No soy la típica Nerd

Capítulo N° 2 "Edward"

«Tengo que hacer una elección 
Una decisión difícil 
Escucha mi voz »

The fish of me - Hoobastank.

¡Pase toda la maldita noche pensando en que are!  me doy vuelta por toda mi cama y nada de nada ¡Dios! ¿Por que no me dejas dormir?

—Eres tú la que piensa y piensa, no culpes a dios— . genial habló la mejor consejera del mundo mi conciencia

—¡Ay! ¿Por qué no te callas?—Exclamé

—¿Y por qué no te callas tú?

—¡Ay por dios!  se supone que estás para darme consejos no para pelear o ¿Me equivocó?

—Ahh pues tú eres la estúpida que hace que peleamos

—¿Sabes que? ¡vete a la mierda!— Dije ¿ignorándola?

Salí de mis pensamientos. Por el sonido de mi puerta. Es mi madre. ¿Por que esta despierta tan tarde?

—¿Cariño? ¿Estás bien?—  Pregunta  entrando con su sonrisa encantadora ¿Por qué nunca deja sonreír?  Comienzo a pensar que usa botox o algo parecido. No si se han dado cuenta. Pero cuando te aplican el botox, tienes que estar algunas hora con la misma expresión. Al menos eso es lo que dice la mamá de Becca.

—Si. ¿Por que lo preguntas?

—No lo sé. Tal vez, te escuché hablando sola desde mi habitación y quise saber si mi hija está tan loca como para llevarla al psicólogo—. Jaja tan fuerte estaba hablando.

—Lo siento mamá. Es sólo que. ¿Tenía una pelea mental? - Dije no muy segura de mi palabras.

—Lo estás diciendo o preguntando—miraba con la ceja fruncida—. Mira cariño. No se lo que pasa, pero por favor intenta decirlo

—Bueno—. Su mirada era tan sincera que no aguante más y mis lágrimas comenzaron a caer lentamente—. Desde que nos cambiamos de casa y me cambiaron de instituto— suspiro —. Un grupo de chicos ríen de mi, por leer o por mi manera de vestir—. mi madre da un pequeño masaje en mi espalda—. No tengo la menor idea que es  molesta. Al principio no era así. Solo era una más. 

—Ohh cariño ¿ Por que nunca no lo dijiste?—. Su expresión refleja preocupación.

—No los quería preocupar. Edward siempre se encuentra de viaje. Tú tienes amistades en este lugar y no quería que nos marcháramos por mi culpa. Además tampoco quiero volver.

—Kylie. No importa si tenemos que cambiarnos de país, por mi me iría hasta China si es necesario. Tú bienestar es lo más importante para mi—. Acariciando mi mejilla con cariño.

—Gracias mamá—. Nos abrazamos.

—Cariño. Si quieres puedo cambiarte de instituto.

—No. Es mi último año. Es la mitad de año escolar. Ademas, voy a sacar mi carácter.  No puedo seguir así.

—¡Perfecto! Así se habla cariño. Pero no quiero ir todas las semanas a la oficina del director—. Una sonora carcajada se  escapo.

—Tranquila mamá. No sucederá.

—Bien pequeña. Ya son las cuatro de la madrugada. Creo que es hora de dormir ¿no?—. Las cuatro de la mañana. Solo tengo tres horas para dormir.

- ¿Tan tarde es?. Bueno mamá. Ve a dormir—. Le di un beso en la mejilla.

—Buena mañana. Kylie —. Mamá salió riéndose camino a su habitación.