Capítulo 26

Mulai dari awal
                                    

Me dirijo hacia el césped marchito y me siento sobre él mientras juego con las flores igualmente marchitas que el césped. 

El día está reluciente pero el césped está húmedo. Debió llover ayer. O hoy. Pero, qué día es hoy? Hace cuanto tiempo que estoy aquí? Decido ignorar esas preguntas por ahora, porque terminarán agobiándome más de lo que estoy. Respiro hondo y empiezo a tararear una canción de cuna. La habré oído en algún lugar.

De repente siento a alguien sentarse a lado mío y volteo con brusquedad. Es muy bonita, pero está muy desarreglada y sucia. 

<María> susurra mi mente.

-María -digo casi de una manera inaudible.

-Ya estás bien loca -espeta con preocupación.

Frunzo el ceño ante su comentario. Yo no estoy loca. Sin embargo, si ella me conoce, quizás recuerde las cosas que yo no.

-Por qué estoy aquí? -pregunto sin más.

Ella clava sus dilatados ojos en los míos, supongo que tratando de averiguar si estoy bromeando. Al darse cuenta que no, niega continuamente con la cabeza.

-En serio no lo recuerdas? -niego con la cabeza y ella suspira -Me dijiste que te encerraron aquí porque intentaste suicidarte un par de veces. Que veías a tu difunta mamá y hablabas con ella. 

Mi mamá está... 

No puedo terminar la frase. La miro expectante, esperando que diga que solo es una broma, sin embargo, su expresión sigue manteniendo una seriedad profunda.

-Intenta recordarlo -espeta y luego me anima -Tú puedes.

Trato de sumergirme en las profundidades de mi mente en busca de cualquier pequeño fragmente de recuerdo. Me esfuerzo, realmente lo hago. La cabeza me empieza a martillar y siento que me desmayaré en cualquier momento. Sin embargo, allí está. La veo en el bosque acariciándome el cabello, sonriéndome y hasta llorando lágrimas de sangre.

-Yhenny -susurro y hago una mueca por el dolor de cabeza que tengo.

-Tranquila, mientras no se pasen de ciento cincuenta, volverás a recuperar la memoria. Solo ten paciencia. -me sonríe y se lo agradezco porque dentro mío logro distinguir un poco de alivio.

Miro a mi alrededor en busca de algo que me traiga recuerdos, pero no hay nada. Hasta que lo veo... Fabrizzio está buscándome con la mirada desesperadamente. 

-Hey! -exclama María -Tú y el enfermero...

Qué? No lo había pensado.

-No lo recuerdo -admito.

-Yo creo que sí. -dice señalándolo con la cabeza -Solo mira como se ha desesperado por el simple hecho de no verte por diez minutos.

Tiene razón. Está como loco y se ve tan tierno con esa expresión de preocupación. No puedo evitar sonreír.

En un instante él clava sus ojos en los míos y por unos segundos nos limitamos a observarnos mutuamente, hasta que él reacciona y me hace señas para que vaya con él.

-Hablamos luego, María -me despido.

-Hasta luego, saltamontes -espeta.

Frunzo el ceño mientras la miro y ella rompe en carcajadas. Me encojo de hombros y voy hasta Fabrizzio.

Es tan atractivo. Al ver que me acerco, sonríe y se le enchinan los ojos. Me ofrece una mano y yo la acepto.

-Hora del medicamento -me informa.

Asiento y dejo que me guíe a mi habitación mientras nuestras cálidas manos siguen entrelazadas.

Llegamos y él como todo un caballero me abre la puerta para que pueda pasar. 

-Gracias -espeto sonriendo.

Tomo asiento en mi fría cama de metal mientras él rebusca el medicamento en su bolsillo.

-Aquí está -exclama cuando lo encuentra y me lo extiende en su mano junto con un vaso de agua.

Lo acepto y lo tomo dando pequeños sorbos del vaso. Luego se lo vuelvo a pasar. 

-Hey... -empiezo.

Siento que mis mejillas arden por los nervios pero trato de no pensar en ellos para apaciguar esta sensación.

-Qué sucede, Yoselyn? -me pregunta con una chispa de preocupación en sus ojos.

-Tú... -bajo la mirada pero al instante la vuelvo a alzar -Eres mi novio?

Inmediatamente se ruboriza y agacha la mirada nervioso. Es tan tierno.

Sonrío instintivamente. Su reacción ha respondido mi pregunta por sí sola.

Me acerco a él y acuno su rostro entre mis manos.

-Gracias por cuidarme -espeto y él solo sonríe. Pero juro que es la sonrisa más hermosa que he visto.

Sin darme cuenta y sin dejar que diga una sola palabra, fundo mis labios con los suyos. Y me lleno la boca de un dulce sabor, su sabor.



MI BOSQUETempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang