promesa lo dañó, pero Eunhyuk sabía como hacer para que no se notara. Levantó la barbilla y sostuvo la mirada de Donghae. —No, Donghae, no lo hice.

—Entonces, ¿cómo lo saben?

—Hm, déjame pensar. —Eunhyuk tocó con un dedo sus labios—. ¿Por qué no están completamente ciegos?

—Muy divertido. —Con un profundo suspiro Donghae cerró la distancia entre ellos, envolvió con sus brazos la cintura de Eunhyuk y apretó—. Lo siento. Toda esta mierda de mi departamento me tiene tenso como el infierno.

La manera en que Donghae se apretó contra su pecho produjo dentro de Eunhyuk una extraña sensación de calor. Deslizó un brazo alrededor de las costillas de Donghae y enterró la otra mano en su cabello. —Está bien, mi dulce Hae,— susurró, frotando el cuero cabelludo de Donghae en lentos círculos—. Has tenido un día difícil. Es comprensible que estés estresado.

Donghae lanzó un sentido suspiro y se acurrucó más cerca. Sonriendo, Eunhyuk apoyó la mejilla en la parte superior de la cabeza de Donghae. Le encantaba la forma en que Donghae se derretía cada vez que Eunhyuk jugaba con su cabello.

—Creo que puedo compartirla contigo, —murmuró Donghae en el hueco de la garganta de Eunhyuk—. Pero tendremos que llegar a algún tipo de sistema para avisarnos uno al otro si cualquiera de nosotros tiene... compañía.

EunHyuk [HaeHyuk/EunHae]Where stories live. Discover now